Comienzo a empacar una muda de ropa, pijama y accesorios de limpieza en cuanto regresé a la casa, estoy como un sapo hinchado de tanto que lloré en el camino. Estoy tan alterada que no sé si he guardado las cosas correctas. Sonó mi celular, es Zayn por cuarta vez, no se me cruzó por la mente contestar. Trato de relajarme respirando hondo y dejando salir aire por la boca. Vamos Ember, sabías que esto te iba a pasar, respira hondo.
Dieron las 12:01 a.m y ya están tocando la puerta, sé lo puntual que es Harry. Al abrir, él está de espaldas viendo su carro, puedo apreciar que está de pantalón negro, botas café, camisa negra y saco negro. Se volteó al oír la puerta abrirse. Me ve hecha un desastre, con los ojos tan hinchaos aun con lágrimas.
—Dulzura. -Dice con preocupación- Hey. -Trata de acercarse pero retrocedo-
—¿A dónde quieres llevarme? -Pregunto seca, él me ve petrificado-
—¿Estás bien?
—¿A dónde iremos? -Lo ignoré, quiero acabar con esto pronto-
—Será un secreto. -Trata de subirme el ánimo con su respuesta- ¿Lista? -Asiento sin ganas-
Salimos ambos de la casa en su deportivo rojo, vamos callados en el largo camino.
—Sabes que le daré lo que se merece Zayn Malik, ¿Verdad?
—Hoy no, Harry. -Dije desgastada- Hoy no. -Respondo al ver por la ventana-
—Es un hijo de puta. -Maldice molesto-
—Es lo que querías ¿No? -Lo volteo a ver de mala gana- Pues ahí lo tienes. -Me volteo de nuevo a la ventana-
—No. -Niega firmemente- Eso no es ser un hombre, yo quería que lo terminaras porque tú querías, lo que hizo tendrá consecuencia dulzura.
—No quiero que hagas nada, Harry.
—No está a discusión.
Continúo viendo por la ventana, en realidad aún no tengo sueño. Este trabajo de ser criminal, me ha ayudado a acostumbrarme que mis horas de sueño fueran muy pocas. Y realmente estoy destrozada, tenga o no sueño, no puedo parar de pensar en Zayn.
Fue bastante tiempo de camino, y ha sido más agradable de lo que creí, una agradable platica con Harry en todo el camino me hizo olvidar por un segundo en Zayn.
Al llegar visualizo una laguna, Harry bajó primero para abrirme la puerta del carro y darme la mano al salir, bajamos las maletas del carro.
—¿Por qué me trajiste aquí? -Pregunto confundida- A las 2:00 a.m.
—Hoy es un día especial dulzura.
Caminamos poco hasta llegar a una casa rústica, preciosa, supongo que es de Harry debido a que abrió con unas llaves que traía en su bolsillo del pantalón.
Al entrar el olor a madera invadió mis pulmones, el olor a naturaleza está por todos lados. Harry encendió las luces dejándome apreciar más la casa, subió las escaleras a dejar las maletas mientras yo permanecí abajo.
Observo fotografías en las paredes, claro que la casa es de Harry, muchas fotos de él con amigos en diferentes situaciones.
—Si sabes que esto es un secuestro, ¿Verdad?
—No me hagas reír. -Dice- ¿Te gustó la casa?
—Es preciosa, Harry. -Lo volteé a ver- Bueno, ¿Y ahora qué? ¿Qué sigue en tu plan de secuestro?
—Únicamente quería traerte. -Dice sereno- Mereces relajarte y despejarte.
—Pues no lograré despejarme contigo jamás, eres un puto policía.
—Entonces pongámonos a hablar de negocios. -Toma asiento en su comedor- Adelante. -Señala una silla-
Poco convencida tomé asiento.
—No hay negocios por hablar. ¿A que me has traído?
—Hagamos un trato. -Dice al sacar una libreta con un bolígrafo- Si me dices cosas útiles para volver a atrapar a tu jefe que es la cabeza de todos, te dejaré de molestar.
Reí fuerte.
—No sucederá.
—¿En serio soportarás que esté sobre ti más días? Porque puedo ser más insoportable.
—No me importaría, no soy una soplona.
Bufa un poco disgustado, después se pone de pie.
—¿Gustas una copa de vino? -Pregunta al ir sacando las copas de un estante-
—No gracias.
No le importó y puso la copa frente a mi, volvió a tomar asiento en la misma mesa.
—¿Qué sabes de Zayn? -Me atreví a preguntar- Quiero saber todo lo que me oculta.
—No hablaremos de él. -Dice firme- Creí que querías olvidarlo.
—Pues eso no se hace de la noche a la mañana.
