Capítulo Veintisiete.

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Fin de semana.

Escucho alguien tocar la puerta muy fuerte y con desesperación. Me levanto de mi cama descalza y camino hacia la puerta, cuándo estoy frente a ella gritó:

-¿Quien es?.

- Sharon, tu mejor amiga. Llevo media hora parada aquí afuera. - dice con un tono de enojo.

Abro la puerta y le doy una sonrisa.
Veo lo linda que se ve con ese jeans negro, sus botas cafés, su suéter púrpura y su bolso café.

- ¿Que haces aquí?. - murmuro y doy un bostezo.

- Mike anda en un viaje de negocios y a estas horas siempre estoy con él entonces decidí venir a verte. - murmura mientras se tira al sofá de mi casa.

Doy una risa entre dientes y le murmuro:

- ¿Quieres desayunar?

Asiente con su cabeza mientras enciende la televisión.

Camino hacia la cocina, abro el refrigerador y decido hacer unos huevos con jamón, y unos panqueques. Mientras un panqueque se cocina pongo el café y sirvo los huevos en cada plato y así conforme los panqueques, sirvo ambos cafés y Sharon lleva ambos platos con la comida a la mesa y yo llevo las tazas con café y un poco de miel.

- En la bandeja de entrada de mi correo electrónico tengo un Email de Nicolás, pero no lo e querido leer. - murmuro dando un trago de café.

- ¿Que? ¿Que piensas hacer?. - murmura Sharon mirandome.

- Nada, le pedí a Candice que todo lo que viniera de el o de Argentina que no fuera de Manon, Valentina o Lea, no me interesa y lo puso como en un lugar donde nunca los podré ver. - murmuro.

- ¿De verdad no quieres saber nada de él?. - me pregunta Sharon.

- Sharon, el me dijo que no me quería ver nunca más, me había dicho que había superado a Isabella y no lo a hecho y le dio igual lo que Antonio me hizo pasar. - murmuro tomando un trozo de panqueque.

- Tienes razón. - murmura Sharon tomando de su café.

Cambiamos de tema y seguimos platicando. Ya que como todas mejores amigas nos encanta platicar, y lo podemos hacer horas de horas. Mientras Sharon lavaba los trastos yo estaba de pie a la par suya y de repente siento un asco que me hace salir corriendo al baño y vomitar, Sharon corre detrás mío y llego al inodoro abro la tapa y me arrodilló para vomitar, Sharon toma mi cabello y se queda a mi lado ese momento. Cuando termino de vomitar hago un enjuague.

- ¿No quieres ir al hospital?. - me murmura preocupada.

Negó con mi cabeza y me apoyo en el lavabo, pasan unos minutos y decido ducharme. Sharon sale del baño y dice:

- Voy a estar en mirando televisión, me dices cualquier cosa.

Asiento con mi cabeza, me quito mi pijama y entró a la ducha siento como el agua tibia cae sobre mi y hace que me relaje un poco, lavo mi cabello y luego pasó el gel de baño por mi cuerpo. Al finalizar mi ducha decido secarme con una toalla y colocó otra toalla en mi cabeza me pongo unas sandalias, y camino hacia mi habitación la cual está a la par del baño, cierro la puerta tras de mi y me pongo mi ropa interior. Decido ponerme unos jeans azules con los cuales luchó por al menos cinco minutos, mis zapatos blancos y bajos de encaje, una blusa del mismo color, y un suéter azul marino. Cepillo mi cabello, y no pongo maquillaje en mi rostro. Salgo de mi habitación y me siento a la par de Sharon en el sofá, la cual apenas nota que estoy a su lado me abraza y pone mi cabeza sobre su pecho.
Cosa que hace que bajen un par de lágrimas por mis mejillas.

A mi Querido Profesor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora