frat wars ✧ jikook

Capítulo 34

Jungkook POV

─¿Esta es la lista? ─pregunta Jennie.

─Es por donde hemos comenzado. Los sospechosos más probables y luego los iremos reduciendo a partir de ahí.

─Con un poco de suerte ─dice Jimin─, ninguno de ellos será nuestro hombre. No me gusta la idea de que uno de mis hermanos nos joda.

Ella tararea y da vuelta el papel, como si estuviera revisando el otro lado. Jimin y yo convocamos una reunión con cada una de las casas para informarles sobre lo sucedido y tratar de obtener ideas sobre cómo solucionar el problema. Nuestras dos casas trabajaron en la lista, y creo que fue la primera vez que todos estuvimos en una habitación sin insultos volando. Puede ser porque algunos de mis hermanos nos escucharon follar como animales el otro día y ahora no saben qué pensar; afortunadamente, ninguno de ellos me ha preguntado al respecto.

─Con lo que estoy luchando es por qué. Muchos de estos muchachos se graduarán pronto. ¿Qué razón tendrían para querer que cierren?

─No me importa el por qué, me importa el quién ─responde Jimin─. Quiero que se solucione.

Me lanza una mirada escéptica antes de volver a la lista.

─Espera, mi nombre está aquí ─dice Bogum, señalando la petición─. Yo no firmé esto.

Me inclino y miro dónde ha sido garabateado su nombre en la línea.

─¿Esa no es tu firma?

─Sí, lo es. Pero de ninguna manera habría firmado para cerrar la casa de Sigma. ─Se vuelve hacia Jimin─. Ustedes organizan las mejores fiestas.

─No, ya no.

Toda la habitación parece hundirse.

─Bueno, tenemos que arreglar eso antes de la fiesta de graduación, ¿no? ─dice Hyuna, la presidenta de los Zeta. Es como me imagino que se vería una muñeca Barbie que hubiera cobrado vida, y probablemente sea la persona más inteligente de la sala. No tengo idea de lo que implica la física teórica y matemática, pero con tantas letras, supongo que es complicado.

─Esperemos. ─Jimin se recuesta en su silla y mete las manos detrás de la cabeza─. ¿Alguien tiene ideas reales sobre cómo hacer eso? Porque a mí se me acabaron.

No estoy seguro si la falta de respuestas se debe a que la gente está pensando o no tiene idea de qué sugerir.

─¿Dijiste que le enviaste mensajes de texto? ─Jennie aclara─. ¿Puedo verlo?

Jimin entrega su teléfono. Casi todos están revisando los informes que nos pasó el decano, pero Hyuna está escribiendo frenéticamente en su portátil.

─Esto puede parecer obvio, pero estos mensajes parecen personales─dice Jennie.

─Bueno sí. Odian a todos mis muchachos.

─¿Puedo verlo? ─pregunta Hyuna.

Cuando Jimin da el visto bueno, Jennie le entrega el teléfono.

─Sin embargo, no creo que sea eso ─insiste Jennie.

─Estoy de acuerdo. ─Hyuna vuelve a mirar la lista de sospechosos y los mensajes de texto nuevamente─. ¿Con quién de estos nombres tienes una buena relación? ─pregunta.

─Con todos ─dice Jimin como si fuera obvio─. Son mis hermanos y trabajamos muy unidos.

─Entonces, ¿por qué alguno de ellos querría meterte específicamente en problemas? Eso es claramente lo que estaba planeando cuando te pidió que te encontraras con él.