Destinados al Infierno

Capítulo 23: ¿Un estudiante nuevo?

Capítulo 23: ¿Un estudiante nuevo?

Ridículamente tiernos estaban siendo Lucifer y Alastor escapando de la universidad. Adam por otro lado, solo le quedó observarlos como escapaban de la universidad, sonreír y hacer una travesura.

Mientras tanto...

Lucifer y Alastor se encontraban en el café: el rubio tenía un latte helado de vainilla, mientras que Alastor tenía un capuchino de vainilla. Ambos estaban felices, divirtiéndose con la nueva compañía.

Entonces, Lu ¿Negocios? -preguntó Alastor.

Si, soy bueno en eso, incluso mi hij... un familiar, dirige un hotel -se puso nervioso Lucifer.

¿Un familiar? ¿Y te vas a dedicar a eso? -preguntó Alastor.

No necesariamente, ella tiene todo mi apoyo, pero no me dedicaré a eso, ¿Tu me dijiste que querías ser comunicólogo, no?- preguntó Lucifer cambiando de tema, pues no estaba dispuesto a dedicarse a algo pues él era el rey del infierno, por no decir, que era el perfecto sugar daddy de cualquiera.

No te dije, lo intuiste, pero si, eso quiero ser, me gusta mucho la radio ¿sabes? me siento tan libre y... de cierta manera entre las sombras -sonrió Alastor.

¿Entre las sombras? -preguntó Lucifer.

Si, pues nadie me ve, solo me escuchan, si tienen una queja, que avientan sus radios a la pared y que a mi me dejen en paz -comentó Alastor.

Lucifer se ríe- Si, tienes razón, pero a mi no me importa si tienes que decirme algo incomodo, yo siempre te escucharé hasta el final.

Alastor trago un poco de saliva y sus mejillas se enrojecieron.

Al regresar al patio universitario, Lucifer se despide de Alastor, pero antes de que el castaño se fuera Adam los interrumpe, en una forma más adulta.

Ohh, jovencitos -fingió Adam con una voz más adulta de la que tenía.

Ohh, holaaa -dijo nervioso Alastor.

Adam cuelga un brazo en el cuello de Lucifer.

Mi nombre es Adam, soy padre de este idiota -dijo Adam alzando su otra mano al castaño ignorando por completo la mirada de odio y exigencia de Lucifer.

Ah, un gusto -Alastor estrecho su mano con la del señor.

Así que, ¿Emocionado por entrar a esta universidad? -preguntó Adam.

Sí señor -contestó Alastor observando como Lucifer trataba de alejarse del brazo de Adam, lo cual le pareció muy cómico.

Muy bien, muy bien, me gusta así, que los jóvenes estudien y se nutran de conocimiento y... ah.. aha.. ahaaa -Adam comenzaba a tartamudear.

¿Ahora qué rayos pasa contigo? -preguntó enojado Lucifer quitándose su brazo de encima.

Adam toma la barbilla de Lucifer y lo voltea de manera brusca hacia el brazo de Alastor. Alastor vestía un abrigo rojo con mangas largas, antes sus brazos estaban ocultos por eso, pero en el momento en el que una de sus manos fue jalada por Adam para estrechar la mano, esta manga retrocede un poco, haciéndole visible para ambos hombres el reloj de arena que tenía puesto en su muñeca. El objeto tenía una cinta negra que estaba amarrada en la muñeca del castaño y que sostenía un tipo de esfera de cristal circular, plana, que contenía una cierta cantidad de arena que no dejaba de girar en círculos como si se tratase de un remolino, era algo hermoso y mágico.

¿Ah? -preguntó Alastor confundido, pero observó su muñeca y sonrió- ¿Se trata de mi reloj?

¿Tu reloj? -preguntó Adam.

Si, así es, me lo dio mi abuela hace mucho, no se como, pero cada vez que lo veo, se exactamente que tiempo es, es algo mágico -comentó Alastor.

Seguro que lo es -comentó Adam y recibió un codazo de Lucifer.

La quiero mucho, no me lo quitó jamás -comentó Alastor.

Eso es un problema -susurró Adam y recibió otro codazo.

Es muy especial para mí -comentó Alastor.

Lucifer sonríe de ternura y ahora Adam le da un codazo.

Bueno, creo que aquí nos despedimos -dijo Lucifer.

¿Qué? ¿No tomarás tus clases? -preguntó Alastor.

Ah, si, pero, tengo clases en otro lado, pues estudio... -decía Lucifer.

Comunicación -aclaro Adam.

¿Ah? -preguntó ambos chicos.

Adam muestra un papel de admisión para Lucifer- ¿No es así hijo? ¿No querías estudiar comunicación?

Pensé que ibas a estudiar negocios internacionales -dijo Alastor.

Si, yo también -dijo Lucifer enojado, pues una, no tenía intención de estudiar y dos, aunque quisiera pasar el tiempo con Alastor, le preocupaba el tema del infierno y tiempo, por lo tanto, estar atrapado en una escuela, no era muy conveniente.

Bueno, mientras arreglan ese problema, ¿Quieres amm...? -preguntó nerviosamente Alastor.

¿Acompañarte? -preguntó Lucifer.

Solo si tu, si tu... -decía Alastor.

Lucifer sonríe- Si, vamos, pero... adelantate, quiero hablar con mi...- Lucifer traga saliva- padre -dijo entredientes-, sobre algo.

Claro, nos vemos, nuevo compañero -dijo Alastor despidiéndose.

Cuando Alastor se alejó, Lucifer mira molesto a Adam- ¿Y qué fue todo eso? ¿Me inscribiste a una puta universidad? ¿En serio? ¿Qué tipo de mierda hay en tu cabeza? -preguntó Lucifer.

Por favor, no creas que no vi el coqueteo con el pecador, además, él tiene el reloj -dijo Adam.

Lucifer lo mira con molestia.

Mira, se que quieres pasar tiempo con él, pero recupera el reloj lo más rápido posible y arreglemos este embrollo -dijo Adam.

Lucifer suspira- ¿Y tú qué harás?

¿Cómo que, qué haré? Soy tu padre -dijo Adam sonriendo.

Deja eso -dijo Lucifer, pidiendo no ser molestado.

Nos conseguiré un lugar para vivir, tu finge tu vida estudiantil y usa protección -dijo Adam.

Que chistoso -dijo Lucifer.