- ¿Estabas sola?
Yo no estaba preparada para decirle que no, que estaba con otro chico que le gustaba.
- Si - mentí.
- ¿Atacaron al vendedor de comida?
- Si, bueno, porque estaba ahí parado.
- Esto es muy raro y que hayan venido hasta tu casa, empeora las cosas.
- Lo sé.
- ¿Por qué me llamaste a mi primero y no a Zacarías?
- Quería contártelo primero.
- ¿Por qué?
- No lo sé, confió en ti - dije indiferentemente.
Pero era la verdad, confiaba en el, más que nunca.
- Tienes que llamar a Zacarías y contarle.
- Lo sé, todo eso será un fastidio.
- Tendrán que registrar toda la casa.
- No oculto nada.
- ¿Nada?
- Nada Alan, lo prometo.
- Está bien, confió en ti.
Le di una mirada fugaz y las cosas se pusieron más tensas.
- ¿Estás bien? - pregunto.
- Lo estoy, ahora - comente.
Estaba un poco mejor, eso había sido una locura y tenerlo aquí acompañándome y cuidándome era... era agradable.
- Gracias por venir - dije tímidamente.
- De nada - se acerco a mi frente y dudo pero al final lo hizo, beso mi frente.
Un beso fraternal, un beso que no conllevaba nada de lo que a simple vista era, una amistad, solo eso. 30 minutos después, mi casa estaba llena de los del clan, Zacarías y Sebastián se habían unido a Alan, estaban reunidos hablando, mientras el resto del grupo revisaba toda la casa y sus alrededores. Les explique con lujo y detalle lo sucedido, una y otra vez, esto era muy pero muy extraño.
- Guess - dijo Zacarías, habían terminado de registrar toda la casa.
Le pedí que fuese todo muy rápido porque mis padres llegarían en cualquier momento.
- Por favor descansa, el lunes a primera hora nos reuniremos- dijo Zacarías.
- Si señor - dije.
- Todos fuera - grito.
- Guess, que te mejores - dijo Sebastián y se marcho.
- Cualquier cosa, tienes mi numero ¿Ok? - dijo Alan llegando a mi - Me preocupa el dejarte aquí.
- Mi familia llegara en cualquier momento, no estaré sola.
- Igual, me preocupa aun más que puedan volver atacar.
- No creo que lo hagan.
- Eso espero, cualquier cosa llámame, por favor - suplico.
- Está bien.
Se marcho junto a los demás, corrí escaleras arriba para maquillar mi herida y algunos rasguños que tenia. Media hora después, todos volvieron y nadie sospechaba nada. Todo había quedado como antes de que llegara Santiago.
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Naomi
Romance¿Imaginar lo difícil qué puede ser llevar una doble vida? Naomi no imaginaba lo caro que pueden llegar a ser las consecuencias de sus actos y lo difícil cuando las dos vidas que lleva se ligan, cuando todo se enreda, cuando mientes, engañas, cuando...