~RIVALES~

Capítulo 42: Te Odio con mucho Amor

Narra Ryan.

Tenía todas mis maletas listas sólo era esperar el taxi que nos llevaría al aeropuerto, sí "nos" lastimosamente Ángela logro convencer a su padre para que la llevara conmigo, eso es estresante pero ya no puedo hacer nada, pero de todas formas que importa ya todo es igual de estresante que antes la mujer en la que deposite todo mi amor, mi confianza ya no quiere nada conmigo todo me da igual. Si acepte este empleo es por que estar aquí me tortura y me tortura verla a ella.

Emily ¿por qué no fui suficiente para ti?

Me deje caer en la cama con desesperación un lado de mí no se quería ir, pero el otro me decía que si me quedaba sufriría más.

La puerta comenzó a sonar no quería abrir.

-Ryan corazón soy yo Ángela-me levante con irritación y abrí la puerta.

-¿Ya tan rápido me viniste a joder?-dije para luego sentarme en la cama.

-Hum no seas malo, ¿vamos a dar un paseo antes de irnos?-sujirió. Rodeé los ojos. Y negué.

-No quiero ir a ningún lado.

-Pero corazón es la ultima salida en está ciudad debes pas...-la interrumpí furioso.

-¡Ya te dije que no Emily!-dije enojado.

-¿Emily?-se llevo la mano a el pecho con exageración.

-Hum no molestes más Ángela vete quiero estar solo-empuje su brazo para sacarla.

-Vaya Ryan esa mujer si te puso amargado-chillo-pero no te preocupes cuando estemos allá te pondré muy animado.

Rodeé los ojos con disgusto y asentí para luego hacer un ademán con mi mano para que se fuera.

Y gracias a Dios hizo caso y se largo, ya no la soporto. Creo que no podre superar a Emily inconscientemente dije su nombre, estoy seguro que si me acuesto con otra haré lo mismo.

Tire mis cosas al piso con frustración ya no tenía ganas de hacer nada, pero entonces recordé que tenía algo en mi antigua casa y habitación, me puse mi chaqueta y tome las llaves de mi moto y baje a toda velocidad tropezando con algunas personas llegue hasta el estacionamiento encendí mi moto y cogí camino a casa de mis padres.

Fui lo más rápido de que permitía apenas llegue lo primero que hice fue subir a mí antigua habitación.

-¿Ryan hijo?-dijo mi madre subiendo las escaleras.

-Hola mamá perdona no saludar voy de afán-dije mientras buscaba en mi cajón de cosas importantes.

-Claro, pero si quieres te tomas algo o no sé...

-No te preocupes por eso no hace falta-dije ya más calmado al encontrar aquel objeto que tanto apreciaba.

-Bueno cariño pero ya sabes si necesitas algo de mí solo pidelo-dijo mamá dándose la vuelta para irse.

-Mamá-la llame ella me volvió a mirar.

-Mamá yo...¿puedo preguntarte algo?-me fui acercando.

-Claro cariño lo que quieras-me dedico una de sus lindas sonrisas.

-Recuerdas que te dije que me gustaba una niña-ella seintió.-esa niña era Emily.

-Oh hijo eso ya lo sabía-rió-eras tan obvio cuando llegabas a casa todo feliz y era por que acabas de jugar con ella.

Reí por lo bajo-tienes razón era obvio.

-Además yo vi todo el día en que nos fuimos ella te dio eso verdad-señalo la piedra que tenía en mis manos.