Hogar Dulce Hogar (Part 2)

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Se levanta de la cama; un poco torpe cabe decirlo... Y sale de la habitación. Me siento en la cama a esperarlo y voy buscando un preservativo por sus cajones.

-Aaaah!-

El grito de Kili me pilla desprevenida y chillo yo también dando un bote en la cama y cayendo al suelo.

-Pero qué pasa chiquillo?- pregunto sobándome la cabeza por el golpe.

-Ah Ah... Em... Mi... Y... Tu... Ella... Aaah!-

Manotea el aire y tartamudea como un niño pequeño... Cosa que no me gusta! Enserio soy yo el hombre en la relación?!

Me levanto y para tranquilizarle cojo su mano y salgo por la puerta decidida a enfrentarme a "eso" que le da miedo a mi novio mientras que este se resiste y para no venir engancha su mano al marco de la puerta.

-Vamos Kili...- le regaño con los dientes apretados y luchando para soltar sus dedos del marco, seguró que dejará marca.

Entonces oigo suspiros y algo que relaciono como gemidos provenientes del salón... Aibá...

Suelto a Kili y del repentino deje de fuerza, este se cae al suelo y gime de dolor.

-Ui, perdón...-

Camino despacio por el corto pasillo y cuando llego al comedor me veo a mi segundo jefe supremo metiéndose mano con mi Sandra... Es normal no? Ser novios llega a hacer estas cosas... Y sí, Erebor, la editorial dónde trabajo tiene dueño... Thorin y este tiene a sus dos sobrinos como jefes supremos: Fili es economista y el que hace los viajes para que otros países se... Fíen... De nosotros... Sí sé que suena raro pero no sé cómo explicarlo... Y Kili, MÍ Kili, que es el jefe de supervisar portadas y ilustraciones. Y ya Sandra va por libre... Sé que tiene trabajo pero nadie sabe de qué es y creo que prefiero no saberlo porque esta chica es muy rara...

-Ejem...- les interrumpo con descaro -Qué hacéis en la mesa del comedor?-

Sí... Fili está quitándole la ropa a la ojiverde encima de la mesa.

-Oh chicos... No sabíamos que estabais aquí...- ríe nerviosa Sandra.

-Es que una mesa es cómoda, sirve para hacer de todo- explica Fili y se lleva un codazo por parte de Sandra - y como Sandra es mi todo...- dice con los dientes apretados y las facciones de su cara apretadas por el dolor, pero se gana una caricia de su novia.

-Pero que nada eh... Ya nos vamos que nosotros hacemos muuuucho ruido eh... Bueno, adiós-

Salen apresurados por la puerta y el apartamento queda en completo silencio. Hasta que una pequeña vocecilla llega a mis oídos:

-Se han ido ya?- pregunta a lo lejos mi moreno agazapado detras de la pared de mi cuarto, le digo que sí y se acerca pero con los ojos tapados- seguro?-

-Que sí Kili-

-Valep- se destapa los ojos, parpadea y se acerca a mí dando botes como Heidi para besarme la nariz al pasar por mi lado - ves a la habitación-

Le hago caso mirándolo con una ceja alzada preguntándome qué hará ahora este fenómeno y entro a la estancia tirándome a la cama y esperando a Kili.

Al minuto,aparece por la puerta con un bol en la mano, frunzo el ceño y al acomodarse a mi lado veo que el bol lleva el chocolate que él mismo hizo antes.

Me indica con la cabeza que me tumbe y así lo hago.

Él deja el bol en la mesilla de noche y se acerca a mí gateando como ha hecho minutos antes. Se coloca de nuevo entre mis piernas y va subiendo la camiseta que llevo puesta, besando cada centímetro de piel que esta va dejando libre. Levanto mis brazos cuando llega al final y la tira al suelo, lo que crea un maullido.

Sueña con ...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora