Cinderella y los 7 enanitos (Got7 y tu)

# 34

Entre a su habitación sin esperar la respuesta a los tres golpecitos que me antecedieron, lo encontré recostado en la cama, con sus auriculares bien puestos mirando al vacío, me recosté usando su pecho como almohada.

— ¿Y tú querido?

—tuvo que ir a la agencia.

—ahora entiendo porque estás aquí.

—a que te refieres.

—no te hagas la desentendida, si él no se hubiese ido nunca habrías venido a verme.

—eso no puedes asegurarlo.

—claro que puedo, no te separarías de él si no te obligan.

—vamos Jb, tampoco exageremos, me gusta y lo quiero pero las relaciones que mencionas no son ni saludables ni estables, cada uno necesita su espacio.

—espero que pienses lo mismo después de una semana, porque déjame decirte que conozco a Jackson, y sé que te querrá pegada a él todo el tiempo.

—espero que no, en una de esas me hostiga y termino dejándolo.

—no seas tonta, tanto que sufriste por él y andas diciendo esas cosas.

—está bien no digo más.

Permanecimos en silencio por un buen rato, compartimos sus auriculares y nos sumergimos cada uno en su propio mundo. No era la primera vez, ya hasta perdí la cuenta de los momentos así junto a Jb, estos momentos que me fascinan, porque no hay entre nosotros una sola pizca de incomodidad en medio del silencio, no hacen falta las palabras para comprendernos ni para comunicar nuestro sentir, estar juntos es suficiente.

—Aunque me duela decir esto, espero que encuentres la felicidad junto a Jackson, es un buen chico, seguro le gustas demasiado para que haya logrado portarse tan frio contigo, pero ahora que se confesó las cosas serán diferentes.

—ojala el cielo te escuche, ya hasta estaba a punto de comprar el boleto a Ecuador cansada de la indiferencia de tu amiguito.

—en ese caso debo agradecer su confesión en lugar de maldecirlo.

— ¿le agradecerás?

—claro que sí, prefiero verte en sus brazos que no verte.

—Oww, siempre tienes las palabras adecuadas.

—es porque tú las inspiras

—De verdad no entiendo cómo es que no me enamore de ti— le decía entre carcajadas

—no te burles ________

—no me estoy burlando Jb

—pues no te rías si no lo haces—su tono aso a ser un poco serio

—está bien, hoy estas muy sensible.

—y que más querías, hoy se acabaron mis oportunidades.

—...

—tienes que prometerme algo

— ¿qué cosa?

—tienes que ser feliz con él o con quien sea, solo se feliz

—soy feliz Jb

—entonces sigue siéndolo por siempre ¿sí?

—lo seré Jb ¿sabes porque?

— ¿Por qué?

— pues porque siempre te tendré a ti a mi lado.

—no ya no, ya no quiero estar a tu lado

— ¿estás hablando en serio?

—caro que no tonta—esta vez era él quien reía a carcajadas mientras me despeinaba

—no hagas eso Jb, harás que muera de melancolía la próxima vez que te escuche decir algo así.

—mejor ya ándate que si tu amorcito te encuentra aquí no solo termina contigo, si no que te regala el pasaje de regreso.

—es cierto, ese hombre es demasiado celoso, pero tiene que aprender a confiar en mi ¿o no?

—lo que digas nena pero no lo tientes en su primer día.

—está bien me voy, pero no porque quiera, sino porque me echas— decía mientras me retiraba entre risas cerrando la puerta detrás de mí. Pero fue demasiado tarde para evitar que Jackson se pusiera celoso.