Capitulo 89

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-          ¡Felicidades! – me dijo Eliot.

En eso reaccione y me levante a regañadientes, me había quedado sin aire, esto no podía estar pasando. La gente siguió aplaudiendo y yo solo quería salir corriendo.

-          Felicidades a los tres, nos veremos el lunes a primera hora para la segunda etapa, pueden retirarse – anuncio Ignacio.

-          ¡Felicidades amiga! – llego a mi entusiasmada Alena y me abrazo.

-          ¿Acaso no estás emocionada? – pregunto Eliot.

-          ¡Claro que no! – acate sin salir de mi asombro.

¿Cómo era posible? Pero si lo hice pésimo, no complete todas las pruebas y rendí muy poco ¡¿Cómo diablos me iban a tomar en cuenta?!

-          Guess te solicitan en la oficina de Ignacio – dijo Jess llegando a mi – Y por cierto felicidades.

-          Gracias Jess – respondí por mera educación.

Bueno, no desesperes Guess aun puedes quedarte en la segunda ronda.

-          Sinceramente no lo esperaba – comente.

-          Bueno pero quedaste, eso significa que te esforzaste al máximo y ellos te consideran capaz de poder ser la nueva líder, nuestra dirigente – comento con buen ánimo Alena.

-          O puedes morir en el intento – bromeo Eliot.

-          Debo irme – dije retirándome.

Salí entre el bululú hacia la oficina y ¡Aff! Estaba histérica. Dirigí mi mano para tocar la puerta pero en eso se abrió inesperadamente y choque con un hombre asiático y de la nada se oyó un sonido extraño, como una mecha o llama prenderse agresivamente.

-          Disculpe – me apresure a decir.

Este misterioso hombre de piel morena y ojos achinados dirigió su vista a una dirección. Trate de mirar y solo observaba una extraña lámpara con una gran esfera rodeada por un dragón, donde dentro ardía una potente llama amarilla. El sujeto me miro curioso y me dio paso. Entre a la sala con cierta timidez y él se marcho. Todos los jefes estaban reunidos.

-          Guess - pronuncio un inquietante Ignacio que estaba apoyado de su mesón y a sus lados el resto de los jefes - Pasa, pasa - invito.

La mirada de todos estaba sobresaltada y no entendía porque, no paraban de dividir su vista entre mi pase y esa lámpara.

-          Señores - vocifere.

-          ¿Qué tal te cayo la noticia? - pregunto con actitud desafiante Ignacio.

-          Sinceramente no lo esperaba - acate.

-          Nosotros tampoco - su voz era muy gruesa.

Así que ellos tampoco esperaban que yo quedara entre los tres ¿Por qué elegirme entonces? La única respuesta que venía a mi cabeza era "Porque ellos lo saben" ¿Cómo? No lo sé, pero en definitiva esta me lo casi confirmaba.

-          Será una lucha interesante - comento incorporándose. 

-          Puedo imaginarlo - conteste.

-          No, créeme que no.

Lo mire extrañada.

-          Te llamamos para avisarte que tu cuarto será registrado por completo

NaomiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora