Edward
Era casi media noche y yo me encontraba oculto en la sombras, observando como Payne terminaba de concretar sus negocios sucios. Él les entregaba un par de paquetes y ellos le daban su paga luego de corroborar la calidad del producto.
Hoy supuestamente tenía la noche libre porque Carol saldría con Liam a un club nocturno, así que no tendría que vigilarla porque el equipo de logística estaría al tanto de todos sus movimientos. Pero me encomendaron seguir a Liam para que identificase a quiénes les proveía droga, tomase fotos y entrara al club. Todo iba perfectamente hasta que me dijeron que debía entrar para verificar si específicamente en ese sitio había alguna especie de subsuelo dónde se realizan actos ilícitos, como suele pasar en muchos de estos clubes.
Liam caminó una cuadra más hasta llegar al lugar donde se encontraría con Caroline. Desde la vereda de enfrente lo vi caminar a lo largo de la fila como si estuviese buscando a alguien, quien supongo debe ser la agente Carter. Se detuvo, y tomó la mano de mi antigua amada para sacarla de la fila. Seguidamente Liam la rodeópor la cintura con sus asquerosos tentáculos y estampó sus labios sobre la mejilla de Carol durante varios segundos, cual viejo baboso.
Ella vestía un despampanante vestido azul ajustado que se extendía hasta la mitad del muslo resaltando todas sus curvas.
Fueron caminando juntos hasta la entrada y el patovica, al ver a Liam lo saludó amablemente y los dejó entrar.
Por lo que me había dicho mi jefe, Caroline debía seducir a Liam para que él le entregase su confianza y descubrir todos los delitos que cometió, además de distraerlo y así poder atraparlo más fácilmente. En conclusión, están usando a la pobre castaña de carnada. Imagino como debe sentirse el tener a ese baboso revoloteándole y no poder hacer nada. Pero eso no es lo peor de todo, ha de sentirse la peor persona del mundo por tener que coquetear mientras tiene novio.
Si tan solo pudiese ayudarla. Pero con el solo hecho de haberme marchado de Langley, ya la estoy ayudando a permanecer con vida.
Pensé en mostrar mi placa del FBI para entrar sin hacer fila, pero ello podría levantar sospechas si es que aquí hacen algo fuera de la ley. Recordé que Adam trabaja aquí como barman. Lo llamé por teléfono y le pedí que le dijera al guardia de la puerta que me dejara entrar sin hacer la cola.
Adam me invitó a pasar con una enorme sonrisa en su rostro llena de felicidad y paz. No entiendo cómo puede estar tan pacífico todo el tiempo, y a su vez, él no entiende por qué la mayoría del tiempo mi rostro se mantiene serio.
- ¿Por qué no me dijiste que vendrías? - me palmeó la espalda amistosamente mientras yo me dedicaba a inspeccionar el lugar en busca de Liam y Carol.
- Porque no iba a venir. Estoy aquí por trabajo - me limité a decir.
- Oh, ya entiendo. Es una misión súper secreta - dijo a mi oído para que nadie lo pudiese oír.
- Exacto. Así que vuelve a la barra y actúa natural. Pero antes de eso, dime ¿Has visto algo raro por aquí?
- La verdad es que no me muevo más allá de la barra, por lo que no tengo idea de lo que pasa en el resto del club - me dijo y luego se despidió para volver a su puesto.
Seguí buscándolos entre la multitud, hasta que los vi sentados en la barra. Resolví quedarme observándolos desde lejos, con cierto disgusto. No me gustaba que ese idiota la tocara, ni que le hablase al oído ni que le sonriera, y si la iba a besar que mejor fuese fuera de mi campo de visión.
Caroline
- ¿Qué quieres beber? - me preguntó Liam cuando llegamos a la barra.
- Lo que tú quieras. Me da igual - grité para que pudiera oírme a través de la música ensordecedora.
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Verdades Peligrosas(Zayn, Edward Styles y tu)
FanfictionSecuela de Cadena de Mentiras. Un año después de la muerte de Edward, todo parece ir perfectamente en la vida de Caroline. Se había convertido en agente de la CIA, tal y como lo había deseado. Había hecho nuevos amigos y Zayn, por quién tanto había...