Verdades Peligrosas(Zayn, Edward Styles y tu)

7. Celos

Zayn

Desde mi banco escuchaba al profesor atentamente y tomaba apuntes de lo más importante. Abogacía me gustaba muchísimo, pero tantas horas escuchando a alguien hablar entorno al mismo tema me dejaba exhausto. Por suerte, ya casi terminaba la clase.

Los últimos minutos se hicieron interminables. Cuando por fin el profesor dejó de hablar y se despidió pude dar un suspiro de alivio. Guardé mis pertenencias dentro de la mochila azul que Carol me había regalado para mi cumpleaños. Recordar aquél día me sacó una sonrisa melancólica. Caroline estuvo toda la semana previa al día de mi cumpleaños hablando del misterioso regalo que me había comprado. Mi antigua mochila se había roto, así que fue el regalo perfecto.

Al salir, divisé a Emily hablando con un chico que se encontraba sentado sobre una motocicleta. Emily, al verme, me hizo una seña con la mano indicando que me acercara a ellos.

- Hola Em - oculté mis manos en los bolsillos del jean desgastado que traía puesto.

- Zayn, quiero presentarte a Josh, mi novio - dijo ella.

El rubio colocó su brazo en la cintura de mi amiga, con el objetivo de dejarme en claro que la chica era de su propiedad. Con el semblante serio, me extendió la mano en forma de saludo, y yo la acepté amablemente.

- Es algo serio al principio. No te asustes - bromeó Emily.

- Si está contigo ha de ser una buena persona. No tengo nada que temer - dije.

Él la acercó más a su cuerpo y le dijo que era hora de que se fueran. Al parecer es muy celoso. Pobre Emily.

Luego de que partieran, Hazza y yo nos dirigimos a buscar a Alison a la facultad. Ni bien la recogimos, fuimos directo a la casa de Harry.

A veces me sentía un poco incómodo con los tórtolos. Me parecía que sobraba allí. Eran novios y obviamente iban a querer estar a solas. Aunque les dije a ambos en varias oportunidades sobre mi incomodidad negaron mis sospechas. Dijeron que no tenía que sentirme así, que a ellos les encantaba pasar tiempo conmigo al mismo tiempo que estaban juntos. A pesar de todo, sigo sintiendo que tres son multitud.

- Iré por algo de beber, enseguida vuelvo - dijo Ali levantándose el sofá y dejando un espacio vacío entre mi amigo y yo.

En aquél corto lapso de tiempo en el que Ali fue a buscar algo de beber, vibró su celular desatando un descomunal conflicto.

En la pantalla del aparato apareció el nombre Colin, y Harry, como buen celoso que es tomó el celular de su novia.

- Harry no. Confía en ella - le dije antes de que abriera el mensaje.

- Nunca me habló de ningún Colin. Tengo que saber de qué se trata - oprimió el botón y vi como movía sus ojos de aquí para allá leyendo el misterioso mensaje.

- ¿Qué haces con mi teléfono? - Ali frunció el ceño.

- Y yo quisiera saber que mierda haces con el tal Colin ¿Me estás engañando? - se paró de su asiento muy enfadado, pidiendo por una justa explicación.

- No te estoy engañando con nadie - se defendió ella.

- Entonces explícame por qué te envió un mensaje diciendo: "Hola hermosa ¿Cómo estás? Quisiera que vayamos a tomar algo. Avísame cuando no esté tu novio así puedo llamarte y arreglamos bien" - Harry movía su pie de arriba hacia abajo, golpeando el piso con frustración.

- Me ha estado invitando a salir y siempre le digo que no. Es todo ¿A caso no confías en mí? - dijo indignada.

Debiste hacerme caso amigo.