La Criminal.

Capítulo 63.

—Creo que a este punto, la práctica hace al maestro. -Respondo al darme la media vuelta y apreciar su rostro coqueto viéndome-

—En serio que me has dado mucho trabajo dulzura.

—Solo soy criminal para dártelo. -Le guiño un ojo- Me has cachado.

—¿Cómo sigues? -Comienza a dar pasos hacia mi, toma de mis muñecas y las revisa delicadamente, la luz no es la adecuada para inspeccionar bien-

—Bien. -Respondo con un hilo en la voz-

—Te eché mucho de menos. -Dice al alzar su mirada hacia mi aún tomando de mis manos, escapé una sonrisa, realmente me alegra que ya se le haya pasado el enojo de Jake en el estacionamiento- Sigues pensando en Zayn, ¿Cierto? -Pregunto sin temor alguno, definitivamente no estaba lista para oír su nombre desde su boca, estoy tan dolida por él que en realidad está bloqueado de mi mente ahora-

—Es un tema del que no quiero hablar. -Me alzo en hombros-

—Espero el momento en poder encontrármelo dulzura. -Dice disgustado-

—No quiero que le hagas nada. -Defiendo-

—Ya te había dicho que no estaba a discusión. -Dijo serio, dándome a entender que lo dice de verdad-

—Si me entero que le haces algo.. -Me interrumpe-

—¿Qué harás? -Pregunta al alzar una ceja mientras posa sus manos en mi cintura lentamente- ¿Me harás algo? -Me acercó bruscamente a él, sintiendo su pecho chocar contra el mío. No le puedo ganar a Harry, dijera lo que dijera, él siempre estaría un paso adelante-

—Deja de hacer eso.

—¿Hacer qué? -Preguntó coqueto, va subiendo sus manos delicadamente por mi espalda-

—Eso. -Poso mis manos en su pecho queriéndolo alejar, pero es inútil intentarlo-

—¿Hoy no quieres? -Pregunta sorprendido, su respiración comienza a acelerarse con una sonrisa traviesa que porta, joder ya me calenté, estamos a mitad de calle. Sería una mala idea quedarnos ahí dónde cualquier persona me podría ver o reconocer-

—Entremos a mi casa. -Pido en un susurro, él se estremeció, tensó su cuerpo, sabiendo que acabaría mejor de lo que esperaba-

—Entremos dulzura. -Responde en un susurro-

Harry viene siguiendo mis pasos, hasta que entramos. Debo admitir que ha sido un día muy pesado para mi, tanto como para Harry. Me paso a la cocina rápido para lavar mis manos.

—¿Gustas un vaso de agua? -Le pregunto al tomar dos vasos de vidrio- Porque yo muero de sed.. -Soy interrumpida cuando me toma de espaldas para darme la media vuelta bruscamente, se acerca a mis labios a besarlos exquisitamente, se lo devuelvo de inmediato, está muy acelerado, tanto que se deshizo de mi blusa en segundos-

—Harry, Harry... -Le digo al separarme- Nos pueden ver. -Digo al señalar mis ventanas- Cualquier puede ver desde afuera si tengo las luces encendidas. -Sin decirme algo, se acerca con rapidez al apagador y apaga las luces dejándonos a completa obscuridad, entre sombras distingo que él se quita su camisa de oficial, joder que está caliente, y a quien engaño si yo también- Ya vuelve a mi joder. -Digo molesta al querer sus labios de nuevo, él suelta una pequeña risa y se acerca a mis labios de nuevo, desabrocha mi pantalón con brusquedad, me los baja por completo y yo me encargo de quitarlos de mis pies, me alza a la barra, yo bajo mis manos a su cierre, quito su cinturón con agilidad, joder estar a obscuras es más difícil de lo que imaginé. Me quita mi sostén con un poco de lentitud al momento de querer desabrocharlo pero finalmente lo logra, baja a besar y morder mis senos- Sí. -Digo excitada al dejar mi cabeza caer para atrás mientras él está concentrado en mis senos, baja una de sus manos a mi clítoris a jugar con él, gimo fuerte, rápidamente sube a mis labios-