La chica rebelde [EN EDICION]

Capitulo 34 "¿Y si volvemos a empezar?"

-Lena -Gritaron en mi oido.

-¿¡Quién murió!? -Me sente en la cama de golpe pero era solo Zoey.

-Se hizo tarde, genia. Arriba, todos estan abajo esperándote

-Mierda -Me levanté corriendo.

  Entre en el baño y sali maquillada, peinada, bañada y cambiada. Agarre mis valijas y baje corriendo por las escaleras ya que los ascensores estaban ocupados. Zoey tenia razón todos estaban esperándome en la puerta.

-¿Estás lista, Lena? -Preguntó mi papa.

-Nunca estuve tan preparada -Me di vuelta y abracé a Zoey- Te voy a extrañar, nos veremos en algún momento

-En la noche te llamo -Nos separamos y me adentre en el auto.

****
  Tres horas despues ya me encuentro acomodando mis prendas en el armario de mi hogar dulce hogar, que poco tiene de dulce pero por sentido comun es mucho mas preferible que estar lidiando con hombres en Paris.

- A comer -Avisó Tyler del otro lado de la puerta.

  Mi estómago rugió obligandome a acatar lo recien anunciado por mi hermano, por lo que lancé lo restante dentro del guardarropa y bajé corriendo las escaleras para ocupar, como siempre, el lugar al lado de mi hermano.

-Falta poco para mi cumpleaños -Dije.

-Ya sabemos -Dijeron todos juntos menos Tyler.

-Te voy a hacer un super mega regalo, hermanita -Me abrazo mi hermano.

  Mi único héroe en esto se llama Tyler Parker.

-Gracias Ty

-Ni sueñes que te voy a regalar algo, Lena -Habló por primera vez en el dia Jane, mientras usaba su movil.

-Ya lo se -No pude evitar sonar decepcionada.

-¿Lena, compraste las cosas para baile? -Preguntó mi mama mientras me tendía plata.

-No, me faltan las badanas, tengo que comprar nuevas

-Despues cómpralas

Y luego de eso, un silencio agobiante inundó la mesa, ya que como verán las conversaciones familiares no son nuestro fuerte y simular interés en las actividades del otro tampoco.
Fugazmente acabé mi comida, tomé la plata que mi madre dejó sobre la mesa y salí disparada fuera de la casa.
No obstante, mi inconsciente tenía otro plan para mi, ya que al terminar de comprar lo necesario para mi baile, directamente invadí una tienda de películas en la que renté a una de mis mejores amigas de los últimos días, the notebook.
Nada como una buena depresión nocturna, ¿No, Parker?

-Debes aprender a callarte -Me reté a mi misma adentrándome en la casa.

**
  El estruendoso ruido de la alarma de mi móvil, comienza a sonar en toda la habitación indicándome que es hora de volver al mundo real, en simples palabras: ir al instituto.
  Pesadamente me adentré en el baño, lugar en el tomé una corta pero reconfortante ducha matutina, ya que debo admitir que la noche anterior estuve lo suficientemente cansada como para evitarla, y vestí mi cuerpo con una remera de tirantes blanca que lleva las palabras "hi bitch" y un hermoso oxford negro.

-Buen dia -Saludó mi mama.

-Hola -Me sente en mi lugar y tome el desayuno que Bety me habia preparado.

-Hija, no podemos estar todo el tiempo

-¿Acaso piensas que yo lo disfruto? -Di un sorbo a mi café y jalé de un lado a mi bolso- porque te aseguro que yo nunca quise esto