Capitulo 8: "Este viaje es un desafio, ¿Juegas?"

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Unas manos rodearon mi espalda tomándome por sorpresa por lo que me di la vuelta rápidamente.

— Ty —solté el aire— ¿Cómo llegaste tan rápido?

— Tengo poderes —bromeó— Y soy el más rápido de la familia, deberías saberlo

— No lo se, porque no lo es

—  ¿A dónde vas? —señaló el bolso.

— A dar una vuelta

— ¿A pensar?

— Puede que si —fui hasta la puerta— No incendies la casa en mi ausencia, por favor

Salí de la casa para, como ya adivinó mi hermano, pensar y recapacitar lo arruinada que esta mi vida últimamente, situé los auriculares en mis tímpanos justo en el momento en que un estruendoso trueno resonará en toda la ciudad.

Alarmada alcé mi cabeza al cielo que hace segundos estaba celeste y al ver que el color cambió a uno gris, solté, — ¿¡Algo más tiene que pasarme!?

El cielo me respondió con otro trueno, por lo que yo me encogí de hombros y salí corriendo devuelta a mi casa aunque, por segunda vez en el día, un cuerpo rigido se interpuso en mi camino haciéndome caer al frío y mojado piso.

— Perdón, no te he visto por la lluvia —tendió su mano.

— No pasa nada —la acepté.

Cuando logré incorporarme sus ojos hicieron contacto con los mios, mostrandome un par de perfectos ojos grises. Mis piernas flaquearon.

— ¿Estas bien?

— Si, perdón —respondió.

— Mark —se presentó.

— Lena

— Lo se

— ¿Cómo? —lo miré confundida.

— ¿La chica rebelde, no es así?

— ¿Esto da miedo?

— Todo el mundo lo sabe, y además tu pelo lo confirma —sonrió.

— Como sea —sacudí la cabeza— Tengo que volver, adios

— Ha sido un gusto conocerla señorita Lena Parker —habló como un hombre proveniente de la realeza.

— Lo mismo pienso señorito Mark —respondí de igual forma.

Me dirigió una sonrisa picarona y salí corriendo, aunque no entiendo porque corro si ya estoy realmente empapada de pies a cabeza, y no lo vale. Disminuí mi paso y me adentré en el hall de la casa de mi mejor amiga, Halowey en este caso porque es la más cercana y no quería coger un resfriado.

— !TE DIJE QUE YA ORDENO, MADRE MIA! —gritó abriendo la puerta.

— Buenas tardes, amiga

— Perdón por eso —rió— Pasa

Subimos corriendo a la habitación, necesitaba contarle a mi confidente lo que acababa de pasar, sentir o como quieran decirle cuando me choque con Mark.

— Bueno, amiga, desembucha —habló tirandose en la cama.

— ¿Qué? ¿No puedo ver a mi mejor amiga? —imité su accion.

— No vienes a verme asi porque si

— Claro que si

— Vamos, Lena, habla

— Si insistes tanto —me acomodé— Choqué con un chico que se llama Mark

— ¿Es lindo?

— Lo es —exageré abriendo mis ojos.

La chica rebelde [EN EDICION]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora