94; dosis de...¿?

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Pedri subió a la habitación de Maika deprisa

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Pedri subió a la habitación de Maika deprisa.

¿Estás?--dijo, pegando a la puerta.

Si. ¿Tú?--

Claro, por eso te aviso.--dije.

Cuando Maika salió, Pedri olía a colonia fresca, y Maika amaba los olores así.

Hueles bien.--

Mm...gracias.--dijo, pícaro.

Esta se rio nerviosa y se montó en el Porsche Cayanne de Pedri

¿A donde me llevas?--

A ver las estrellas, se que te gusta.--respondió este.

Pero...hace frío.--argumentó.

Si..por eso es un Porsche.--

Esta se rió junto a él. Y conforme llegaban, más conectados se sentian.

¿Y que tal con tus padres?--preguntó Maika.

La verdad, te echan de menos.--

Tu madre era un amor conmigo, tal vez me odie, capaz.--dijo.

¿Por que te odiaría?--

No lo se...--

Pedri se giró para mirar a Maika. Aguantaron el contacto visual y pedri no pudo más, le besó.

Eres lo más bonito que me ha dado la vida.--dijo Pedri.

Estos siguieron con el espectáculo de besos, y Pedri subió a Maika encima suya.

¿Quieres hacerlo?--dijo Pedri.

El que.--

El amor.--respondió Pedri con una sonrisa.

Pedri quitó cuidadosamente el sujetador de Maika mientras está recorría su cuello a besos.

No te agobies, ¿Vale?--aviso pedri.

Este, ya desvestido, empezó a ayudar a Maika en lo suyo.

Para ambos, fue como su primera vez, ya que la mayoría de veces qué lo hacían, ni lo sentían tanto como lo hacían ahora, conectados

Nunca lo había probado así.--dijo Maika.

Lo sé.--

¿Deberíamos volver?--preguntó Maika.

Pide un deseo.--dijo Pedri.

Esta lo hizo, y así fue.

Cuando maika miró a pedri, que estaba apoyado en su abdomen, se encontró que estaba dormido.

Pedri...--dijo, levantandole.

Lo siento.--

¿Por qué?--respondió.

No sé.--

Llegaron a la concentración, y de una forma a otra, Luis De La fuente sabía que le había mentido, no había ido a ver a la familia, si no a su "algo".

pedri, a mi despacho.--

Pedri, que estaba más cansado que nada, fue.

¿Estuviste con tus padres realmente?--

...No mister.--admitió

¿Por qué me mientes entonces?--preguntó, furioso.

Porque no me ibas a dejar.--

¿Y tu que sabes?--dijo, con seriedad.

Lo siento mucho...--

No, no me vale un "lo siento mucho" es que no entiendo porque no llegas a confiar en mi.—dijo Luis.

Pedri salió del despacho cabizbajo, algo triste.

Se subió a su habitación, Maika estaba en la suya así que este se encerró en la suya. No se encontraba muy contento.

"¿Estás bien?"

Maika se había enterado, y Pedri le contó lo sucedido, le dijo que estaba agobiado y que ahora mismo no quería ver a nadie porque se había sentido auto decepcionado.

"Quiero tenerte de frente para que me digas como se siente"

Ese mensaje le gustó tanto a Pedri que estuvo pensando en él toda la noche.

𝙐𝙣 𝐕𝐄𝐑𝐀𝐍𝐎 𝐜𝐨𝐧𝐭𝐢𝐠𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora