La chica rebelde [EN EDICION]

Capitulo 36: "Tu, yo y el peligro"

Paró frente a un gigante casa.

-¿Vienes? -Preguntó dejando el casco encima del asiento y dirigiéndose hacia la casa.

-¿A tu casa?

-Si, tengo que buscar algo -Me tendió la mano- Baje, su majestad

-Gracias

Es hermosa tiene un toque rústico pero lo suficientemente moderna, enorme a decir verdad. Al entrar, me topo con la figura de Zoey mirando la television, pero que al percatarse de nuestra presencia centra su atencion en nosotros, o mas precisamente en mi.

-¿Me perdí de algo? -Se acomodó en el sillón.

-Ya vengo -Se apresuró Jace en subir las escaleras.

-Ahora es mi tutor -Suspiré- me encontró mal en mi casa y nos escapamos -Comenté antes de que empiece con sus incomodas preguntas.

-Ya entendí -Volvió la vista a la pantalla.

-¿Qué hora es? -Cuestiono en un intento de sacar conversacion.

-Siete en punto

¿Que le picó? Está siendo más cortante que lo habitual.

-¡¿Las siete?! Que tarde -Exclamé.

¿Tanto dormí?

-¿Terminaron? -Preguntó Jace mientras bajaba las escaleras.

-Si, ¿Vamos?

-Como usted diga -Salimos de la casa y nuevamente subimos a la moto.

La moto es la perfección en dos ruedas, a parte de que lo digo porque tengo cierto fanatismo hacia ellas, realmente es preciosa; toda negra metálica con calcomanias de unos dragones a sus lados.
Estar abrazada a el en una moto, es una sensación extraña.
Pero no fea

-Cállate estúpida consciencia -Grité pero no me di cuenta que lo hice en voz alta, hasta que Jace detuvo la moto y volteó.

-¿Ya te volví loca, Parker? -Sonrió con sorna.

Si.

-¿Que? No...solo que, nada, ya esta. Anda esta chatarra que tienes como moto

Mentira, es hermosa esa moto.

-Bien que te encanta la moto, y yo -Arrancó dejándome por segunda vez en el día, sin palabras.

Siguió conduciendo por las calles de Londres a quien sabe que lugar, no obstante puedo imaginar algo cuando se comienza a oir el ruido de motos y musica a todo volumen.

-¿Dónde estamos? -Indagué bajando del vehículo.

-Carreras de motos -Murmuró antes de que un joven se acercara a nosotros.

-Jace, amigo, cuanto tiempo sin verte -Rió el chico.

-Will, ¿Cuándo empezamos? -Estrecharon sus manos.

-En diez minutos -Me miró- y esta belleza, ¿Quién es?

-Cuida tus palabras, imbecil -Solté.

-Pues que modales tienes, linda

-Es así siempre, te acostumbras con el tiempo -Mofó- Es Lena

-¿Correrá también?

-Dejen de hablar como si no estuviera aquí -Farfullé mirándolos a ambos.

-¿Correrás con el? -Se corrigió Will.

-Si

-¿Estas de broma? -Interpeló Jace casi atragantandose con su propia saliva.