—Lo sé. -Dice- Lamento por lo que estás pasando.
—Déjate de payasadas. -Dije ruda- No lo lamentas.
—Lo hago. -Dice sincero al tomar de su copa- Pero no me creerás de todos modos.
Callamos unos momentos.
—Bueno, ¿Y hay algo que podamos hacer? -Pregunté- Me aburriré. ¿Algún juego de mesa?
—¿Juego de mesa? -Arquea una ceja y se pone de pie, camina a otra habitación, y regresa con varias cajas y las pone sobre la mesa- Estás de suerte que no me puedo resistir a jugar un juego de mesa.
—Veamos. -Dije al mirarlos- Scrabble, Ajedrez, cartas, monopoly, jenga.. Juguemos Scrabble. -Lo tomé-
—Es mi favorito. -Dice al quitar las demás cajas-
Debo admitir que Harry no es tan detestable a ratos, cuando no le entra ese demonio posesivo y bipolar. Genuinamente parece otra persona, como si antes estuviera aparentando ser alguien más.
Es muy bueno, ganó la partida.
—Te dejé ganar.
—No, no lo hiciste. -Dijo- Soy invencible. ¿Otra partida?
—Son las 3:00 am. -Dije- Será mejor que duerma, porque asumo que mi secuestro aún continúa y no me llevarás a mi casa.
—Te enseñaré tu habitación.
Comienzo a seguirlo hasta una habitación de invitados, me ayuda a acomodar la cama.
—Gracias. -Le dije al estar los dos bajo el marco de la puerta- Ha sido agradable esto. -Admití- No eres tan malo.
Me miró diferente, como si hubiera dicho algo malo, se puso tenso, miró mis labios y subió su mirada de nuevo.
—Buenas noches.
Cierra la puerta de portazo. Okey, eso fue raro. Ha visto mis labios, por alguna razón los toqué como si desearan algo. Me acerqué a la puerta, ¿Ya se habrá ido? Podré abrir con la excusa de querer un vaso de agua, aunque en realidad solo quiero verlo. Creo que me siento caliente, y es figurativamente hablando. Me armé de valor. Abrí la puerta. Está ahí parado viéndome.
—También fue agradable estar contigo esta noche. -Dijo=
No sé si me voy a arrepentir de esto, pero por ahora estoy dolida y molesta por el maldito de Zayn, y el oficial Harry me está volviendo loca en estos instantes. No lo pensé dos veces y me acerqué a besarlo. Harry sin poder creerlo, quedó atónito ligeros segundos, se alejó.
Me miró con asombro y su respiración agitada. Mierda lo arruiné.
Volvió a mis labios apoderándose de mi cintura fuertemente haciéndome dejar salir un gemido. Tanto tiempo que el oficial había esperado para poder probar mis labios. Se apodera de ellos como un experto, besa exquisitamente, sus labios cálidos me vuelven loca. Comienza a desabrochar mi pantalón, siento un cosquilleo ahí abajo, mi piernas comienzan a temblar, empezó a deshacerse de mi suéter con brusquedad hasta lanzarlo, le quité su camisa dejándolo semi desnudo, sale un gemido de su boca.
—Te necesito. -Dijo con su voz gruesa y grave como siempre, agitada- Te necesito ahora. -Suplicó-
—No te detengas. -Susurro, parece que acabo de invocar al diablo mismo, o así lo sentí-
Harry aceleró más su respiración, lo tengo vuelto loco, sabe mis puntos débiles sin tan siquiera conocerme, metió sus manos cálidas a mi espalda debajo de mi blusa, arañé su espalda a ese tacto haciéndolo volver loco. Rápidamente me acorraló a la pared poniendo sus manos a cada costado mío, viéndome directo a los ojos.
—¿Estás segura que quieres continuar con esto, dulzura? -Pregunta con la respiración agitada-
—Quiero que sigas. -Imploro-
No sé qué esperar ahora, no sé si es una mala idea lo que está pasando. Al oír mis palabras, me cargó haciendo que rodeara con mis piernas a su cintura, me pegó contra la pared, comenzando a besar mi cuello, ligeros gemidos de placer salen de mi boca. Comenzó a caminar mientras me carga, dejó caer mi cuerpo sobre la cama. Con cierta desesperación logró quitarme la blusa, lanzándola para algún lado del cuarto, comenzó a darme besos desde arriba del botón del pantalón, hasta subir a mi cuello. Cada beso que da, lo deja plasmado en mi piel.
—¿Esto es lo que quieres? -Pregunté provocativamente-
—Eso lo que más he deseado, cariño.
