Si tú vas, yo voy a saltar
Solo confía que yo voy
Detrás de ti me quedaré
Aléjate
Es mentira, mejor quédate
Recorrió todo el lugar, sonriendo mientras recordaba todos aquellos bellos momentos.
Los pétalos de cerezos caían con delicadeza en el suelo, dándole un aspecto relajante al sitio. Los rayos del sol primaveral arroparon a su cuerpo, brindando una calidez reconfortante aún si su pecho se sentía frío.
Recordó todas aquellas pláticas, todos los chistes, las risas, bromas, y un montón de cosas que hacían juntos. Recordaba todo a la perfección, tomando uno de esos pequeños pétalos en su mano, apreciando cada detalle de este.
Los cerezos solían ser sus favoritos.
Desde hace mucho que no sabía de él, pues tras la decisión que ambos habían tomado, ninguno había tenido valor de reconectarse.
Ahora eran simples desconocidos.
Yo me veo contigo
No puede ser que seamos solo amigos
Estás con alguien que no puedes amar (yeah), yeah
Pensando en mí cuando lo vas a besar (yeah), yeah
¿Explícame cómo le haces?
Probablemente pase que eso fracase (yeah, yeah, yeah, yeah)
Lo vio entrar al restaurante, cruzando miradas con él al instante.
Abrió grandemente los ojos debido a la sorpresa, mirando a aquellos orbes avellanas observarlo de la misma manera sorprendida. Se encontraban incrédulos, pues ninguno de los dos esperaba reencontrarse después de tantos años.
A la hora de levantarse para ir a saludarlo, notó como un hombre le susurraba algo al oído, tomando su mano y dirigiendolo hasta una mesa cercana.
Después de eso, Dan no volvió a dirigir su vista hacia él, pues se encontraba muy concentrado en aquel tipo. Sin embargo, no se podía decir lo mismo sobre sí, pues él se encontraba observándolo casi todo el tiempo.
¿Qué era de Dan? ¿Seguía teniendo los mismos gustos? ¿Seguía siendo igual de amable? ¿Aún amaba las comedias románticas? ¿Los cerezos aún eran sus favoritos?
Dudas y dudas seguían llegando a su cabeza, pues la curiosidad sobre aquel chico, -quien parecía un desconocido a pesar de lo que vivieron-, era incontrolable.
Estás con alguien que no puedes amar (yeah), yeah
Pensando en mí cuando lo vas a besar (yeah), yeah
¿Explícame cómo le haces?
Probablemente pase que eso fracase (fracase)
Los días habían pasado desde ese entonces, dejando aquel acontecimiento en el olvido.
Vivió su vida normal, siguiendo su rutina como solía hacerlo siempre. No obstante, aquel día tenía que contratar a su nuevo asistente personal, llevándose una gran sorpresa ante eso.
Su candidato era el mismo tipo con el cual Dan había cenado.
Lo recibió con cortesía, escuchando y leyendo todos los puntos positivos que tenía el chico. Era trabajador, un especialista en ventas, se notaba atento a lo que hacía y, por supuesto, era bastante agradable.
En pocas palabras, un tipo perfecto.
Firmó su contrato mientras sentía emociones contradictorias, pues una parte dentro de sí le decía que sería difícil encontrar a alguien igual de bueno en el aspecto laboral. Sin embargo, la otra parte dentro de él le decía que aquel chico podría ser una amenaza, pues dentro de las posibilidades cabía que él fuera la nueva pareja de Dan.
