Capítulo 6

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Ya habían pasado 6 meses después de que la niña Luna entrara a ese mundo que para ella era nuevo, interesante pero a la vez aterrador, Jared y ella estaban juntos casi todo el tiempo, entrenaban y aprendían juntos, a simple viste parecían dos novios haciendo cosas por diversión, pero si te fijabas bien, los dos tenían en sus ojos dolor y traición que compartían mutuamente, apoyándose. Había más personas en la gran mansión, era una secta por así decirlo. En total había 25 personas trabajando para Damián Rochester, bueno al menos en ese lugar. Entre ellas su hermano.


Luna y Jared jamás habían matado a nadie y Claudia decidió que ya era tiempo de que lo hicieran... "Por separado" pensó y una sonrisa malvada se dibujó en sus labios.


Jared



Este tiempo que he pasado en este mundo asqueroso ha sido el peor de mi vida. No puedo creer que trabaje para mi propio hermano ¿Desde cuándo es así? ¿Desde cuando deje que ese idiota arruinara mi vida?... Cuando Luna llego, alegro mi estadía aquí. En fin, no éramos más que unos esclavos de un pobre desgraciado al que yo llamaba hermano.

Hoy Claudia nos había llamado a los dos, era raro, siempre nos llamaba por separado, fuimos a la oficina sin hablar, algo me decía que hoy iba a ser una noche muy larga, cuando entramos, ahí estaban él y ella.

 
–Hola –dijo el con una sonrisa en cuanto entramos
– ¿Nos llamaron? –preguntó Luna seria, como era siempre enfrente de ellos.
–Por supuesto niña, si no, no estuvieras aquí –dijo Claudia tan sarcástica como siempre.
–Les tenemos una misión... –dijo él.
–... por separado –lo interrumpió ella.
– ¿De qué trata? –me acerqué.
–Su primer trabajo real –sonrieron los dos al mismo tiempo.

Me quede impactado al igual que Luna a mi lado… ¿Trabajo real?

– ¿Que? –fue lo único que salió de nuestros labios
­– ¡Oh vamos! tu disfrutaras mucho esto Jared! adivina ¿Quién te toco?
– ¿Quién?
– ¡Pues tu queridísima amiga! ¡Grenminda! –Damián sonrió con gusto.

¡Ese nombre! ¡Lo odiaba! ¡Desde que la conocí no ha sido más que un dolor de cabeza! Simplemente no quería volver a verla nunca, ¡Ella fue la que causo que yo estuviera sirviéndole a mi hermano y que me encontrara en esta vida de mierda! ¡¡Pero me las pagara!! ¡Y esta era mi oportunidad perfecta! Aunque ¿Matarla?.. Bueno. Es por ella que estoy aquí, así que le daré un regalo... Sin esperarlo una sonrisa salió de mis labios, no podía creer que yo estuviera diciendo esto, pero el deseo de vengarme era más fuerte que el razonamiento que ahorita pudiera tener.

–Veo que te acuerdas –dijo satisfecho– bien, aquí tienes –me dio un sobre.

Lo abrí, estaban fotos de ella, me ardían los ojos solo de verla, pase rápido ese paso y fui hasta donde decía en qué lugar estaría y a qué hora, era como un tipo misión, que yo estaba encantado de realizar.

–Y para ti Luna, es un pequeño trabajo... Esperemos puedas cumplirlo, es una vieja amiga mía. –Le dijo Claudia y le entrego el sobre– espero que la trates bien ­–sonrió con gusto, vi como Luna abría el sobre y tras inspeccionarlo afirmo con la cabeza.
–Esperemos puedan con esto, no queremos errores ¿De acuerdo? Saben que me gustan que las cosas queden limpias.
–Lo haremos –dijimos Luna y yo al mismo tiempo, nos dirigimos a la puerta, Luna salió primero y al momento en que yo iba a salir alguien hablo.
–Jared… –dijo Damián, yo volteé a verlo– ten cuidado

¿En serio mi "hermano" estaba preocupado por mí? No lo creía... Afirme con la cabeza serio y salí de ahí, los ojos se me llenaron de lágrimas, hace mucho que no recibía ni siquiera una muestra de cariño por parte de el… Me limpie las lágrimas que empezaban a salir y correr por mis mejillas y me dirigí a mi habitación, el sobre decía que estaría en su departamento a las 22:30hrs, yo tenía que estar esperándola ya.

El cómo matarlos era nuestro trabajo. No era fácil. En fin, me arregle elegante, con un traje de gala, un poco despeinado a la moda y loción, estaba listo. Me mire al espejo y por un momento no me reconocí, tenía una mirada de odio y demasiado dolor, aparte de que me veía más alto y un poco más delgado ¿Que me estaba pasando? Negué con la cabeza y salí de ahí, Luna estaba esperándome abajo, llevaba un hermoso vestido corto, color oro, zapatos altos de tacón y el cabello en una coleta alborotada, se veía hermosa. La tome de la mano y salimos al garaje de autos.

No sabíamos cual escoger, todos eran realmente hermosos, pero al final escogimos un Jaguar 1963, era tipo XKE Roadster de 6 cilindros, color rojo. Estaba precioso, nos subimos. Parecíamos una pareja que iba a una fiesta de gala o algo así, salimos del garaje, nuestras misiones eran separadas, primero estaba la mía, así que llegamos al destino, paré junto al edificio y suspire. Antes de salir Luna me detuvo del brazo.

