Trigésimo Capítulo

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Un pacto


Las luces eran irremediablemente feroces, el estudio estaba rodeado de personas moviéndose de un lado a otro, sus pupilas verdes buscaron a su compañera quien pronto se presentó a su lado y le dedicó una sonrisa que no logró tranquilizarlo en absoluto.

Emma se sentó en su lugar correspondiente y luego se tomaron de las manos, la entrevistadora llegó a su sillón de color lima y los examinó con sospecha, notando con algo de sorpresa el agarre que mantenían porqué él se negó a soltarse. Realmente aquella situación estaba consumiendo su cuerpo, volviéndolo una criatura ansiosa.

—Salimos al aire en treinta segundos—musitó alguien de la producción y la habitación se hundió en un redundante silencio, un asistente paso a Emma y a la mujer que tenía enfrente los micrófonos, Harry no pudo evitar buscar como un animal cautivo las salidas de emergencias.

Escucho el murmullo de la presentación que tenía que dar Nicole Velo, la conductora del programa de radio y televisión que les había invitado después del éxito que estaba surgiendo a partir de la publicación de su novela.

El hombre se limitaba a asentir y a sonreír mientras escuchaba las primeras preguntas, su amiga respondiéndolas con facilidad mientras Nicole lo miraba a él inquisitivamente.

—Harry ¿podrías hablarnos de Lágrimas de Conejo? Brevemente aunque sea — se dirigió finalmente hacia él y él asintió débilmente.

—La historia comienza con el hijo de una mujer conocida en un rincón del mundo como la anciana de los gatos, el hijo de esta mujer se dedica a hacer sombreros y viven en una casa humilde donde la mujer pasa la mayoría de su tiempo enferma, su hijo se enamora de un muchacho quién es hijo de un relojero que intenta forzar a su hijo mayor a un matrimonio de conveniencia, orillando a que de una u otra manera el par se conozca.

Después de que la anciana de los gatos muere, su hijo interrumpe la boda del otro muchacho y juntos huyen. Durante su escape, pasan noches de frío y hambre en un bosque donde de pronto comienza a aparecer este conejo blanco, el cual el hijo del relojero se niega a cazar a pesar del hambre.

Cuando transcurren semanas y ambos se mantienen escondidos en el invierno, el joven de los sombreros caza al animal cuando vuelve a aparecer por la noche y además de proveerles comida, le hace una especie de guantes a su compañero.

— ¿Esa es la relación con titulo de la historia entonces? — cuestiona la mujer y Emma balancea un poco su cabeza de un lado a otro, tentativamente no, pero a la vez sí.

—Después de sobrevivir la noche más fría juntos, el menor de los jóvenes se levanta gritando lastimosamente y atrae a un cazador, el joven de los sombreros no sabe que le ha sucedido a su pareja pero parece haberse vuelto loco porque jura ver animales muertos a su alrededor, conejos llorando. El cazador se lleva al hijo del relojero y cuando el joven de los sombreros lo encuentra se suicida a su lado. Ese es el origen del título — explica Emma, tratando de ser clara mientras mantiene su mano sosteniendo la de Harry.

— ¿Es una historia realmente trágica entonces? — inquiere la entrevistadora y Harry niega de inmediato, lo que acaban de contarle es solo el inicio de su primera obra que a tan solo semanas de su publicación ha comenzado a tener una gran respuesta.

—Eso es solamente el inicio de la historia— responde el hombre y ambos, él y Emma suspiran con unas sonrisas.

—Va a cumplirse un mes de su publicación chicos, díganme ¿no fue difícil escribir un trabajo así juntos?

Las rosas llevan vendas➳Donde viven las historias. Descúbrelo ahora