No te vayas (SasuSaku)

Capítulo 44- "Nuevos comienzos"

Naruto POV's:

Estaba totalmente nervioso, pues hoy era el día en que por fin me convertiría en hokage...

Hinata me ayudó a alistarme, para así estar presentable en la ceremonia. Llegados al lugar, visualizamos a la multitud que se asomaba alrededor de la Torre Hokage.

-Naruto. Debes ir donde Kakashi, para dar comienzo a la ceremonia.- me avisó la abuela Tsunade.

-Hai.- obedecí.

Los nervios salían por mi boca, o era porque iba a vomitar en cualquier segundo.

-Naruto. Calma. El momento que siempre esperaste, ha llegado. Debes estar feliz, no nervioso.- mi sensei intentaba reconfortarme.

Pero él tenía razón. Luché tantos años por convertirme en el mejor ninja de la Aldea de la Hoja... Y ahora, es el momento en doy ese paso al frente.

La ceremonia pasaba a la velocidad de la luz, pero al momento de nombrarme hokage, Kakashi-sensei demoró cien horas.

¿Enserio me hará sufrir así?

-Ahora Nanadaime-sama hablará.

¿Qué?

-Amm... Creo que día a día, la vida nos presenta desafíos a superar. Obstáculos, que nos preguntamos: ¿Por qué me toca esto a mí? No podemos decir que sólo es cosa del destino, o de la casualidad. Creo que cada uno de nosotros, tenemos nuestra vida y nuestro camino, escrito y designado... Pero depende de nosotros, el hacerlo crecer y florecer. Una vez, un viejo sabio me dijo: ¿Cuál es el camino por el que te propones llegar a tu meta? No tenía respuesta sino, hasta el día de hoy. Toda mi vida, la forjé en base a un camino ninja que me propuse para crecer y avanzar, ser fuerte y mejorar. Era todo lo que me proponía, pues desde pequeño, anhelaba con convertirme en hokage algún día... Ese día... Para mi dicha, llegó. Pero no sólo soy ahora hokage, sino que quiero y espero, poder transmitir todos los buenos valores, que a lo largo de mi camino ninja gané, para poder llegar y llenar a cada ciudadano de la Aldea de la Hoja. Es mi objetivo, prometer mantener la paz y la unión de la Aldea, tanto en su interior como para con el resto de las aldeas. No quiero extenderme mucho más. Sólo terminaré diciendo, que cumpliré con mi palabra, dattebayo.

Tal vez, no sea el mejor discurso que pudiese dar... Pero, creo que ellos comprenden lo que trato de expresar con las pocas palabras que salieron de mi boca.

-Naruto...- gritó Sakura a lo lejos.- Felicidades. Ese discurso fue realmente alentador. Me alegra que al fin te nombraran hokage.- ella sonreía radiante.

-Felicidades, dobe.

-Gracias Sakura-chan, Sasuke. Iré a ver al resto. Los dejo.

Seguí caminando observando a mi alrededor, buscando a los chicos.

-Buen trabajo, colega.

-Ah, Shikamaru.- sonreí ampliamente.- Me alegra saber que tú serás mi mano derecha.

-Claro, no hay problema. El resto te espera para felicitarte. No los hagas esperar.- respondió sonriendo ligeramente.

-Naruto-kun...- Hinata.

Allí estaba mi bella prometida junto al resto de mis amigos. Sin dudas, logré hacer grandes amistades, de esas que durarán por toda la eternidad.

Una vez más, logré dejar de ser el niño solitario que solía ser, un demonio sin destino...

Tengo amigos, mis sensei, mis apoyos, seres queridos que ya no están entre nosotros, pero que sé que siempre me acompañan y están presentes (el sabio pervertido), y mis sueños, los cuales nunca acaban.

Ahora, yo soy Naruto Uzumaki, Séptimo Guardián del Fuego de la Aldea Oculta de la Hoja. Y como séptimo hokage, aseguraré la paz y la armonía absoluta en Konoha.