duda

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Ya pasaron un par de días y dipper no volvió a pasar por mi habitación, de hecho pasaba día y noche en el laboratorio le llevaba comida a veces y Ford comenzaba a preocuparse por su actitud, es curiosos el como debo de verla en alguien más para darse cuenta de que ese habito era insano.

Las noches pasaban y Ford y Stan me visitaban de vez en cuando pero si hubo un cambio, cada vez que las cosas serán más peligrosas o Stanley estaba a punto de golpearme dipper aparecía y me sacaba de el lugar lo agradezco mucho pero.... Eso solo me mete más en problemas, el coraje de Stanley se llegó a acumular al punto de importarle poco la presencia de sus sobrinos y hermano, volvió a encerrarme en ese cuarto tan oscuro, solo caminar o ser jalado hacia el lugar hizo que llorara y rogara que parará y no me dejara allí.

Pero como siempre no funcionó, en cuanto cerro la puerta gatee hasta la pared opuesta a la puerta y me hice bolita para esperar a que pasará el tiempo de mi encierro, ¿está vez cuánto será?. Nisiquiera había parado de sollozosar cuando la puerta fue abierta de nuevo, pero la silueta era diferente, no era la de Ford si no la de dipper, en cuanto la vi corrí a abrazarlo y llorar en su pecho pidiéndole que no me deje enserrado alli otra vez, el solo sostuvo mi cabeza mientras seguía llorando y me prometió que nunca más tendría que pisar ese lugar, sus palabras se sentían tan bien.

El me cargó hasta su laboratorio y me dejó sentado sobre una mesa sin dejar de abrazarme, sus manos no bajaron en ningún momento ni flaquearon, se quedaron firme sosteniendo me contra su pecho hasta que estuviera más tranquilo.

Cuando me calme el solo dejo allí y volvió a trabajar, estaba haciendo unos aros muy extraños y tecnológicos.

—quedate aquí conmigo hasta que suba, así podré cuidarte del tío ford.— me pidió sin dejar de ver las soldaduras que estaba haciendo cuando sintió que me bajaba de la mesa, yo solo acepte lo que me pidió y me senté en una silla giratoria para seguir viéndolo trabajar hasta quedar dormido.

No se cuánto paso desde que dormí, solo vi que dipper me despertó con calma para indicarme que subiéramos a el comedor, era la hora del desayuno. Cuando subimos vimos como solo había fruta y waffles instantáneos en la mesa, mavel estaba muy disgustada por no tener su desayuno de princesa y Stanley se sorprendió al ver a Will con el, estaba a punto de sacarlos pero... ¿Cómo lo encontro Dipper?

—will, podrías hacer el desayuno porfavor— me pidió con amabilidad a lo que yo solo corrí a la cocina escuchando los gruñidos de Stanley y mavel preguntándo donde está a y porque no estaba el desayuno — Will se quedó enserrado en el viejo cuarto de reactivos de camino al laboratorio.

—si, la cerradura lleva mal un tiempo, supongo que se atoro mientras limpiaba— siguió stanford fingiendo demencia

—¿y porque no apareció de la nada o algo?

Stanford trago en seco al escuchar la pregunta, como podía mentir el echo que le porhibio escapar aparecer en otro lugar cuando lo ensierra

—supongo que tiene cabello de unicornio o algo— justifico dipper haciendo que el se aliviará y dejara el tema de una vez para comer

Bastaron unos minutos para que mavel tuviera su desayuno de princesa y las cosas de calmaran en la mansión. Will volvío con dipper al laboratorio o donde el estuviera para estar a salvo y gracias a eso tuvo un día tranquilo, al menos el día.

Por la noche Stanley fue a mi habitación, ni siquiera fue brusco o cruel, pero... Después de tantos días siendo tratado de forma decente, me comencé a sentir sucio por su toque. El se fue como de costumbre dejándome solo en la habitación para que me limpiará y estuviera listo para su hermano si era necesario, pero no quería, nunca lo quise, se siente horrible ser usado y dejado allí.

Solo me envolví en la sabana para ocultar mi cuerpo ahun lleno de mordeduras, guapetones y marcas de los dedos de Stanley, sentía como aquel líquido tan familiar salía de mi interior y mi cuerpo pegajoso. Solo me arrodille sentándome en mis piernas para no sentir tan fuerte el como salía semen de mi interior y me solté llorando.

Era cómico el como mis sollozos parecían invocarlo, en cuanto comenzé a hipear dipper entro y al verme corrió a abrazarme y dejar que llorara en su hombro.

—lo terminé, tengo tu dimensión mapeada y un aparato que hara que seas libre, tarde mucho lo ciento— me contó con decisión dejando un beso en mi cabello al decir lo último. Su mano acomodo los cabellos desarreglados en mi rostro y me miró con ternura antes de tomar mi mano para besarla— ¿me dejarías ayudarte?— yo solo asenti desesperado volviendolo a abrazar ahun con nuestras manos unidas— Bill, te liberare de mi tío y aréque vayas a tu dimensión de una vez por todas, pero necesito que me hagas caso en todo.... Solo así funcionará el plan— me explico con paciencia dejando pequeños besos en mi rostro para que dejara de llorar— ¿lo entendés? ¿Estás de acuerdo?

Sus palabras eran como melodía, porfin sería libre yo solo seguí asíntiendo mientras sonreía por la ilusión que me daba— s-si, lo entiendo, que debo de hacer?— pregunté entusiasmado por el plan, según Dipper mañana por la noche se llevaría a cabo el plan, yo solo debía de fingir no saber nada hasta entonces.

— cuando seas libre, necesito que te muevas lo más rápido posible al laboratorio, entra al portal sin mirar atrás, lo abriré antes de ejecutar el plan.

Un trato es un trato (AU Reverse falls)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora