Destinos Cruzados (BELLAMIONE)

Capitulo 31: Reto Aceptado

Richard fue explicando la situación con su socio y cómo deseaba separarse de él, aun si eso implicaba pagar una cuantiosa indemnización. Sabía que, más adelante, también se enfrentarían a sus hijos. Neville, como jefe del equipo de abogados, tomó la palabra.

—Bueno, dado que este hombre lleva más de diez años siendo tu socio, no será fácil. Seguramente, tendrá aliados interesados en descubrir la razón detrás de tu decisión. Si revelamos la información sobre los cargos que presentaremos contra sus hijos por el daño causado a Bellatrix Black, probablemente intentará sacarlos del país y esconderlos. Por lo tanto, debemos actuar con cautela y dar pasos lentos pero seguros.

Neville hizo una pausa y luego añadió:

—Lo primero que necesitamos es asegurarnos de que los accionistas mayoritarios te apoyen cuando llegue el momento. Para eso, debemos ir allanando el terreno. Además, debemos infiltrar a alguien en la empresa que nos ayude a revisar a fondo los negocios de tu socio. Cuando alguien como él ha estado tanto tiempo en el poder, suele haber movimientos irregulares que le han permitido llenarse los bolsillos, y es probable que utilice recursos de la empresa para ello.

Fleur, quien había permanecido en silencio hasta ese momento, intervino con una propuesta:

—Puedo entrar como asesora de Hermione. Dado que ella es nueva en su puesto, no parecerá extraño que busque a alguien de confianza para que la guíe en este mundo de los negocios. Una vez dentro, buscaré la manera de acercarme a ese tío.

Fred, otro de los abogados, asintió.

—Es una excelente idea. Y lo mejor es que seguramente se fijarán más en su físico que en lo que realmente estará haciendo dentro de la empresa. Es un misógino, va a caer en la trampa —añadió con una sonrisa.

Hermione y Richard intercambiaron miradas, satisfechos con el plan. Con cada uno con su papel claro, cerraron la reunión.

Cuando todos comenzaron a retirarse, Fleur se acercó a Hermione con una sonrisa insinuante.

—¿Cuánto tiempo, querida? ¿Cómo has estado?

—Sí, ha pasado un buen tiempo —respondió Hermione con una sonrisa tensa—. He estado bien.

—¿Qué te parece si vamos por una copa? Así podemos ponernos al día y planificar cómo vamos a ejecutar esto —sugirió Fleur, con ese brillo característico en sus ojos.

Hermione lo pensó por un momento. Sabía que necesitaba a Fleur de su lado si quería hacer justicia por Bellatrix, y aceptar su oferta era lo más sensato.

—De acuerdo, vamos —aceptó finalmente.

Más tarde, en un bar exclusivo y tranquilo, las dos se sentaron frente a frente. La conversación comenzó de manera profesional, hablando sobre la estrategia que seguirían para desenmascarar al socio de Richard y sus hijos. Sin embargo, a medida que los minutos avanzaban y las copas se vaciaban, Fleur cambió de tono. Comenzó a lanzar comentarios cargados de insinuaciones, sonriendo cada vez que Hermione intentaba disimular el nerviosismo.

—Te he echado de menos, Hermione. ¿Recuerdas esos días en la universidad? Nos lo pasábamos tan bien juntas —dijo Fleur, jugueteando con su copa.

Hermione, que ya veía por dónde iba Fleur, tomó un sorbo de su bebida antes de responder.

—Fleur, esto es diferente. Ahora somos profesionales, y mi vida ha cambiado —dijo, con un tono firme.

Fleur se inclinó ligeramente sobre la mesa, acercándose a Hermione con una sonrisa traviesa.