El regate perfecto || Pau Cubarsí

7 | Las chicas de moda

Los días de verano llegaron a su fin y volvemos a nuestra rutina, primero retome las clases y ahora los entrenamientos con el Barça Femení B. Como siempre busco a Rayo con la mirada, viene con cara de querer matar a alguien.

— ¿Y esa cara? — preguntó mientras empezamos a realizar el calentamiento.

— ¿Viste todo lo que salió del partido? — se refiere a los vídeos virales en los que aparecemos en Montjuic.

— Si, se supone que soy la novia de Pau, viste porque no hay que creer lo que dicen las redes — respondo.

— Tenías razón — admite. — Y como nadie ha desmentido nada, se creen que somos sus novias de verdad. Es raro porque tengo mazo de seguidores nuevos en insta.

— Yo también — respondo recordando mi sorpresa al ver tantas notificaciones en el móvil. — Hasta un par de babosos me han abierto md para decirme que me esperan si lo mío con Pau no sale.

— Putos machitos — responde mi amiga. — ¿Has hablado con ellos? — dice refiriéndose a nuestros amigos.

— No ¿y tú? — ella niega con la cabeza. — Pues deberíamos hacerlo y ver que vamos a hacer, tipo a mi me da igual, pero tal vez a ellos ahora que son súper conocidos pues les afecte diferente — propongo.

— Te aseguro que a Pau no le molesta, seguro está deseando que abras los ojos y que te des cuenta de que él ha estado aquí todo este tiempo — ay ya empieza otra vez con lo mismo.

— Pau me quiere a mi de la misma forma que te quiere a ti. Solo somos amigos, no entiendo porque la gente ve más cosas — respondo sincera.

— No hay más ciego que aquel que no quiere ver — dice usando un dicho popular.

— Lucia no me rayes, sabes que siempre he dicho que los tíos cuanto más lejos mejor.

— Pues bien que te andabas liando con uno el otro día — me recuerda la fiesta de despedida del verano.

— Estaba borracha y caliente, simplemente me dejé llevar — me justificó. — Además no pasó de un par de besos y unos leves toqueteos por encima.

— Igualmente no has aplicado tú ley de vida — insiste.

— Porque el chaval tampoco quería nada serio. Sabes cómo soy y lo último que me apetece es meterme en una relación y terminar como mi madre con el corazón roto — respondo sincerándome.

— Lo sé amor, pero por una mala experiencia no puedes estar regateando a cada persona que trata de llegar a tu corazón — me dice, sé que tiene razón, pero no puedo evitarlo.

— Si que puedo y lo haré — respondo, ella niega con la cabeza, sabe que soy imposible. — Bueno hablemos de ti, ¿vas a aprovechar para mover ficha con Héctor?

— Primero quiero saber cómo se lo ha tomado — me responde y añade al ver mí confusión. — Héctor a veces es muy imbécil, pero otras veces se porta como un caballero, entonces no puedo saber si se está cagando en mi existencia porque ahora no se le acercarán tantas tías o si le parece gracioso o si simplemente se asegurará de que estoy bien.

— ¿Y lo estás? ¿cómo te lo has tomado? — preguntó curiosa.

— Pues no se es raro, porque por un lado me he visto protagonizando una novela romántica de enemies to lovers donde el estúpido mujeriego cambia por la rayita única y diferente — me dice con una sonrisa muy tierna. — Pero por otro lado, me da mucha rabia la sociedad de mierda en la que estamos, ¿eres consciente de que estamos a las puertas del primer equipo, pero, que todos los seguidores que nos han empezado a seguir son o porque son fans de una relación inexistente o porque son una pajilleros que les pone ver a mujeres jugando al fútbol, pero que desprecian nuestra competición porque "las mujeres deberían estar en la cocina"?

— Si, es una mierda enorme. Además, han hecho una serie de comentarios que no me han gustado nada, tipo es un vídeo sobre fútbol grabado sin nuestro consentimiento ¿por qué se ponen a hablar de nuestro físico o de lo que nos harían?

— Tía que yo vi uno de un señor, ¡un puto señor! diciendo que quería un trío con nosotras, aunque sea a la fuerza — me dice sorprendiéndome.

— Que puto asco y mal rollo — respondo, mi amiga está de acuerdo.

— Deberíamos hablarlo con los chicos.

Dejamos de correr y por fin comenzamos con los ejercicios de balón, había extrañado mucho hacer pases con el equipo, los rondos, los partidillos... jugando al fútbol me sentía completamente feliz, aunque una parte de mí se preguntaba porque, si se separó de ella, me dejo a mi también y nunca más me acompañó en esto que tanto nos gustaba.

Después de un completo entrenamiento nos vamos todas a las duchas. Con las chicas nos ponemos todas al día, contamos cosas que hemos hecho a lo largo del verano y finalmente todas coincidimos en que se nota la ausencia de Vicky, pero que estábamos felices por ella.

Como si hubiera estado escuchando nos llega al grupo de las súper nenas un audio de nuestra amiga.

"Tías les han preguntado a los chicos sobre vosotras. ¡Tenéis que verlo ya!"

Rayo comienza a buscar en su móvil cualquier tipo de noticia que relacione a nuestros amigos con nosotras mientras yo contesto a Vicky.

— Digo yo que será esto — dice Rayo metiendose en el primer vídeo de Twitter llamado "el misterio de las musas de Can Barça"

En el vídeo, el equipo acaba de llegar a Vigo, donde tienen su próximo partido de liga, y un grupo de periodistas amarillistas o fans chismosos (no me queda claro) les preguntar por nosotras.

— ¿Lamine te queríamos preguntar por las chicas de moda? — mi amigo se muestra incómodo ante la pregunta, ¿habrá leído todos los comentarios?

— Las chicas de moda son unas grandísimas futbolistas, deberíais ir a verlas — responde con una sonrisa educada, aunque se nota la ironía en su tono de voz, conociéndole sé que no le agrada que minimicen todo nuestro esfuerzo en el fútbol a la posible relación que tenemos con ellos.

Le siguen haciendo preguntas, pero él simplemente sonríe y le desea un buen día.

Después aparece Héctor bromeando con Marc, ante la mención de nuestro nombre, nuestro amigo se pone serio y para en seco.

— Olivia y Lucia son mis amigas desde que formo parte de este club. Pido por favor respeto hacia ellas, hay comentarios que no se deberían de hacer — está súper serio, lo que me confirma que han leído todos los comentarios misóginos que han hecho sobre nosotras.

— Estoy enamorada — dice mi amiga, le salen corazoncitos de los ojos.

El último en aparecer es Pau, le hacen varias preguntas y le siguen todo el trayecto, se le nota que le incomoda esa situación, parecen unos buitres apunto de atacar a su presa. Me molesta mucho el trato que están teniendo con él y la poca importancia que se le está dando al fútbol, están buscando únicamente una exclusiva amarillista.

— Última pregunta Pau, ¿podrías confirma tu noviazgo con la futbolista del Barça B? — ni siquiera le dejan subirse al bus.

— No, no puedo confirmar nada — contesta molesto, me sorprende ver a mi amigo de esta forma, se nota que está harto. — Ella solo me ve como un amigo, así que solo somos eso.

— ¿Estás enamorado de ella y te ha dejado en la friendzone? — pregunta una vez más el intento de periodista, mi amigo no responde pero por la cara que pone se que es verdad lo que ha preguntado el señor.

— Le gustó a Pau — digo sin poder creerlo.

***

N/A: Wow es genial ver que la novela poco a poco empieza a tener apoyo, muchas gracias
¿que os va pareciendo?