Logró desabrochar mi sostén, acelerando las cosas aún más. Sin más, me quitó la única prenda que quedaba de la parte de arriba, lanzó mi sostén a un lado de la cama dejando oír el ruido al caer.
—Dulzura. -Dejó salir un jadeo de su boca- Eres perfecta.
Bajó sus labios para poder besar mis senos, me vuelve loca el sentirlo. Bajó el cierre de mi pantalón para empezar a bajarlo, logró hacerlo lentamente. Volvió a mis labios, yo quise desabrochar su pantalón, cuando rápidamente tensó su cuerpo y se separó de mis labios, yo fruncí el ceño.
—Vamos a jugar a mi manera dulzura. -Me dice al oído, ¿Cómo? Lo veo sacar de su pantalón unas esposas, wow, wow, ¿Qué estaba pasando ahora?- Confía en mi. -Dijo al notar mi rostro-
Me colocó las esposas estando hasta arriba de la cama, poniendo en medio un barrote de madera de la cabecera. No tengo cómo moverme, ¿Debería tener miedo? Harry se paró de la cama quitándose el pantalón y su última prenda debajo de él. Oh mierda, es muy grande.
Volvió a mi, con sus grandes y cálidas manos, bajó hasta mis bragas, rudamente las quitó dejándolas caer fuera de su alcance, comenzó a jugar con mi clítoris con sus dedos traviesos, comienzo a gemir fuerte, sus dedos entran y salen.
—¿Te gusta cómo me traes? ¿Te divierte? -Me pregunta entre gemidos al oído-
—Házmelo. -Supliqué- Házmelo Harry.
Volvió a tensar su cuerpo al oír esas palabras, se quitó de estar encima de mi y de un cajón sacó un condón, no tardó en ponérselo. Deseo a Harry de una manera sumamente grande en estos momentos. Nuestros cuerpo se necesitan. Se puso encima de mi nuevamente, siento como empieza a adentrarse en mi, como lentamente logra entrar, hasta que lo hizo de golpe, ¡Joder! Solté un buen gemido.
—Has sido una muy mala criminal, dulzura. -Dice agitadamente, comenzó a moverse lenta y muy fuertemente, gemidos constantes salen de mis labios, Harry sabe cómo moverse, entra tan fuerte que me tiemblan las piernas con las que le rodeo la cintura. Tiro de las esposas haciendo que la madera choque con la pared creando mucho ruido, haciendo que Harry se prenda aún más-
—Harry. -Digo placenteramente su nombre-
—¿Te gusta dulzura? -Se quitó y bruscamente le dio la vuelta a mi cuerpo, dejándome acostada boca abajo. Solo logro ver mis manos rojas debido al esfuerzo de las esposas. Se volvió a adentrar en mi, siento mucho más placer en esta posición, estoy en sus manos ahora, él es quien tiene el control absoluto, mientras yo solo estoy esposada a la cama, mientras me penetra, baja su mano a mi clítoris para jugar con él, joder que ha entrado mi punto débil, ¡Maldito! Comienzo a dejar salir gemidos más fuertes y provocativos, mis piernas literalmente tiemblan, a este paso acabaré de volada- ¡Mierda, dulzura! -Maldice- Como me encantas. -Sube la velocidad como loco, no puedo más, estoy tan excitada-
—¡Harry! -Imploro, esto me va a volver loca, al parecer me ha escuchado, se quita de inmediato y me gira boca arriba con su rostro de satisfacción, sin decirme palabra alguna se baja por mi abdomen besándolo hasta llegar a mi clítoris, comienza a besarlo y jugar con su lengua- Joder. -Me muevo como loca, pero él se apodera de mis caderas tomándolas fuertemente, me está haciendo el mejor sexo oral de mi vida maldita sea, duramos así unos momentos- Harry, me vengo. -Digo con mi voz temblando, palabras de satisfacción para él, sube de inmediato a mi cuello para besarlo, nuevamente mete su miembro en mi vagina para penetrarme, rápido y duro, gimo como loca, al parecer él también ya acabará por la forma en la que comienza a gemir-
Ambos sacamos el último gemido posible, nuestros cuerpos sudados y respirando hondo como si hubiéramos terminado de correr. Se quita de estar sobre mi y lo primero que hace es quitarme las esposas, joder mi cuerpo tiembla de verdad, me deja libre, él se quita el condón y nos recostamos en la cama. Harry obtuvo lo que siempre quiso; Tenerme.

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La Criminal.
FanfictionLa vida no se detiene por absolutamente nadie. Es algo que a _______ Miller le costó trabajo entender. No dependas de nadie, tú siempre podrás sola. La vida de ésta joven es algo distinta, ella y sus amigos tienen una vida completamente diferente en...