The Walking Dead [Rick Grimes]

24//Ella.

Entró a la habitación en completo silencio, vio a Judith durmiendo tranquilamente en la cuna. Acarició su rostro con cuidado de no despertarla, se dirigió hasta su pequeño hijo y lo cogió entre sus brazos, estaba despierto, sin embargo, no lloraba, era muy tranquilo.

—No quiero que crezcas—susurró—. No me hagas caso, mamá hoy esta un poco triste. Casi muero hoy y tu padre estaba abrazando a otra—soltó con sarcasmo, bufó al recordar esa escena—. Y no quiero llorar, eso me hace débil y yo antes de encontrar a tu hermana no lo era. Fui una mujer fría y la poca humanidad que tenia iba desapareciendo, luego encontré al grupo y pensé que tenia otra oportunidad para seguir viviendo. Necesitaba aferrarme a una persona para saber si alguien me quería de verdad, por casualidad volví a ver a Rick—rió con lagrimas en los ojos—. Solo estoy asustada, de que la pequeña familia se destruya por mi actitud. Amo con toda mi alma a tu padre, a tus hermanos y a ti, son todo para mí...

Carl la escuchaba tras la puerta, sintió pena por ella. Tocó un par de veces y esperó a que abriera. Lisbeth se sorprendió al verlo. Dejó que pasara y volvió a cerrar la puerta.

—Me entere lo que pasó hoy—murmuró Carl—siento no haber estado para ayudarte, estuve estudiando y no sabia nada hasta que me lo dijo Tara.

—Es una chismosa—dijo algo enfadada—. No te preocupe cielo, estoy bien—mintió.

—No lo estas, ademas de que tu cuello no pinta nada bien. ¿Has visto tu rostro? Te conozco...

Lisbeth dejó al bebé en la cuna y volvió a mirar a Carl, iba a llorar delante de él en cualquier momento. Le indicó que se sentara en la cama, el adolescente obedeció y esperó que ella hablara.

—Hoy mientras ese hombre me ahorcaba pensé en que mierda me estaba metiendo, iba a morir por una mujer que no conocía de nada. Cada vez que el aire en mis pulmones comenzaba a disminuir, vosotros me vinisteis a la mente. Judith, Chris, Rick y tú... Acabo de tener un bebé hace un par de semanas y estaba arriesgando mi vida por una desconocida. Estoy harta Carl, no puedo más... Tengo mucho miedo.

Carl la abrazó con fuerza, Lisbeth rompió en llanto. Necesitaba llorar, no quería abrumar a nadie con sus problemas. Se separaron un par de minutos después.

—Tienes que segur adelante, luchar por la gente que amas y confiar en mi padre. No puedes dejarte cegar por un simple abrazo, él te ama y no deberías dudar, nadie va a destruir esta familia y mucho menos Jessie.

Lisbeth se sorprendió un poco.

—Tienes razón, ¿puedes vigilarlos hasta que venga?

Asintió.

—Gracias por escucharme, iré a hablar con tu padre.

Salió de la habitación un poco nerviosa, tenia que dejar las cosas clara de una vez. Bajó las escaleras y halló a Rick en la cocina, el cual tenia la mirada fija en sus manos.

—Rick—le llamó—. Tenemos que hablar.

Él se levanto del taburete y ambos salieron al porche de la casa, compartían vivienda con Carol, Rosita, Abraham y Eugene. Se sentaron en el banco en completo silencio. Lis carraspeó la garganta antes de hablar.

—Siento haberme comportado así—dijo , le resultaba un poco doloroso hablar, Pete tenia la culpa—. Me puse celosa, odio admitir eso pero es lo que sentí cuando te vi como esa mujer. Sé que parezco una idiota ponerme así en este mundo apocalíptico pero tengo miedo de perderte, Rick.

Él se sintió culpable, entrelazaron sus dedos y hubo un breve silencio.

—Debes confiar en mi—contestó—. No voy a dejarte por ninguna mujer si eso es lo que piensas, yo ya te elegí a ti y me gustaría poder pasar el resto de mi vida a tu lado y con nuestros hijos.