Capitulo 3.

4.9K 238 5
                                    

Sky POV

Mierda, Kate me había convencido. ¿¡Ven lo que les digo!? Ella me incita a hacer todas esas cosas, es como un poder que tiene, no lo sé. Odio cuando hace eso, pero es tan típico de ella.

Hoy me tocaba Geografía en la primer hora. Cuando entré al salón divisé a Jake, un amigo mío. Me senté junto a él.

-Que tal Sky- Me sonrió. 

Jake Johnson es el típico chico popular, bad boy y que tiene a todas las chicas a sus pies. Bueno, menos a Kate y a mi, porque somos sus amigas. Debo admitir que es lindo, muy lindo, pero es sólo un amigo para mí. -¿Cómo va todo?-

-Bien, ¿y tú?-

-Mejor que nunca- Rió. Levanto sus pies y los puso arriba de la mesa. -Hoy hay una fiesta en casa de George, ¿Vienes con Kevs y conmigo? Avísale a Kit Kat- Así le decía Jake a mi amiga.

-Obvio que iré, ¿Que pregunta es esa?- Dije y reí.

El resto de las clases fueron demasiado aburridas, en cualquier momento me dormía. Sonó el timbre del almuerzo y fuimos al comedor junto con Jake y Kevin, nos sentamos y esperamos a que Kate llegara.

-Hey JJ, Kevs- Kate los saludó con el puño.

-Hola Kate- Respondió Jake. Mi amiga se sentó y nos pusimos a comer.

-Jake me comentó que hoy habrá fiesta en lo de George, ¿Vamos?- Le pregunté mientras tomaba un sorbo de jugo.

-Si, claro- Contestó indiferente y siguió comiendo.

(...)

En unos minutos sonaría el timbre de la última hora. Con Kate nos escondimos en el pasillo y vigilamos a la profesora Mitchells, vimos que salió del salón y se dirigió al baño. Ese sería nuestro momento perfecto, entramos al salón y cerramos la puerta con traba, Kate abrió su mochila, sacó el frasco y luego abrió el bolso de la profesora.

-¿Puedo hacerlo yo?- Le pregunté. Recordé la vez que me desaprobó y tenía ganas de hacerlo, muchas ganas.

-Claro- Sonrió y me entregó el frasco.

Lo abrí rápidamente y lo puse dentro del bolso. Cuando todas las cucarachas habían salido, saque el frasco y lo metimos en la mochila de Kate de nuevo. Nos empezamos a reír, pues que sorpresa se llevaría la señora Mitchells cuando quiera sacar sus libros.

Escuchamos que alguien trataba de abrir la puerta, era la mismísima profesora. Nos escondimos detrás de las mesas para que no nos viera, se fue de nuevo y aprovechamos para abrir una de las ventanas y escapar. Llegamos corriendo a la puerta trasera del comedor y entramos.

-Eso estuvo genial- Dijo Kate jadeando y luego se echó a reír.

-¿Crees que nos ha visto?- Dije riendo.

-Nah, no lo creo-

El timbre sonó y disimuladamente nos metimos entre la multitud de alumnos que se dirigían a sus clases.

-Ferguson Katelyn- Una voz grave sonó por todo el pasillo, nos dimos vuelta. El director Fitch nos atrapó. Mierda.

-¿Si, director Fitch?- Respondió ella con la cara más angelical y fingida del mundo.

-La profesora Mitchells dice que te ha visto hurgando en su bolso, ¿Es eso cierto?- Le preguntó con ambas manos juntadas detrás de su espalda.

-No, claro que no. Nunca haría eso- Se defendió Kate con una mano en el pecho.

-Pero te ha visto, Katelyn- Insistió él.

-Director, le esta diciendo que no ha hecho nada- Intervine. Lo que sea para salvar a Kate.

-¿Usted también estuvo involucrada, señorita Miller?- se dirigió a mi y yo me quedé helada, no quería que me atraparan.

-No, espere. Ella no ha hecho nada- Ahora me defendió Kate a mi. -Es todo mi culpa, lo siento- Dijo cabizbaja.

-Me tendrá que acompañar entonces, señorita Ferguson- Dijo el director y se encaminó a su oficina.

-Gracias igual, Sky- Me dio un pequeño abrazo. -Eres la mejor. Te veo en la tarde- Me dijo y siguió al hombre por los pasillos del instituto.

A mi mejor amiga no le importaba en lo más mínimo ir a detención, ella iba ahí con frecuencia. Pero a mí si, ella no entiende que siempre hay un límite y podrían llegar a expulsarla. Yo intentaba que eso no pase.

Me siento mal, yo tendría que estar en detención junto con ella, yo fui la que puso las cucarachas en el bolso, pero ella me salvó. Kate es genial, puede ser lo mas "rebelde" del mundo, pero es una gran persona.

Cuando finalizaron las clases me fui directo a mi casa. Mis padres se encontraban sentados en la mesa del comedor tomando un café. 

-Hola hija ¿Cómo te fue en la escuela?- Me preguntó mi madre.

-Bien, supongo- Contesté y me dirigí a las escaleras para subir al cuarto.

-Sky- Me llamó mi padre y me volví hacia ellos. -Cariño, siéntate- Les hice caso y me senté en frente de ellos dos.

-Sabes muy bien que estás en tu último año de secundaria y...- Los interrumpí.

-¿A qué viene todo esto?- Dije irritada.

-Hemos visto los libros que te dejamos arriba de la mesa en la basura- Dijo mi padre. Solté un bufido.

-Hija, es muy importante para nosotros que decidas que carrera estudiar...- Dijo mi madre.

-A que universidad ir- Finalizó él. -Queremos que tengas un futuro brillante-

-Queremos lo mejor para ti, linda- Mi mama me dedicó una de esas sonrisas maternas que tanto odio. -Por eso hemos escogido por ti algunas carreras en las que serías muy buena- Dijo y sacó unos papeles de su bolsillo.

-La carrera de medicina podría serte muy útil- Dijo mi papa. -Alguna carrera científica también.

-¿Veterinaria? Podría ser- Acotó mi madre. Mi papa asintió. -O puedes introducirte en la política, ¿Que dices Paul?-

-Claro, tal vez puedas llegar a ser la futura presidenta- Dijo haciendo un gesto con la mano.

-¿Y qué tal si dejan de joderme la vida y me dejan elegir a MI lo que quiera estudiar? ¡Escúchenme de una maldita vez, por Dios! No tengo ni puta idea de que hacer con mi vida, todo es un caos y ustedes me siguen presionando con la maldita carrera? Basta, yo decidiré por MI CUENTA mas adelante- Les grité. Estaba furiosa, demasiado. Odiaba que mis padres fueran así. Siempre manejando mi vida, decidiendo por mi, ademas eran muy sobre-protectores, resultaban... irritantes.

Mis padres se quedaron atónitos. Subí a mi cuarto y me encerré a escuchar música.




Bad GirlsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora