Capítulo 28

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Después de unos minutos, las seis chicas son presentadas. Ronda, quese encontraba en las habitaciones, al escuchar que había llegado, decidió bajar y al menos mirar la clase.

Junto con Karla, Xiomara y Tamara. Estaban Liliana de trece años, Carolina de nueve años y Paula de ocho. Todas padecen cáncer, el padre de Paula es militar y se encuentra en Siria, la madre murió de cáncer hace seis años. Los padres de Liliana viven en la ciudad con sus tres hermanos, pero son de escasos recursos, Carolina no conoce a sus padres.

—Hola. Yo soy Ronda, tengo catorce años y padezco cáncer de hígado. Vivo aquí y mi madre se encuentra en otro centro de rehabilitación. Ella es alcohólica. Me gusta bailar, aunque me agoto muy rápido. Amo dibujar y pintar.

Las historias de estas hermosas criaturas me conmueven.

—Perfecto —Aplaudo para despistar las malas energías—. Entonces ¿Cuáles son las canciones que tiene preparadas?

—Tenemos algunas de Beyonce y otras de Rihanna —informa Karla

—Veo que tienen buen gusto chicas. —Reviso su lista de canciones y reproduzco Upgrade U de Beyonce—. Bien, vamos a hacer lo siguiente, cada una de ustedes va a mostrarme sus movimientos favoritos y así organizaremos una increíble coreografía.

Cuando veo que todas asienten, señalo a Tamara para que inicie.

Una a una pasa y muestra algunos pasos que han aprendido de vídeos musicales o que se han inventado. Son buenas. Cuando es mi oportunidad, recuerdo mis clases de baile en la escuela y me dejo llevar mostrando algunos de los míos.

Gracias a Dios que decidí cambiarme a mis leggins y blusa, un atuendo mucho más cómodo para bailar.

Cuando termino, las chicas aplauden y nos adentramos en decidir el orden de todos, unos minutos después, los pasos están organizados y es tiempo de aprenderlos. En orden, cada chica pasa al frente para que aprendamos su movimiento.

De vez en cuando observo a Darren entrenar con los chicos, es exigente pero determinado y suave a la vez, los corrige con calidez y paciencia, se divierte con ellos, bromean y se muestran cariño.

Es realmente un privilegio ver este lado de su vida. Mientras bailamos, puedo sentir sus ojos sobre mí, lo sorprendo mirándome varias veces, solo sonríe y guiña un ojo.

Karla es realmente increíble bailando, la pequeña tiene un gran talento. Dos horas después, ya tenemos casi todos los pasos integrados y aprendidos, pero son cerca de las nueve y todos deben ir a dormir.

—Bien chicas, es todo por hoy. Las felicito son realmente increíbles.

—¿Volverás? —La pregunta de Ronda me sorprende, no ha participado en el baile, pero si ha ayudado a organizar los pasos, llevar el conteo, organizar la fila etc. Observo al resto de las chicas que me miran esperanzadas.

—Por supuesto. Voy a organizar con Garrick los horarios.

—Tenemos todos los días libres después de las tres —expresa Karla.

—¿No tienen otras actividades que hacer?

—Hemos tenido varios profesores de pintura y manualidades, pero se han ido... —murmura Tamara—, nosotros no, no les agradamos por mucho tiempo.

Que idiotas.

—No digan eso, ustedes son grandiosas. —Les sonrío y abrazo a cada una—. Entonces ¿están libres todos los días después de las cuatro?

—Sí —responden todas.

—Perfecto. Yo tengo libres lo lunes y miércoles después de las cuatro y los martes y jueves después de las seis. Los sábados si estoy ocupada todo el día. ¿Qué les parece clase de baile de lunes y martes y clases de repostería los miércoles, los jueves clase de manualidades y viernes de pintura?

Tu Plato De Segunda MesaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora