Julia:
El lunes comenzó antes de lo que imaginaba.
Cuando abrí los ojos, la luz tenue del amanecer se filtraba por la ventana, pero la calidez del otro lado de la cama ya no estaba. Me removí entre las sábanas, estirándome con pereza antes de notar que Jason ya no estaba.
No me sorprendió. Me había dicho la noche anterior que tenía muchas cosas que hacer ese día, pero que no me preocupara, que solo era trabajo.
Aún así, me molestaba no haber despertado con él, especialmente después del perfecto domingo que habíamos tenido.
Me levanté y fui directo a la cocina, donde encontré una nota escrita con su inconfundible caligrafía desprolija:
"Nena, tuve que salir temprano. No me extrañes demasiado. Te veo después. PD: No te olvides de desayunar y no escuches a mi madre PD2: Eres preciosa incluso cuando gruñes al despertar."
Rodé los ojos y sonreí. Era tan Jason.
Me preparé un café rápido y me alisté para el trabajo. Extrañaba no ir con Kate como de costumbre, pero ella estaba en Los Ángeles, trabajando en algo que, aunque yo no sabía exactamente qué, Cindy sí.
Antes de salir, Naomi me detuvo en la sala con su sonrisa cálida y sincera.
-Tranquila, mi niña. Ava y yo comenzaremos a organizar tu mudanza hoy mismo. Ve a trabajar sin preocupaciones -me dijo con esa voz que tenía el poder de calmarme al instante.
A pesar de que no recordaba nuestra relación del pasado, había algo en Naomi que me hacía sentir en casa, como cuando estaba con mi padre. No era solo la manera en que me hablaba o el amor con el que me abrazaba, era algo más profundo, una conexión que no podía explicar.
El día en el trabajo fue más largo de lo habitual. No pude almorzar con Jason porque ambos estábamos ocupados, así que terminé almorzando con Matthew.
Entre bocados, hablamos sobre la carrera de Jason. Era increíble cómo, de un momento a otro, todas las grandes empresas querían trabajar con él. Las ofertas se acumulaban, todas las marcas deseaban tener sus imágenes en sus campañas.
Después del trabajo, pasé por mi chequeo con el neurólogo. Todo estaba bien, según él, pero a veces me preguntaba si alguna vez volvería a recordar todo lo que había olvidado.
Cuando regresé al departamento, Jason aún no estaba, pero Naomi ya estaba allí, organizando todo para la cena. A pesar de la hora, ya tenía todo bajo control, como si llevara toda la vida viviendo con nosotros.
Apenas crucé la puerta, me recibió con un abrazo lleno de amor.
-¿Cómo estuvo tu día, mi niña? -preguntó con dulzura.
-Largo... pero bien -respondí, dejándome envolver por su calidez-. Aunque creo que exagero, ya sabes cómo soy -
Naomi soltó una risa suave y negó con la cabeza.
-Sí, lo sé -bromeó, guiñándome un ojo.
Noté que estaba por empezar a preparar la cena, así que me acerqué con una idea.
-Antes de que empieces, haré pastel de fresa para Jason -
-¿En serio? -preguntó con una ceja arqueada-. No lo consientas demasiado, Juli -
-¿Por qué no? -pregunté riendo.
-Porque Jason es comprensivo y paciente, sí... pero si lo malacostumbras, hará todo lo que le pidas, pero a su propio ritmo. Y créeme, su ritmo es desesperante -bromeó.
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Desearía...
RomanceEn un mundo donde los deseos son más poderosos de lo que imaginamos y los celos pueden desatar tormentas, surge una historia donde la búsqueda de un lugar perfecto se convierte en la clave para alcanzar todos los sueños. En este rincón especial, do...