Capitulo 30

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Ok chicas, llegamos al capitulo 30. Y no, no es nada porno por sus siglas en romano jaja. Nuevamente gracias por sus lecturas, votos y comentarios y a los lectores fantasmas también agradezco por leerme desde su lugar recóndito. Espero lo disfruten.

xoxo, Tess.

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El me miro confundido y yo solo abri los ojos como platos, por suerte entendió la señal y saludo a mi madre.

- Estoy feliz de conocerte querido Alan.

Mi mamá siempre tan amorosa, sin importar quien, luego mi papá le estrecho la mano.

- Un placer conocerte hijo.

Mi papa siempre ha sido de buen humor con los chicos que han estado conmigo, me alegra que tenga tanto sentido del humor y carisma, no es de esos gruñones que quieren tener a las hijas como trofeo, que nadie las mire. Kyle se acerco y le estrecho la mano, el es más serio y el interrogatorio seria después de la cena.

- Siéntense mientras yo bajo algunas cosas que deje en el carro – vocifere y llame a Santiago.

- Está bien querida – grito mi mama desde la sala.

Salimos rápidamente. Ahora si estaba metida en un gran lio.

- ¿Qué sucede? ¿Quién es Alan? – pregunto Santiago.

- Alan es... con quien estaba saliendo, pero no vendrá – dije alterada.

- ¿Por qué?

- ¡Por qué tiene una hija! – susurre totalmente alterada.

- ¿Qué? – me miro como si le fuese dicho que era realmente era una anciana con muchas cirugías encima.

No era hora de explicaciones. Caminaba de un lado al otro ¿Ahora qué haría?

- Yava... - dijo - ¿El es el chico qué apareció en la cena? ¿Con el qué compartes tatuaje? – pregunto y su cara decía lo sorprendido que estaba.

Lo mire sin más ¿Qué podría responder? ¿Mentir? En este punto se daría cuenta.

- Naomi ¿Con qué clase de chicos has estado saliendo? – pregunto algo enojado.

¡Dios sonó tan parecido a Tony! Tuve una idea, muy muy loca, pero era la solución a este problema que seguro me causaría más problemas, pero tenía que intentarlo.

- Necesito que te hagas pasar por Alan, Santiago – le pedí.

- ¿Qué? – pregunto estupefactamente.

- Ya mi mamá cree que lo eres, solo será durante la cena, luego te puedes ir a tu fiesta – dije desesperada – Mi mamá está muy emocionada por conocerlo y no puedo romperle esa ilusión, hoy no. Te lo pido, te prometo que te recompensare – roge.

- Naomi yo... – balbuceaba, estaba dudoso - ¿Qué le dirás después?

- La verdad, se lo explicare todo, pero hoy no, no puedo, se pondrá triste, quiere tener nietos ya.

El se rio. Luego lo pensó y pensó...

- Está bien, te ayudare – contesto divertido.

Y salte inmediatamente a abrazarlo. ¿Por qué lo estaba abrazando? Luego fui consciente y me aparte poco a poco, sin quitar mis brazos alrededor de su cuello, estábamos a centímetros.

NaomiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora