-Mierda - escucho como Eric susurra.
Miro al chico, que doy por hecho que es Sean, fijamente a los ojos. No se que siento ahora mismo, es algo raro. Me encuentro muy nerviosa, inquieta, incluso con miedo...
Mi mirada pasa, de Sean, a la morena con la que lleva toda la noche. Esta me mira con una cara de odio y diversión a la vez.
-Contesta, ¿qué te han dicho esos dos cabrones? - su voz es dura, pero con un toque de diversión. Apuesto lo que sea que le hace gracia lo asustada y nerviosa que me encuentro.
-Ellos... bueno - empiezo a hablar y mi voz sale más aguda de lo que esperaba, por lo que carraspeo para que vuelva a su tono normal - nada, es decir, me han dicho algo, pero nada importante - ya no lo estoy mirando ni a el ni a la morena, mis ojos se van directos a los de Eric, en busca de ayuda. Pero este se limita a encogerse de hombros, mal amigo.
-Oh ¿en serio? - a pesar de que no lo estoy mirando, se que Sean se mueve. En unos segundos pasan de estar a nuestras espaldas a justo delante nuestra.
-Kim, espérame en mi coche - le dice el tatuado a la morena.
-Pero... - antes de que ella pueda continuar el la interrumpe.
-Ahora - su voz sale muy fría y exigente. Miro a la chica esperando a que esta reaccione ante su amenazante voz, pero me sorprendo cuando, la tal Kim, asiente y se marcha. ¿Cómo deja que la traten así?
Nos mira a los dos de nuevo, pero en mi ya no ve a la chica asustada y nerviosa de hace unos segundos. Encuentra una Grace enfadada. Nadie se merece que le traten así.
-Tu, contéstame, ¿qué mierda te han dicho Peter y Martin? ¿Y por qué siquiera hablan con alguien como tu?
Vale ahora si que me ha ofendido, ¿alguien como yo?¿pero este que se cree?
-Mira idiota, a mi me da exactamente igual tu reputación o mierda, ¿quieres saber que me han dicho tus perros falderos? Exactamente esto - lo señalo y luego vuelvo a señalar en la dirección en la que Kim se a ido - y ellos sabrán por que hablan con alguien como yo - esto último lo resalto - créeme que yo estoy igual de sorprendido que tu. Ahora, si me das tu permiso - hablo sarcásticamente - mi amigo y yo nos vamos.
Cuando acabo mi discurso, Sean me mira con el rostro más neutro que en la vida he visto. Mi coraje y valentía, igual de rápido que han venido a mi, se esfuma al ver sus ojos, esos tan azules y misteriosos.
-¿Te crees muy lista no? - su rostro sigue igual, no cambia ni un segundo. Al ver que yo no respondo sigue hablando - no me conocer, y al parecer no sabes como funcionan las cosas aquí. Si no quieres tener problemas, aléjate, y te lo digo muy en serio, es un consejo. Y tu Eric, deberías de poner al día a tu nueva chica.
-Sean, no es mi chica - ellos dos se miran.
-¿Os conocéis? - pregunto mirándolos.
Una sonrisa sarcástica sale de la boca de Sean y yo lo miro interrogante.
-Por desgracia si - contesta Eric - venga Grace, vámonos, te llevaré a casa - asiento y me dispongo a irme con Eric, pero Sean vuelve a interrumpir.
-¿Tu la vas a llevar a su casa? - Eric asiente obvio - De ninguna manera, vamos - ahora me mira a mi y hace un gesto con su cabeza.
Espera, espera, espera. ¿Quiere que me vaya con el? ¿Es coña no?
-¿No hablaras en serio, no?
-Yo nunca bromeo, Ángel.
-Sean, no la vas a llevar tu, ella viene conmigo y punto.
Sean esta empezando a ponerse nervioso, pero de una forma agresiva, y me da miedo. Sus puños están apretados y su mandíbula muy tensa. No es buena señal, en absoluto.
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Autumn
Teen FictionGrace una chica con sueños e ilusiones. Sean, un chico sin futuro ni esperanza. ¿Cómo dos personas tan diferentes pueden encajar tan bien juntas? Juntos se enfrentaran a muchos retos, su vida no será fácil, pero el amor es más fuerte que...