Últimamente mi madre amenazaba con irnos lejos. Alguna otra ciudad, pero no estaba segura. Ya me iba a inscribir en la universidad aquí, y por lo pronto la idea de ir a un lugar nuevo... Se hacía algo molesto.
No veía a Arlo hace semanas. Todas las noches me fijaba por la ventana e incluso me escabullia en la mansión a veces, pero nunca lo encontré después de esa noche.
- Loella, me ofrecieron trabajo... Y bueno, sabes consiste en irnos lejos.
- Loella, deberíamos irnos será una nueva vida.
- Loella deberías considerarlo...
Mierda cuanto odiaba esa sensación, de saber que no estoy viendo a Arlo pese que el está aquí, y peor el irme y no volverlo a ver.
En algún momento nos van a terminar separando.
Es cierto, cada vez que lo pienso se hace imposible verlo de nuevo. Es como si las cosas fueran mejor estando lejos, pero ¿Será qué el piensa en esto?
Va a ser difícil si es así. Un año sin verlo, pero ya se supone que no debíamos hablar... Pero y si... ¿Es toda una vida?
- ¿Tu qué quieres Loella?
- No quiero irme.
- Es por ese muchacho verdad.
- No.
Era obvio que si.
- Entonces igual si voy por esos 3 meses y decido quedarme si o si te vendrías conmigo.
No entiendo para que me preguntan, si a la final mi opinión nunca contó. Y esta vez tampoco sería diferente. Típicos padres.
Se sentía como Romeo y Julieta, pero mi Romeo no venía a rescatarme esta vez... Pero bueno. Debía dejar de soñar, de imaginar mundos a su lado como alguna vez lo hice.
Algo había que me hacía cambiar mucho de parecer. Pero no quería irme de aquí.
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Cartas a mi soledad [Terminado] #Wattys2016
Novela Juvenil¿Qué es peor? Un psicópata a tu lado... O amarlo intensamente. "No necesitas mezclar la tristeza y el amor, cuando un hombre tiene un poco de ambas." Porque... Incluso darlo todo puede ser peligroso.