Capítulo 36.

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Capítulo 36.

-Lily, Vamos a ser razonables ¿está bien?

Silencio.

-No te comportes como una niña pequeña.

Silencio.

- ¡Ábreme la maldita puerta o la tira abajo!

-Lárgate y déjame en paz-contesto Lily desde el interior de la habitación. Dado que la había echado fuera.

- ¡Te recuerdo que esta también es mi habitación! -dijo Maisie.

Cansada de rogarle que le abriera a su hermana, Maisie opto por volar la chapa de la puerta, ya que el «Alohomora» no le había ayudado de nada. Y entonces la vio, hecha un ovillo, llorando en su cama. Casi se le partió el corazón, Lily era su hermana.

A paso lento se acercó, como si de un animal salvaje herido se tratara. La idea no era ser invasiva, Lily era de aquellas chicas a las cuales les molestaba mucho que las vieran llorar. Ella recordó aquella vez que tenían seis años, por aquel entonces eran muy unidas y hacían todo juntas. Era su cumpleaños y les habían dado muñecas idénticas. Jugaban en el patio de la casa, entonces su vecino, un muggle bastante corpulento que disfrutaba molestando a los demás, les había llamado: "bichos raros feos".

Ella, recordó lo furiosa que se había sentido cuando había oído ofendido a su hermana. Y cuando Lily rompió a llorar, a ella no le había importado arrogarle su muñeca nueva por la cabeza aquel a bravucón de cuarta.

Nadie jamás haría llorar a su hermana frente a su presencia, se había prometido a sí misma, porque las hermanas van primero.

Recordar eso solo la hiso sentirse peor. Era una mala, una pésima hermana.

-Creí que había sido lo suficientemente clara-murmuro Lily con la cabeza pegada a la almohada, el sonido salía amortiguado- ¡Quiero estar sola! -

-Vamos a hablar. Eso te hará bien-

- ¿Sobre qué quieres hablar? ¿Sobre el hecho de que tú y James son algo? -siseo en un tono mordaz -¿O quizá quieres hablar sobre como los dos se han burlado de mi todo este tiempo?-

-Nadie se ha burlado de nadie -le contesto Maisie, tratando de mantenerse lo más serena posible-Entre James y yo nunca sucedió nada más que... eso. Y ni si quiera sé por qué sucedió. ¿A qué viene ese repentino interés por James? ¡Hacia unas cuantas semanas lo odiabas! -

-Las personas cambian de parecer. ¡Tú sabias lo mucho que me importaba! Pero claro, a ti eso no importo. Como siempre. -las palabras de Lily estaban cargadas de veneno-Nunca te importe ¿verdad? -Maisie comenzó a alarmarse por lo rápido que estaba cambiando de rumbo la conversación-Antes debías estar conmigo por obligación, porque no tenías a nadie más ¿No es así? ¡Respóndeme maldición! -

- ¿Qué quieres que te responda? ¡Siempre fui tu estúpida sombra! Siempre me decían lo mismo: Hija, deberías ser más como Lily. Cariño ¿Por qué no te pareces más a tú brillante hermana? ¡Yo solo quería ser más que la hermana de Lily Evans!-

-No me vengas con eso ahora -dijo Lily, sus ojos azules estaban inyectados se sangre por haber llorado- ¡Siempre has tenido lo que has querido! Sin esfuerzo alguno. Y no lo entiendo. ¿Qué tienes tu que yo no tenga? A fin de cuentas somos iguales-murmuro con amargura.

- ¿Acaso te estas oyendo? ¡Mira el show que has montado! James es solo un chico. De los muchos que vas a conocer en tu vida-

- ¡Como si el show me lo hubiera montado yo sola! -exclamo molesta Lily-¡Estoy harta! ¿Sabes lo que veo cuando te miro? ¡Me veo a misma! ¡Y ya me canse de eso! ¡Quiero ser yo! ¡No quiero tener una maldita copia barata! -

La Merodeadora EvansDonde viven las historias. Descúbrelo ahora