"El amor es una amistad con momentos eróticos." Antonio Gala.
***
-Hola, me llamo Melissa y él es mi primo, Ángel.
La chica nos observa a los dos con una sonrisa y asiente para después tomar las maletas que tiene mi primo y ponerlas sobre una cama de matrimonio, que hay en la otra parte de la habitación.
-Esta es tu cama - señala —. Hay un baño cruzando esa puerta y este es tu escritorio.
Miro a Livia y asiento.
-Puedes irte, primo.
-¿Segura?
Asiento y él besa mi mejilla.
-Adiós, Livia — posa su mirada en la chica de pelo negro y hace un movimiento de cabeza a modo de despedida —. Encantado de conocerte.
-Igualmente.
Ángel cierra la puerta con cuidado y yo sonrío nerviosa a Livia, que se vuelve a sentar en su cama cubierta de sábanas turquesas.
-¿Eres española? - pregunta.
La miro y asiento mientras me dirijo a deshacer mis maletas.
-¿Y tú?
-De Italia.
Alzo las cejas sorprendida.
-¿También vienes de intercambio?
Me mira, sonríe y asiente.
Cuando acabo de poner todo en orden, hago la cama en la cual voy a dormir durante nueve meses y me siento un tanto incómoda ya que Livia se mantiene leyendo desde hace media hora.
-¿Nos preguntamos? -pregunta, cerrando su libro.
La miro extrañada.
-¿Eh?
Ella reprime una risa.
-Que si nos hacemos preguntas a cerca de la una y la otra.
-¿Pero no estabas leyendo?
-Sí, pero esperaba a que acabases para conocerte.
Asiento y tomo lugar en mi cama.
-Bueno... pregúntame.
Livia entrecierra sus pequeños ojos azules, causando así que destaquen sus largas pestañas negras y las gafas de pasta negra queden a la perfección con su rostro.
-¿Eres teñida o natural?
La miro desconcertada.
-Natural.
Asiente.
-Entonces me caes algo mejor -sonríe-. ¿Qué edad tienes?
-Dieciséis, ¿y tú?
-Diecisiete — contesta, rascando después su barbilla -. ¿Virgen?
-Creo que es pronto para revelar estos detalles -digo con asombro ante el atrevimiento de mi compañera de habitación -. ¿No crees?
Asiente.
-Es verdad. Lo siento -sonríe avergonzada -. Me suelo dejar llevar por los impulsos.
Cuando dice eso, recuerdo automáticamente a Sandra y la extraño en estos momentos. Desde que he llegado a Londres no he tenido tiempo de hablar con mis amigos en ningún momento.
-¿Hay WiFi aquí?
Livia asiente.
-Ten, la clave.
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Hugo, te quiero. [Parte 2]
RomanceCuando te rompen el corazón o la realidad te agolpa en el momento que estás en éxtasis, sufres; sientes el mundo derrumbarse y todo ponerse en contra tuya, creyéndote que al final es tu culpa. Melissa no está bien, y todo esto es a causa de la discu...