Una Hermosa Mentira

Capítulo 44

Luna

La noticia me había caído como un balde de agua fría, sabía que no podría emplear ninguna de las dos opciones de curación, eso me deprimió bastante, digo, si era posible deprimirme más.

-Y, si no acepto ningún tratamiento... ¿Cuánto tiempo de vida me quedaría? -dijo casi en susurro.

-Sin ningún tipo de cuidado -lo pensó un momento- 6 meses u 8 como máximo -dijo con cierta pesadez.

Me quede sin oxígeno ¿6 u 8 meses? ¡Eso era muy poco! ¡Diablos!

-Gracias -dije tristemente- ¿Me puede dejar un momento a solas por favor? -susurré.

-Por supuesto, cualquier cosa que necesite solo apriete el botón -señalo la máquina- y lo siento mucho -me dio una palmadita en el hombro y se fue.

Primero me encierran en la cárcel, luego Jared muere por mi culpa y luego... ¿¡Estoy enferma de algo que me matará (si tengo suerte) en poco mas de medio año!? ¿Qué acaso merecía todo este sufrimiento?

Lo pensé un momento y deduje que: Si, lo merecía.

Por todo el dolor que habían pasado los familiares de las personas que había matado a lo largo de mi vida en este negocio.

Empecé a llorar largo y tendido. No se en que momento me quede dormida.

Victoria

Estaba en mi habitación revisando unos papeles que me dio Damián, como Jared ya no estaba me tocaba a mi inspeccionar toda el área de la prisión, las puertas, las celdas... Todo.

Todo estaba demasiado intenso últimamente, Damián se la pasaba de aquí a allá revisando que todos hicieran lo que les correspondía.

No lo culpaba, quería olvidarse de Jared por un momento y concentrarse en salvar a la única persona que Jared había amado mas que a nadie aparte de su hermano.

Me saltó una duda sobre los planos, así que baje a buscar a Katia, que era la que me ayudaba en este sentido, llegue a la sala de estar y ahí estaba ella, sentada leyendo algo detenidamente, tomándose un café gigante. Suspiré y fui hacia ella.

- ¿Qué paso Vick? -dijo en cuanto me vio sentarme a su lado.

-Tengo una duda.

Estábamos hablando, cuando escuchamos el timbre de la puerta, le dije que yo abría.

Me asome por el mirador, era un hombre. Fruncí el ceño y abrí.

- ¿Qué deseas? -le dije estudiándolo, sabía que era uno de nosotros.

-Soy Dimitri y vine a ayudarlos -dijo en el mismo tono que yo había usado.

Lo miré fijamente, era un hombre alto, más o menos de 1.80, de tez morena, ojos color miel, cabello chino y mirada penetrante, y por alguna razón sentí que íbamos a tener malos tratos de hoy en adelante. Genial.

*Hola! ¿Cómo se encuentran este día? Espero que excelente, bueno, otra parte de la historia llegó, esta es un poco corta, lo siento, el siguiente será más largo lo prometo ;)

Sigo diciendo ¡Muchísimas gracias por todos sus comentarios y votos! Me encanta leer sus comentarios aunque sean cortitos, en serio no saben cuanto les agradezco, que la historia haya llegado a las 45,500 leídas es tan increíble, nunca me imagine que fuera a pasar de las 100, GRACIAS! :')

Los leo en el siguiente capítulo!

Pregunta: Nuevo personaje! ¿Creen que traera problemas? :3*