Capítulo 20

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Grace's Pov

Un leve ruido me hace despertar. No tengo un sueño muy profundo, por lo que soy propensa a despertarme por lo más mínimo. Al despertarme desbloqueo mi móvil, éste marca las tres de la mañana. Froto mis ojos, estoy súper cansada, ¿qué me ha podido despertar? Entonces, justo cuando ese pensamiento llega a mi mente, lo escucho. Escucho el gran ruido que hace un trueno al caer. Suelto una risita. Obviamente hay truenos, esta noche, como muchas otras, hay tormenta.

Me relajo en la cama intentando recuperar el sueño. Cuando casi vuelvo a estar dormida, escucho algo. Mis ojos se abren de golpe. Eso no ha sido un trueno. El ruido venía de la ventana. Me levanto de la cama, agarrando la manta superior de ésta y enrollandomela al rededor del cuerpo.

A paso lento me dirijo a mi gran ventana. Separo las cortinas y abro un poco. Un frío congelador me golpea y un poco de lluvia se cuela en mi habitación. Asomo la cabeza mirando a mi patio trasero, pero no veo nada extraño. De repente dirijo mi mirada a la pared que se encuentra justo debajo de mi ventana y no puedo evitar dar un grito.

Sin pensarlo doy pasos hacia atrás y me pego a la pared que se encuentra en la otra punta de la habitación, paralela a la ventana. Agarro con fuerza la manta que me rodea, como si eso pudiera protegerme de quien quiera que esté intentando entrar a mi casa.

¿Se habrán enterado de que estoy sola? Pero...¿Cómo?

Me siento un poco estúpida cuando me doy cuenta de que le acabo de abrir, literalmente, la ventana al sujeto y que en vez de huir me quedo aquí... ¿esperándolo?

Cuando reacciono y estoy a punto de salir corriendo, el sujeto entra en mi habitación. ME congelo del miedo.

Es un hombre, lo se por su gran estatura. Va vestido entero de negro, pero no puedo ver su rostro, ya que esta de espaldas a mi, lleva capucha y la luz de mi habitación se encuentra apagada.

Cuando el hombre se da la vuelta cierro los ojos, estoy demasiada asustada. Escucho como se acerca a mi. Y cuando noto que está a centímetros de mi, es cuando mi cuerpo tiembla como gelatina. Voy a morir, no se por que, pero voy a morir.

-Hola - mi corazón se detiene. al igual que mi respiración. ¿Es esto verdad? Poco a poco abro mis ojos y me quedo totalmente embobada.

No se que decir, simplemente estoy desorientada.

-Pero...¿qué? - pregunto mirando a los ojos azules del chico de los tatuajes.

-Podrías saludar - dice con tranquilidad, más de la que suele llevar.

Lo miro frunciendo el ceño.

-¿QUÉ PODRÍA SALUDAR? ¡Has entrado en mi casa por la ventana, vestido como un ladrón, o peor, un asesino y eso es lo que me dices! - me estoy alterando. ¿Qué le pasa por la cabeza?

-Necesitaba venir - responde, de nuevo con tranquilidad. Me da miedo su actitud. Normalmente está muy alerta y tenso.

-¡PUERTAS! - me mira con una extraña expresión, sin entender lo que quiero decir - ¡EXISTEN LAS PUERTAS!

Sean empieza a reír a carcajadas, pero sin hacer ruido.

-Oh, ¿ahora soy graciosa? ¿En serio? - digo cruzándome de brazos.

-Venga Grace, ¿qué esperabas? ¿qué viniera aquí y llamara al timbre? - lo miro con las cejas levantadas, a punto de decirle que si, es lo que esperaba. - ¿Qué darían tus papis? - se que se está burlando de mi por como pronuncia la última palabra. ¿Cree que soy un bebe?

-Pues no se lo que dirían listo, ya que no se encuentran aquí - respondo cansada. -¿Puedo saber que es lo que quieres y por que tenías que venir a mi casa? - espero una respuesta de su parte, pero el no responde, se limita a mirarme con esos ojos tan profundos - Creía que ya te habías cansado de mi - hablo muy enseria. Me acuerdo aún cuando me dejo tirada y no volví a saber de él.

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