Dirty Angel©(#2)

Darkia

 —Azazel... —dije dolorida.

Él comenzó a decir palabras y a sollozar. Mi cuerpo se debilitaba y dolía demasiado. Sabía que iba a morir. Preferí sacrificarme que verle morir.

"Sublatti... John, os he fallado... Dolor... Sangre... Muerte... Perdonadme por ser un fracaso... Sabía que no podríamos dos... He descubierto y aprendido tantas cosas... Con la venganza y rabia no se consigue nada, sólo ensuciarte a ti mismo. Soy un sucio ángel... Solo con los sentí... Azazel... Yo te...".

Mis párpados se cerraron. Me vi envuelta en oscuridad. Estaba arrodillada y todo a mi alrededor se convertía en negro. Era mi hora. 

"¿Hasta aquí he llegado? Soy un fracaso...".

—Te equivocas —contestó una voz femenina desconocida—. ¿Ya te rindes? ¿Recuerdas qué te dije aquel día? 
Observo un ángel de baja estatura, siendo su figura todo oscuro, sin poder ver su físico. Lo único que diferencié fueron sus ojos dorados, iluminándome. Anduvo hasta mí y recibí una guantada en la cara. No logré pronunciar palabra y estaba desvaneciéndome. 
—Déjate de tonterías y vive, ¿quieres seguir mí mismo camino? Debes cumplir tu misión y salvarnos a todos de este caos. Te daré tres millones de palizas si es necesario y después levantaré ese pesado cuerpo para que sigas luchando. ¿Lo has entendido?
Eso último lo entendí muy poco, pues ya iba siendo tarde. Me derrumbé al suelo e iba desapareciendo. La extraña corrió hacia dónde estaba y me mantuvo entre sus brazos. Un mechón dorado rozó mi nariz y una lágrima mojó mi mejilla.
—¡Resiste! ¡Vamos! ¡Levántate! —Sus súplicas apenas me llegaban—. ¡DARKIA RENACE!  
Su grito me espabiló y todo cambió. Lo oscuro se convirtió en luz. Esa chica desapareció, y me sorprendió estar flotando. De repente, vi una mano intentando alcanzarme. La visión borrosa se aclara, dándome cuenta que es un recuerdo. Fue aquel momento de la caída. Azazel intentaba evitar ese descenso, y, al parpadear, vi al nuevo Azazel, lanzándose al vacío y cogiendo mi mano. Sonrió y me elevó más allá. Era... Extraño todo, parecía un sueño. 

¿Estaba muerta o ella me había salvado?