Lía.
Recibí a Ryan con una sonrisa un tanto forzada en el rostro, él me miró de pies a cabeza y me correspondió.
—Te ves increíble —dijo él.
¿Por qué siempre dicen lo mismo?, es decir, tu cita no puede decirte alguna vez: "Hace frío, mejor cúbrete" o "Recógete el cabello, pareces loca".
¡El mundo necesita más sinceridad!
—Gracias —expresé.
Hizo una sonrisa ladina y me tomó de la mano para llegar hasta su coche.
Una vez allí, abrió la puerta de copiloto, dejándome pasar, y él hizo lo mismo luego.
El camino fue silencioso, me sentía un poco incómoda, así que le pedí a Ryan que pusiese algo de música, pero cuando lo hizo, me arrepentí al escuchar la primera pista, era música empalagosamente romántica, no me mal entiendan, también suelo ponerme cursi, Pero ¡Oye!, estamos a punto de ir a un baile, no a una pedida de mano.
Él se la pasó tarareando, hasta que al fin, pude visualizar el West College, y por primera vez, agradecí haber llegado.
Ryan aparcó entre la multitud de coches, y me ayudó a bajar.
Salimos del estacionamiento y caminamos hacia la entrada del West, que estaba decorada e iluminada.
Caminamos hacia el gimnasio, donde se suponía que sería el baile, lo vimos por fuera y estoy segura que nadie que viniese por primera vez creería que en ese lugar se suda y se hace ejercicio.
Estaba precioso, con luces, globos y un gran arco hecho de un material extraño, que rodeaba la entrada.
Él tomó mi mano, nuevamente, y volvimos a andar.
—Foto para el anuario escolar —Oímos una voz chillona a nuestras espaldas, era una chica de baja estatura y con unas grandes gafas, nos miraba emocionada, y entonces nos dimos cuenta que estaba esperando sacarnos una toma.
—¿Anuario escolar? —Cuestioné.
—Sí, soy parte del periódico escolar del West, tomaremos fotos a todas las parejas, para luego, elegir una de ellas como los reyes del baile.
Arrugué levemente mi nariz al escuchar lo cursi que sonaba aquello, pero bueno, si a la chica le hacía ilusión podíamos intentarlo.
Ryan y yo asentimos y posamos para la cámara, la chica que se presentó como Carly, nos sacó una toma y después nos sonrió satisfecha.
Nosotros también sonreímos y seguimos a lo nuestro, entramos al gimnasio y las miradas no tardaron en posarse sobre nosotros.
Busqué a Mels o Abby, pero aún no había rastros de ellas, seguro ya vendrían.
Caminamos hacia algún punto desconocido, y en aquel momento pude fijarme en como todos se volvían a concentrar en la entrada, otra vez.
Me giré curiosa, y pude ver de quién se trataba: Frank, junto a la plástica de su novia, habían llegado.
Él sonrió, como si le agradase que todas las tías lo observen como si quisiesen follarle con la mirada.
Idiota.
La teñida, de la misma manera, tenía aires de superioridad y caminaba meneando las caderas.
Él comenzó a mirar a su alrededor, como buscando algo —o a alguien—, cuando coincidió conmigo, fijó su mirada en la mía, aunque me apenaba que se haya dado cuenta que estaba mirándole, no la desvié, la mantuve fija, dispuesta a no perder esa pequeña guerra.
ESTÁS LEYENDO
VLOGGERS vs. GAMERS c/Rubius, sTaXx & Vegetta777
FanficEllos: Los Youtubers gamers más reconocidos de España. Ellas: Las Youtubers vloggers más influentes del mismo país. Para ellos: No es simple traer juegos novedosos al canal o sacarse buenas partidas. Para ellas: Encontrar un tema distinto del...