Drugs on Money +18 ||JJK||

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Estaba caminando por el pasillo muy lentamente hacia la oficina de Hank, mis pasos eran lentos pero seguros, aunque no sabía con exactitud por qué mi alrededor era oscuro.

A medida que avanzaba por el pasillo, la oscuridad parecía envolverlo a mi alrededor. Las luces parpadeaban con una tenue y débil luminiscencia, creando varias sombras que se retorcían en las paredes. Un escalofrío recorrió por toda mi espalda, y la sensación de que estaba siendo observado se hacía presente.

Los sonidos parecían amplificarse en la oscuridad, cada pequeño crujido y susurro resonaban en mis oídos creando una especie de eco bastante inquietante.

De repente, una ráfaga de viento helado recorrió el pasillo, haciendo que se estremecieran las puertas y ventanas. Me detuve un momento, tratando de controlar mi respiración agitada, pero la sensación de ansiedad seguía aumentando.

Corrí y abrí la puerta de golpe encontrándome con la oficina hecha un desastre.

¿Qué rayos está pasando aquí?

Cerré la puerta detrás de mi y avancé hacia el escritorio encontrándome con los papeles que había visto aquella vez.

D.O.M

—¿Qué es esto?—pregunté examinando los papeles.

Al abrirlos pude ver una foto mía junto con la de mi padre y una "X" sobre su cara, iba a seguir leyendo, pero se me hacía difícil, las letras no eran claras.

Después de varios intentos escuché unos pasos aproximarse a la puerta inmediatamente abriéndola de golpe, mostrándome a Hank con una pistola en sus manos.

—Así que tu también has venido a entrometerte, ¿verdad?—dijo Hank con una mirada de desprecio apuntándome.

—Y-yo... Hank no sé de lo que me estás hablando.

—¿Por qué no le cuentas a tu esposa e hijo que eres un idiota?

¿Eh?

—¡Habla! ¿O es que te comieron la lengua las ratas? Maldito entrometido.

Mi corazón latió con fuerza al ver a Hank acercándose a mi mientras desbloqueaba la pistola y me volvía apuntar.

—Esto no te concierne. Pero parece que eres demasiado curioso para tu propio bien—dijo Hank con una sonrisa siniestra.

—¡¿Qué rayos te está pasando?, no sé de lo que hablas!—exclamé acercándome.

Me moví un poco pero su mirada seguía fija en un punto detrás de mi.

Mis palabras parecieron no tener efecto en Hank, quien seguía sosteniendo la pistola con una mirada desquiciada. Me di cuenta de que algo más estaba sucediendo, algo que iba más allá de lo que yo podía entender en ese momento.

Giré ligeramente para ver lo que capturaba la atención de Hank detrás de mí, y ahí fue cuando lo vi. Una figura oscura y amenazante se materializaba lentamente en la oscuridad del pasillo.

Era como si estuviera compuesta de sombras y pesadillas, y sentí un escalofrío recorriendo todo mi cuerpo.

La figura se acercaba cada vez más, emitiendo una presencia siniestra y malévola. Parecía tener un poder inexplicable, y mi corazón se aceleró ante la sensación de peligro inminente.

Su cara estaba distorsionada y no podía ver nada, lo único que si era seguro es que era una persona.

Al darme la vuelta, vi como Hank disparó y la bala atravesó por mi pecho sin hacerme ningún tipo de daño, asustado e impactado me día la vuelta viendo como aquella sombra se derrumbaba.