A mi Querido Profesor.

Capitulo Treinta y cuatro.

- ¡Jayden, detente, me lastimas!. - murmuro mientras me detengo y suelto su mano de mi muñeca.

- Perdoname, estoy cabreado por lo que ha pasado - dice mientras me mira a los ojos. - ¿Te he lastimado mucho?. -murmura tomando mi rostro con sus dos manos grandes.

Niego con mi cabeza. - Necesito irme. - murmuro soltando sus manos de mi cara.
Me mira de una manera extraña y dudosa.

- Adiós Jared. - murmuro alejandome de él dando pequeños pasos.

- Esto no es un adiós preciosa, sólo es un hasta luego. - murmura mientras me da un guiño.

¿Porque hace estas cosas? Jayden se ve tan guapo cuándo guiña su ojo, incluso causa que un escalofrío pase por tu cuerpo.
Dejo mis pensamientos de gusto hacia Jayden y pienso en que esto es un "Adiós", no un "Hasta luego".

Le doy una sonrisa dulce, pongo mis manos en los bolsillos de mi abrigo y comienzo a caminar por la acera sin destinó, mi único destino es alejarme de Jayden y enfocarme en mi bebé.

***

- Te lo juro que podría cortarte la cabeza en estos momentos. - murmuro a través del teléfono.

- No pensaba que te importaba. -murmura Mike en un tono arrepentido.

Ruedo mis ojos como si él pudiera verme.

- ¿Jane?, ¿Sigues ahí?. - murmura Mike.

- Sí, bueno ya sabes nunca en tu vida le des mi número de celular a alguien sin mi consentimiento. - digo en un tono mandon.

- Si mamá. - dice Mike bromeando por el tono que he usado.

-Estúpido. -murmuro riendo y finalizando la llamada.

***

Lunes por la mañana.

Entro en mi oficina y reviso por última vez la revista para asegurarme de que este perfecta.

- ¡Buenos días!. - murmura Kaethennis entrando en mi oficina.

- ¡Buenos días!. - digo mirándola con una sonrisa.

- Te tengo una no tan buena noticia. - murmura haciendo una mueca de disgusto. La cuál me causa gracia y no evitó hecharme una risa.

- Tenemos que hacer casting para modelos. - murmura Kaethennis.

- ¿Porque?. - murmuro extrañada. Hay muchas modelos me extraña que tengamos que conseguir más.

- Ya que nos estamos enfocando en mujeres comunes necesitamos mujeres comunes no modelos. - murmura mientras revisa una carpeta que trae en sus manos.

- Ya veo. - murmuro frunciendo mis labios.

- Empezamos el jueves. - murmura haciendo otra mueca de disgusto.

- De acuerdo. - murmuro rodando mis ojos y sosteniendo mi cabeza con mis manos.

- ¿Nos vemos en el almuerzo?. - murmura mientras sale de mi oficina.

- Si. - digo con un tono de voz alto y sonriendo.

Almuerzo.

Nos dirigimos Jennifer, Kaethennis y yo hacia un restaurante de comida italiana. Cuando llegamos al restaurante nos ubica una amable joven de cabello cobrizo con unos rizos muy bonitos, y ojos color verde pálido.

- Mesa para tres. - murmura con una sonrisa y extiende tres menús sobre la mesa.

Nos sentamos en la mesa y comenzamos a mirar el menú. Kaethennis y Jennifer piden una pizza pequeña de seis trozos y yo decido una pasta a la boloñesa ya que por mi dieta no puedo consumir chatarra.