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Mientras que Liam manejaba sin un destino en específico, Aglaia miraba por la ventana perdida en el paisaje del mar alejándose velozmente, yo simplemente me encontraba sentada de forma recta sobre el asiento del copiloto viendo hacia el frente, muchas cosas pasaban por mi mente sin dejarme en paz, así que estaba dentro de un trance de nuevo, algo muy frecuente ahora en mí.

¿Cómo iba a vencer a un gobierno yo sola?

Realmente no estaba sola pero tres personas no podemos derrumbar un sistema que tiene años y miles de fanáticos alocados por sus reglamentos irreales y crueles.

¿Qué pasaría con todas las personas?

No importaría si me buscaban a mí o a mi familia, no éramos los únicos que saldríamos perjudicados, muchos más lo harían y eso aunque no era bueno, me reconfortaba un poco aunque suene brutal de mi parte.

¿Por qué me tenían en libertad si sabían todo lo que era?

La idea de que en serio se estaban divirtiendo con mi actuación y actitud de chica "perfecta" nayfuriana, me daba un poco de miedo, siendo sincera me repugnaba aunque era la idea más lógica que encontraba para aquello e internamente sé que es la verdad de su actitud hacia mí. Todos sabían que el gobierno me valía muy poco, sin embargo, ahora querían tomar a mi hermana, a mis padres incluyendo a Deo y eso no lo permitiría por nada del mundo, además de aquel miedo que habían creado en mí, había desaparecido de nuevo para convertirse en valor y fuerza para luchar contra ellos. Sentía que estaba recuperando a la Rebecca Klaes de antes.

¿Cómo pueden mandar a un hombre a matar a su pareja junto con su familia?

La conciencia me estaba matando lentamente. Pensar que por mi culpa habían matado a Colín, me daba mucha lástima y enojo aunque había pensaba que ese hombre era malo, no obstante, cuando Aglaia me relató toda la verdad, me sentí enferma conmigo misma por creer ese tipo de cosas.

Habían asesinado a un hombre que murió para salvar a su familia y a la familia de su esposa, agregando a que tuvo que actuar durante años ser una persona que no era para que pensaran que su esencia era maligna y lo peor de todo, es que tuvo que morir frente a miles de personas por lo mismo, eso definitivamente se llamaba valentía. Concluyentemente Colín no merecía la muerte y mucho menos cuando sencillamente quería proteger a la mujer que le dio vida a su hijo. La mujer que estuvo con él sabiendo que le habían dado la misión de matarla por el simple hecho de ser mi hermana.

-¿A dónde iremos ahora?- Aglaia habló desde atrás y suspiré mirando a Liam que me hizo una seña con su boca.

Necesitaba hablar con Eugene pero más que todo, tenía el presentimiento de que debía hablar con su familia. Luego de la muerte de la señora Lydia había hablado con Charissa unas tres veces y sabía que después de los sustitutos podría ser que sustituyeran a la señora Klose por un robot, así que, solo deseé poder ir a ver al señor Moses y a Charissa otra vez para darle mi apoyo total, además que ansiaba saber que estaban bien aunque acercarme a ellos los colocaba en peligro.

Y me sentí como una bomba que explotaría al mínimo contacto.

-No tengo ni idea pero tenemos que dejarte en algún lugar que no te encuentren, además, quiero ir a visitar a la familia de Eugene, lo tengo que hacer de inmediato, sin embargo, es obvio que no puedo llevarte allá, puede ser peligroso para ellos y para ti también.- Volteé para mirarla para notar una pequeña sonrisa en sus labios, más bien, hizo una mueca.

-Quiero ver a Deo primero antes de ir a otro lado.- Asentí comprendiéndola a la perfección aunque después pensé que no lo hacía porque aún no sabía que se sentía tener un hijo.