La Criminal.

Capítulo 91. Gran error.

Respirando hondo y analizando todo el problema siempre me ayuda a calmarme. Hasta que frenó bruscamente, poniendo su brazo frente a mi para que no me pegara al frente, comenzó a orillarse.
Pasaron unos segundos mortales, cuando él decidió hablar al ya estar apagado el carro.

—Esto puede acabar bien si cooperas, dulzura.

—Tienes prohibido decirme así. -Dije tajante, el enojo hierve por mis venas-

—Iniciamos con el pie izquierdo esta noche, cariño.

—Desde que te conocí, todo ha sido con el pie izquierdo Harry.

—Necesito que me ayudes.

—Déjame en paz, Harry. -Pedí con fuerza, volteé a verlo con enojo y tristeza, su rostro tan endurecido se fue desvaneciendo-

—No me hagas esto. -Dice al recargar su cabeza en el asiento viendo al techo- Por favor no.

—¿Por qué no simplemente manejas hasta la estación como lo estabas haciendo?

—Porque no puedo. -Esa fue su única respuesta, noto lo frustrado que está, él también está en una situación completamente difícil. Pegó fuertemente en el volante haciendo que sobresaltara- ¡Porque no puedo! ¡Entiende que no puedo arrestarte!

—¡Claro que puedes! -Dije al alzar la voz por igual- ¡Solamente que no quieres hacerlo! -Él respira hondo, varias veces-

—De este caso están encargados oficiales que no tienen ningún vínculo con ustedes, y todo saldrá peor. -Me explica- Entiende que te estoy dando una salida.

Permanecí callada unos segundos. Sigo tan molesta como para verlo de su punto de vista, pero tengo que hacerlo, tal vez el oficial tiene razón.

—Te escucho.

—Tienes la opción de ir nuevamente a España a buscar esos maletines con tu equipo, entregármelos, y no habrá cargos hacia ustedes, de eso me voy a encargar yo, porque ahorita los están buscando, y ya los tienen en la mira. -Calló unos segundos- O tienes la opción de robarlos, y que todo tu equipo sea arrestado y llevado a prisión. -Mierda. Mierda. Mierda. Estoy sin salida alguna, por más que supiéramos como escondernos y robarlos, en algún momento se encontrarían- Ambos sabemos que respuesta quieres. -Dijo al poner su celular frente a mi- Y será mejor que avises a alguno de tus amigos.

No quieres estar en prisión _______, nadie lo quiere, estoy pensándolo unos segundos que para mi fueron horas eternas.

—99.. -Comencé a dictar el número, tengo las esposas, es imposible moverte, así que Harry va marcando al número, para después poner alta voz. Solo deseo que no sea una mala decisión la que estoy tomando-

—¿Hola? -Se escuchó a través de la línea después de varios segundos-

—Escucha Liam. -Digo firme y fuerte- Tenemos que regresar a Madrid. -Él confundido, tardó en responder-

—¿________? -Fue lo primero que preguntó-

—Sí, soy yo.

—¿De qué número me estás marcando? -Preguntó aún más confundido-

—Eso no importa, necesitamos regresar, no es opción.

—A ver. -Dice un poco sacado de foco- Explícame por qué.

—Los portafolios traían dinero y dinero que no es de nuestro país, dinero perteneciente a Estambul, y por ende habría más problemas internacionales, incluyendo artefactos para construir una bomba. Los oficiales ya nos tienen en la mira, y el oficial Harry fue a mi casa a decirme que si encontramos los maletines y se los entregamos, no nos arrestarán y no habrá ni un solo cargo. Si no cooperamos, todo acabará mal. -Solté todo, mientras que hay un silencio del otro lado de la línea-