–Cuídate mucho Jared –yo volteé a verla, sus ojos café claro se veían preocupados y temerosos, le sonreí y agarre su mano en mi brazo.
–Estaré bien –sonreí– ¡Tú también cuídate mucho! ¿De acuerdo? –parecía una despedida, no quería que lo fuera, le di un fuerte abrazo que ella correspondió.

Nos separamos y antes de que pudiera decir algo sus labios ya estaban sobre los míos. Fue un beso ardiente, lleno de pasión, miedo, temor, dolor, pero también había cariño, ternura y amor. Puse mis manos sobre sus mejillas y ella las puso en mi cabello, probar el sabor de sus labios era algo realmente reconfortante, respirar su aliento fue algo que me dio fuerzas para hacer lo que esta noche era mi deber, nos separamos y sus ojos brillaron como nunca al encontrarse con los míos. No dijimos nada más, simplemente salí del carro y al cerrar la puerta ella arranco, la vi alejarse. Subí al departamento y espere a que Grenminda llegara, eran las 22:25hrs.

Dieron las 22:43hrs y ella llego. Todo estaba a obscuras en su departamento, solo estaba yo sentado en el comedor, en la silla que daba directamente a la puerta. Cerro con cautela, encendió la luz y al verme soltó las bolsas que llevaba en las manos, se tapó la boca y se me quedo viendo horrorizada, yo simplemente sonreí.

–Ja…Jared Rochester –dijo con dificultad
–Grenminda Houttson, cuanto tiempo sin hablarnos ¿No crees? Ya te extrañaba –me paré de la silla en donde estaba y me acerque a ella– ¿No me invitas un trago?
–¿¿Qué haces aquí??
– ¡Oh vaya! ¿Pero que no te da gusto verme? Después de lo que me hiciste debes de estar feliz. –Sonreí amenazador– solo quería darte una visita amistosa –seguía avanzando mientras ella me miraba y retrocedía.
–No… No fue mi intensión meterte en esto... ¡Damián me dijo que tenía que hacerlo! Mi trabajo solo fue llevarte a esa casa –dijo desesperada.
–Pudiste no haberlo hecho ­–la tomé de la muñeca a lo que ella dio un brinco– ¡Yo confiaba en ti! –mi tranquilidad iba desapareciendo, saque sin que ella se diera cuenta el cuchillo que tenía en mi cinturón.
–Por favor... no lo hagas... –dejó de retroceder ya que choco con la puerta.
–Eso era lo mismo que yo te pedía mientras tú me veías a mi siendo arrastrado y humillado por mi propio hermano ¿Te acuerdas? –de sus ojos empezaron a salir lágrimas, esto era algo que no podía soportar.
–Ja… Jared ¡No seas como tu hermano! ¡Él es un asesino! ¡Tú no! –forcejeo para soltarse de mi mano, pero la agarre más fuerte.
–Gracias a ti ahora soy como el ¡Arruinaste mi vida! ¡Ahora te regresare el favor!! –Sin pensarlo dos veces le enterré el cuchillo en el estómago, ella solo me miro con dolor y cayó al suelo. Eso no me bastaba, quería hacerle pagar todo el sufrimiento, la levante y le enterré el cuchillo en el brazo. Ella solo grito de dolor.

Fueron 15 minutos de hacerla sufrir, enterrándole el cuchillo por diferentes partes de su cuerpo, ella gritaba sin gritar, ya no le salía la voz, yo lloraba en silencio, este no soy yo, el que ahora está enterrándole el cuchillo a Grenminda es ese hombre en el que me he convertido, ¡¡El que solo quiere venganza!! Cuando ya no pude más, me deje caer en el suelo, llorando sin cesar, ella me vio ¿Aún estaba viva? ¿Cómo era posible?.. La mire con más odio todavía.

–Ma... mátame de una vez ¿Qui... Quieres? –agarro mi mano a lo que yo la empuje y le di una cachetada, su tacto me quemaba.
– ¡No! ¡Te hare pagar todo el sufrimiento que he pasado todo este tiempo! –Me pare de ahí, le empezó a dar de patadas.

Toda la ira, la furia, el dolor, el miedo, estaba reflejadas en esos golpes que le daba a su cuerpo. No sé cuántas le di, pero de un momento a otro dejo de moverse. La vi con cautela. La Misión de esta noche estaba completa, ahora solo faltaba cubrir la evidencia.

Me lave las manos en el baño, acomode todo para que se viera normal, a ella la cargué hasta la cama y la tape para que pareciera que estuviera dormida, había sangre en el suelo, lo limpie con un trapo y luego lo queme. No dejé huellas digitales, ya que use guantes todo ese tiempo, también estos los queme, me asegure una vez mas de no dejar pistas. Todo en orden, Salí de ahí, al bajar vi que el Jaguar ya estaba esperándome con Luna adentro, creo que esta noche los dos habíamos cumplido nuestra misión.


*Me alegra que les este gustando la historia :) en serio si tienen alguna opinión o sugerencia me encantaría leerlos <3 Si les gusto no olviden valorar con la estrellita y comentar! los amo!!*

Una Hermosa MentiraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora