Kyle y Jeremy Jones.
Nunca imaginé que volvería a cruzarme con las personas de mi pasado, pero, en esta vida, cosas improbables pasan frecuentemente.
Quien iba a pensar que estar detenida y acusada de intento de homicidio o lo que sea haría a mis hermanos aparecer.
Los años han sido muy buenos con ellos, a pesar de solo ser dos años mayores son realmente guapos.
Sus ojos verdes y su cabello rubio arenoso combinado con esos cuerpos grandes y esculturales. Son todo un espectáculo que ver y no puedo creer que sean mis hermanos. Nunca me determinaron en la escuela y hace mucho que deje el pueblo.
Espera...
Si mis hermanos están aquí eso quiere decir que...
Patrick Jones, mi padre y abogado prestigioso de la firma Jones & Hanz entra después de mis hermanos.
¿Pero qué mierda?
Mi padre luce realmente mal, pálido, ojeroso, cansado y camina con un poco de cojera. Se ve muy enfermo. Logra entrar a la sala y sus ojos verdes se posan inmediatamente en mí. Sonríe y siento unas increíbles ganas de llorar.
Estaba tan sola y perdida con estos dos oficiales acusándome de asesinato creyendo que no tenía, como Daisy unos padres que me defendieran, y aquí están mis hermanos y mi padre.
—Celeste —Es lo único que dice mientras toma asiento frente a mí.
—¿Y el señor es? —pregunta Walker.
—Soy Patrick Jones el padre de Celeste y su abogado. Tengo entendido que se le está acusando de un intento de homicidio del cual hay hechos realmente confusos —dice, a pesar de su estado, su voz sale fuerte y autoritaria—. La posible víctima todavía está inconsciente y el testigo es un habitante de calle que se negó a venir hasta la estación para declarar.
—Sí... sí señor, ella es nuestra sospechosa.
—Por qué razón esta encadenada como un perro, si es una sospechosa y no una acusada. Mi hi... cliente no tiene antecedentes graves, además, el accidente ocurrió en medio de una carretera de tránsito vehicular a tres metros de la acera —dice y observa a ambos agentes que miran la ventana de vidrio de la habitación en busca de ayuda.
—Mi hermana no se escapó del lugar, al contrario, permaneció al lado de la persona accidentada brindándole los primeros auxilios, el guarda del edificio afirma que solicitó una ambulancia y la acompañó, a petición de la señorita Daisy Brooks, al hospital —argumenta Kyle.
—Las esposas son como precaución —informa Jiménez
—¿Precaución para qué? Hasta el momento no se ha presenciado una conducta que amerite semejante trato. —Jeremy luce feroz.
Inmediatamente Walker se acerca para quitar las esposas de mis manos, marcas rojas, donde la piel se ha lastimado, son los estragos de llevar más de dos aquí.
—Si no hay pruebas contundentes de que mi clienta cometió homicidio, considero debe ser puesta en libertad inmediatamente. Por el momento, la investigación debe basarse en un accidente automovilístico.
—Pero no se le tomó la prueba de alcoholemia
—Es su error, señor Jiménez. Al igual que esta detención, presenta fallos en el proceso, y me encargaré de —Mi padre se levanta y noto cuánto le cuesta hacerlo.
Increíble, vino a salvarme el trasero y lo llamo mi padre.
Es como cuando dices no creer en Dios y apenas estás en problemas, le rezas pidiendo ayuda.
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Tu Plato De Segunda Mesa
RomanceDarren Barker es el hombre al que amo, pero él ama a otra. ¿Qué hago yo al respecto?... ser la mujer a la que acude cuando Daisy Brook rompe su corazón. Sé que está mal, sé que me usa, pero no puedo decir que no. Soy adicta a él, lo amo como no he a...