~RIVALES~

Capítulo 6: ¡Esto no puede ser!

Me fui con Abbie de compras y pasamos horas buscando algo lindo para ponerme para hoy. Al terminar y poder encontrar por fin lo que necesitaba, nos fuimos a un restaurante cerca, entramos tomamos puesto y pedimos algo de comer. Abbie pidió una ensalada de frutas pues es su favorita, yo pedí un capuchino. Mientras esperábamos las ordenes estaba pensando en lo que puede pasar hoy y eso me emociona, pero luego sentí la mirada de Abbie y voltee para ver que era. Me estaba mirando extraño como si aguantara las ganas de ir al baño combinado con perversión.

-¿Qué pasa Abbie?-pregunte al ver su terrorífica expresión.

-No nada...-dijo.

-¿Segura?-dije. Pero me sonrío picara.

-Emily ¿como te sientes al saber que veras de nuevo a Ryan?-preguntó de golpe.

-Abbie...no lo sé-dije.

-Emily, debes ser educada y diferente tú sabes, recuerda que él es un caballero-dijo.

-Lo sé, ahora eso es lo que tengo en mente-sonreí-dare lo mejor.

-Claro, pero recuerda que estás con Nicolás. Pero si está muy bueno me lo presentas-dijo.

-Abbie, ¿en serio? Le diré a Adam-dije burlona, pues a ella le gusta Adam o eso creo.

Vi como se ruborizó.

-N-No lo metas a él en esto-dijo.

-Deberias declararte ya-dije.

Me miro con rabia.

-No. Te dije que después ahora no tengo las agallas-dijo.

-Como tú digas-dije.

La mecerá trajo nuestras ordenes comimos y nos retiramos, deje a Abbie en su casa y me despedí pero no sin antes recibir sus consejos de como estar con tu ex amor de infancia y "esas cosas". Me fui hasta mi departamento y comencé a jugar un poco en mi consola, sé que estoy algo grande para eso, pero es qué amo jugar.

Pasaron unas horas me pare a tomar un poco de agua, y mire el reloj que me dejo sorprendida haciendo que regara toda el agua. Siete y media y yo no me he bañado ni nada. Al enterarme de esa hermosa hora corrí hasta el baño dejando toda mi ropa en el piso sin mirar atrás me bañe bien, tal vez vaya tarde pero no puedo bañarme como sea.

Al termino me puse lo que me compre, lo cual era una falda de tuvo por encima de la rodilla una blusa rosada clara con mangas hasta los codos, un collar cabello suelto me maquille y puse unos tacones no muy altos. Listo ya debo irme.

Tome las llaves de mi auto cerré todo y me dirigí de una a casa de mis padres. Al llegar me recibió Roberto un empleado y gran amigo de mi padre.

-Buenas noches señorita, llega algo tarde-dijo ayudándome a pasar.

-Lo sé, pero ya estoy aquí-dije.

-Si, ahora vaya la esperan en la alcoba-respondío amable Roberto.

-Si, gracias-dije y entre enseguida.

Entre a la alcoba vi a los padres de Ryan y a mis padres, les Sonreí.

-Adam, Ryan, vengan ya llego Emily-dijo mi madre.

Mi corazón se comenzó a acelerar, ya voy a volver a ver a Ryan que emoción.

-Buenas noches-salude mientras me acercaba a los señores Parker.

-Hola querida Emily, pero mirate como estás de grande-dijo la señora Parker.

-Muchas gracias, usted aún se concerba-dije.

-Oh, que linda gracias-dijo.

-Mucho gusto volver a verla Emily, ya es toda una señorita-dijo el señor Parker.