La Merodeadora Evans

Capítulo 22

Capítulo 22

La noche se encontraba en perfecta paz.

Todos en la sala común de Gryffindor -o eso se creía- y  tal vez en todo Hogwarts se encontraban durmiendo plácidamente.

Y  Maisie Evans no era la excepción. Dormía cómodamente con las cobijas hasta el cuello y su pijama extra-grueso de panditas debido a que las noches últimamente habían estado bastante frías.

No valía la pena dormir con un pijama decente si  después despertabas calada hasta los huesos por el frio.

Pero eso era algo que Lily Evans jamás comprendería, insistía en dormir con un camisón –horroroso y de anciana a la opinión de su hermana gemela- muy delgado que le había servido para ganar un resfriado del demonio.  

—Mendigos pájaros—gruñó Maisie somnolienta—Basta, dejen ya de aparecer.

A manotazos destrozó el pajarito de papel que delicadamente se había posado sobre su cabeza.

Era el número ocho que destrozaba y ella no iba a ceder. Los destruiría a todos.

¿Qué demonios ocurría? Sencillo. Sus amigos, al ser hombres obviamente tenían prohibido subir a las habitaciones de las chicas.

Pero no era solamente el impedimento “Moral”, no claro que no.

Las escaleras se transformaban en tobogán si ellos se atrevían a acercarse.

Reglas de construcción.

Por lo mismo sus brillantes amigos –Remus– tuvieron la idea de enviarles pajaritos de papel con mensajes escritos en ellos.

Eso era magia muy avanzada que se le daba sorprendentemente fácil a Remus.

El pajarito número nueve se posó delicadamente sobre el cabello pelirrojo de la chica con la esperanza de no ser destruido y cumplir su cometido.

Pero falló estrepitosamente.

Maisie sin compasión lo había hecho bolita y estaba dispuesta a desecharlo, pero cuando había estado a punto de lanzarlo lejos algo llamo su atención considerablemente.

Una manchita de tinta, una negra manchita de tinta que destacaba en el blanco papel.

Sorprendida y aún somnolienta extendió el papel para ver su contenido y en él reconoció la pulcra letra de Remus.

Querida Maisie:

¡NOS HARIAS EL FAVOR DE LEER ALGUNO DE LOS MALDITOS PAPELES DE REMUS!

Por favor.

En fin, solo te esperamos en la sala común para mostrarte algo verdaderamente Genial.

PDT: ¡Abrígate! Ya tenemos suficiente con Evans contagiándonos sus gérmenes.

Con los más sinceros deseos de que este sea el papel leído se despiden tus amigos.

Xoxo:)

La muchacha se lo planteó durante unos largos treinta segundos.

¿Ir o no Ir?  Esa era la cuestión.

Iría sin duda alguna, la curiosidad la estaba matando. La curiosidad era su defecto fatídico sin duda alguna.

Echó una ojeada con la mirada en la habitación, Lily dormía profundamente, un estremecimiento le recorrió la espina dorsal al sacar una de sus piernas de su cálida cama.

Hacia frío, mucho frío.

Maldijo en voz baja a sus amigos mientras se ponía sus pantuflas y tomaba su varita, ¿No podían esperar a mañana? A paso lento se empezó a mover hasta la salida de su habitación.