VLOGGERS vs. GAMERS c/Rubius, sTaXx & Vegetta777

CAPÍTULO 9: "Un día común en la vida de Rubius"

Rubén.

Abrí mis sensuales y bonitos ojos, la luz chocaba directamente a mi cara y en realidad no sabía donde cojones estaba.

¿Por qué siento un peso en mi abdomen?, Oh sí, es Lesly que ha puesto su pierna sobre mí... Un momento... ¿Qué hace Lesly desnuda y acostada conmigo?. 

¿Porqué eres tan idiota, Rubius?.

Vale, vale, ya recordé, al parecer anoche mi amiguito y yo estuvimos de fiesta.

Me incorporé con cuidado de no despertarla, no porque quería prepararle el desayuno o algo parecido, sino porque quería salir cagando hostias de allí.

Comencé a buscar mi ropa, estaba regada por toda la habitación, al igual que la de ella, también había latas de cervezas vacías, ahora recuerdo, estuvimos bebiendo y después nos acostamos.

Vaya nochecita, eh. 

Felizmente que hoy no hay clases, a excepción del grupo de teatro que va a ensayar para el musical de primavera y... OH JODER, ¡Me cago en todo!, tengo que cumplir con el puto castigo sino me lo extenderán una semana más. 

¿Qué hora es?, las 9 am, estoy retrasado media hora.

Me apresuré en colocarme todo en su lugar para después ir al pequeño baño que había en el cuarto del hotel y peinarme un poco, después compraría unas mentitas para este aliento que llevo.

Cogí el móvil y la billetera y me dirigí a la puerta.

—¿Rubius?, Rubén, cariño, ¿Vas a irte ya? —la somnolienta voz de Lesly, me detuvo.

—Umh... Si yo... Tengo cosas que hacer.

—Oh, pero yo pensaba que tal vez podíamos ir a desayunar o...

—Less — la interrumpí —, será mejor que hagamos como si no recordáramos nada de lo que pasó acá, ¿vale?, ahora debo irme.

Y sin dejarle opción a refutarme, salí de la habitación.

Segundos después oí un fuerte "Gilipollas", pero simplemente lo ignoré, yo no quería relaciones ni nada que me atase a alguien, solo fue una noche y ya.

Tomé un taxi y me dirigí al West, malditos castigos, debía verle la cara a la maestra Jones gran parte de la mañana, y ahora que recuerdo, no he grabado ni un vídeo, joder.

Llegué y pagué al conductor, corrí como nunca y entré de golpe al teatro.

—¡Ya estoy aquí! — grité e inmediatamente todas las miradas se posaron en mí, las del elenco, la de la maestra y la de Melanie.

—Tarde, Doblas —habló la sra. Jones.

—Lo sé, lo siento, tuve un pequeño inconveniente.

—No voy a pasarle otro retraso, esas escenografías no van a pintarse solas, ahora póngase a ello que ya ha perdido bastante tiempo.

Asentí con la cabeza y me fui a un lado del escenario a seguir con el árbol que estaba pintando la vez pasada. 

¿Qué acaso no pueden solo cantar y ya?, ¿Quién necesita escenografías?

La voz de Melanie llegó hasta mis oídos mientras estaba ensayando, cantaba muy bien, me podría quedar escuchándola todo el día, no entiendo por qué su voz es tan distinta al hablar, algo más irritante.

Le habían dado el papel principal, ¿Y cómo no?, debía admitir que la chica tiene talento, nunca como yo, pero lo tiene.

Seguí a lo mío, al menos ya iba por las raíces del árbol este de los cojones.