Capitulo 6: Harry

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Todos habían terminado de comer y la lluvia comenzaba a amainar. El sheriff, junto con un grupo de voluntarios, estaba planeando salir a revisar a los demás habitantes del pueblo. Las casas estaban bastante distanciadas unas de otras, así que decidieron dividirse para cubrir más terreno en menos tiempo.

Tom fue el primero en ofrecerse, con una actitud de "superhéroe" que a Hermione le resultó repelente desde el primer momento. Su expresión de desagrado no pasó desapercibida para Bellatrix, quien le dedicó una sonrisa cómplice y puso una mano en su hombro, provocando que Hermione se estremeciera ante el inesperado contacto, aunque no le desagradó. Bella susurró cerca de su oído: "Siempre quiere ser mejor que los demás". Hermione asintió, y ambas siguieron escuchando los planes de los voluntarios.

Cuando se disponían a salir, Bellatrix preguntó: "¿Y nosotras, en qué vamos a ayudar?".

Antes de que el sheriff pudiera responder, Tom se adelantó: "Ustedes son débiles, es mejor que se queden aquí o solo nos retrasarán".

El comentario cayó como una bomba. Ninguna de las mujeres presentes lo tomó bien. Si tan solo los hombres supieran por lo que ellas habían pasado, sabrían que eran mucho más fuertes de lo que aparentaban. Todas las mujeres, incluidas Hermione, Rony y otras dos que estaban en el local, pusieron gestos de disgusto.

El sheriff dio un paso al frente, tratando de calmar la situación: "Tranquilas, chicas. Por ahora estaremos bien. Solo prepárense por si encontramos a alguien herido o que necesite refugio. No sabemos si todos lograron ponerse a salvo".

Rony les dijo a las chicas que el sheriff tenía razón, y que lo mejor sería acondicionar un espacio en el depósito con un catre y algunas medicinas, por si acaso se necesitaba. Luna, una chica muy pálida que hasta ahora Hermione no había escuchado, tomó la palabra: "Deberíamos ir a mi tienda y traer cosas de primeros auxilios. No tengo mucha variedad, pero no sabemos en qué condiciones estarán los que salieron ni cuánto tiempo más estaremos aquí. Al parecer, las carreteras están inundadas, tapiadas o bloqueadas por árboles caídos".

Luna era dueña de la pequeña botica del pueblo. Tenía unos 23 años, con cabello rubio, grandes ojos azules y una piel muy pálida que la hacía parecer aún más delicada. Hermione, intrigada y conmovida por la determinación de la joven, se adelantó hacia ella, se presentó y le ofreció acompañarla. Rony dudó un poco, pero luego asintió. El local estaba a unos doscientos metros, y lo que Luna había dicho tenía sentido.

"Está bien, pero tengan cuidado," advirtió Rony. "Vayan rápido y regresen lo antes posible."

Hermione asintió y, junto a Luna, se dispusieron a salir, conscientes de que cualquier ayuda podría ser crucial dadas las circunstancias.

En el camino hacia la tienda, Hermione y Luna vieron cómo algunos locales de la zona que no habían sido protegidos estaban destruidos. Vitrinas rotas, árboles incrustados en ventanas... Era aterrador verlo ahora, y Hermione no pudo evitar pensar en lo cerca que habían estado del peligro. Sin embargo, su noche había sido sorprendentemente relajada al lado de una mujer hermosa. Hasta ahora no había tenido tiempo de reflexionar sobre ello, pero el calor del cuerpo de Bellatrix a su lado le había dado una sensación de seguridad tan fuerte que ni siquiera pensó en los truenos.

Sumida en sus pensamientos, la voz de Luna la sacó repentinamente. "Es allí", dijo Luna, señalando con la mano hacia su tienda. Afortunadamente, las tablas que habían colocado para proteger la entrada habían resistido y no había grandes daños. Con esfuerzo, quitaron las tablas de la puerta y entraron. No había luz, pero Luna encontró una linterna, y Hermione la siguió.

"Disculpa lo humilde del lugar", comentó Luna. "Supongo que estás acostumbrada a grandes cadenas de centros comerciales lujosos".

Hermione frunció el ceño, y Luna continuó con una sonrisa: "Oh, vamos, se te nota de lejos que no eres como nosotros. Llevas una buena vida, además esa moto que tienes cuesta más que este pueblo".

Destinos Cruzados  (BELLAMIONE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora