Thranduil

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Se levantaron temprano para llegar a tiempo a la hora de la comida que siempre era una hora solo para la familia. Legolas pensó que sería el mejor momento para que su padre conociera a Liliandil, nada muy formal. Liliandil miraba el camino perdida en el paisaje, con forme se acercaban a los paisajes cerca del castillo el nerviosismo se apoderaba de ellos aún más. En poco tiempo ya no podían disfrutar el paisaje de la misma manera sin pensar en lo que el Rey tenía que decir. Liliandil esperaba tener el apoyo de la Reina en ese momento, quería que el Rey fuera comprensivo. Empezó a jalar de las mangas del vestido mientras Legolas mordisqueaba sus uñas.

Llegaron antes de la hora así que dieron una vuelta por el palacio un poco vacío, todo estaban empacando para pronto irse, todos los tapetes y pinturas ya no estaban colgados, ahora eran solo rollos de tela en las paredes o junto a baúles listos para partir. Legolas apretó suavemente la mano de Liliandil, la tristeza y la nostalgia empezaban na abrirse paso entre sus emociones. Ver su casa vacía era difícil, nunca pensó que de verdad se irían, ahora el nerviosismo aumentaba. El comedor familiar quedaba al otro lado del castillo y ambos sentían que todo les temblaba. Se miraron el uno al otro para darse valor, respiraron profundo y comenzaron a caminar. Algunos elfos les hacían reverencia y otros les dedicaban una amable sonrisa. Eso solo lograba que se pusieran más nerviosos, apretaron más sus manos para darse valor y entraron al comedor.

La Reina usaba un simple vestido rosa pálido con algunos adornos plateados, el Rey usaba una túnica gris oscuro con adornos dorados en las mangas y en los botones, pantalones negros, botas altas y una corona de flores porque era primavera. La pareja platicaba tranquilamente tomados de la mano mientras esperaban su comida. Legolas sonrío, el matrimonio de sus padres le parecía el mejor de todos y quería uno parecido con Liliandil. Liliandil sonrió al ver como el Rey veía a su esposa, con tanto amor y como se perdían en los ojos del otro. Entonces miró a Legolas y se sonrojó al darse cuenta que la miraba de la misma manera. Caminaron hacia la mesa. La sonrisa se borró del rostro de Thranduil cuando vio a Liliandil. La Reina los miró preocupados y luego apretó suave la mano de Thranduil como si eso fuera a evitar que dijera algo mal.

-Así que ella es tu novia
-Futura esposa- dijo Legolas tratando de no sonar nervioso
-Yo no te he dado mi bendición ni mi aprobación. Eres un príncipe debes casarte con la hija de algún noble
-A eso hemos venido, queremos tu aprobación- Thranduil los miró con detenimiento
-Ella no es lo que quiero para ti, no les doy mi aprobación. Retírense y no quiero saber más de su relación.

Liliandil salió seguida por Legolas, las lágrimas caían por sus mejillas. Legolas la calmó y la abrazó. Ese día se prometieron el uno al otro que no importaba quien les diera la aprobación o no ellos se casarían, su amor era muy grande, nada se interpondría en su camino. Una vez dicho esto salieron a caminar para calmarse un poco y para disfrutar del cálido día primaveral en el bosque.Mientras tanto Thranduil se veía molesto. Mariana lo miró y le tomó la mano.

-Amor, dales tu aprobación. Se aman, es lo único que importa.
-No es lo que quiero para mi hijo, se debe casar con una elfa de la nobleza.
-Thranduil, si yo no hubiera sido hija de un Lord elfo, ¿te hubieras casado conmigo?
-Claro que sí
-Entonces deja que se casen
-Lo voy a pensar, con el paso del tiempo veré si es buena para él o no

Esa noche Liliandil se quedó mirando a las estrellas desde su cama. Legolas dormía tranquilamente al igual que todo Mirkwood. Se preguntó si todos los grandes amores tenían tantos problemas. Se puso a pensar en su familia y en lo feliz que los haría al darles la noticia de la boda. Miró a Legolas dormir y supo que no le importaba el Rey, solo su familia y su Legolas. Tanto nerviosismo en vano para esta conclusión pensó acomodándose en los brazos de Legolas para por fin quedarse dormida con una sonrisa enorme en el rostro.

NOTA DE LA AUTORA:
Perdón por la tardanza, salí de imprevisto ayer y regresé muerta de cansancio. Ya espero que regrese a los Viernes por fin. De verdad lo siento mucho.
Una pregunta fuera de tema ¿Les gusta cazadores de sombras? ¿Ven la serie?
Los quiero
-Mariana Pace.

El  amor de LegolasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora