No sé que somos, pero aún no te vayas...

Capítulo 70

Este capítulo no es un capítulo como los que yo acostumbro a hacer... Por eso pedí ayuda...así que, agradezco a quien me ayudó...y si por alguna razón no te gusta lo... Apasionado, o lo muy fuera del límite, omite este capítulo... Gracias y que lo disfruten :3
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Pasó toda la fiesta y algunos se quedaron algunos se fueron a un hotel, no todos cabían en la casa de Seth. Yo en este momento estaba en el avión rumbo a Inglaterra. A Ashley siempre le gustó ese país, y yo quiero que ella esté feliz, así que nuestra luna de miel será ahí. Desapareceremos cinco días, es una semana, pero dos días viajando más o menos...
Ya estaba aterrizando, odio los aviones... Cuando nos bajamos de él, hicimos todo para poder pasar legalmente al país. Una muy gentil señora nos ayudó a salir, y cuando salimos llamamos a un taxi.
Ya adentro le di la dirección, el asintió y entabló conversación con nosotras, por suerte hablaba español.
***
Duramos bastante, pero en el camino yo ponía atención donde él nos contaba cada lugar y cada historia. Llegamos al hotel, bajamos nuestras cosas, agradecimos al amable señor y entramos.
Bastante lujoso, digno de cinco estrellas. Nos registramos, lamentablemente la que nos atendió no hablaba español, y me tocó hablar en inglés, o a lo que pude hablar. Lo que entendía, lo llenaba, la joven me entregó las llaves, sonrió, yo agradecí, y caminamos hacia nuestra habitación.
27B era el número que nos correspondía, pase la tarjeta, la puerta se abrió. Dejé que mi hermosa esposa pasara primero, para después yo pasar y cerrar la puerta.
Ella veía todo el lugar con una sonrisa, tenía balcón, una cama matrimonial, dos baños, aire acondicionado, y lo mejor, era el internet, pero claramente lo uso y ella me puede matar...
- ¿Te gusta?-Le pregunto dejando las llaves en la mesa que estaba pegando a la pared junto a la cama.
- Me encanta...
Dicho eso, empezó a acomodar ropa.
La observaba mientras acomodaba sus maletas, en ese momento pensé que los besos ya no me bastaban, seguramente a ella tampoco. Yo la amo tanto y juro que quiero todo con ella, pero Ash me pone muy nerviosa y no sabía cómo comenzar. No era mi primera vez, pero me sentía como tal.
- ¿Qué me ves tanto?-Preguntó Ash con una sonrisa.
En ese momento no le conteste, me armé de valor y la empecé a besar, al principio era un beso inocente, pero luego empezó a hacerse más apasionado y excitante. Ella abrió más su boca y yo gustosa introduje mi lengua, al principio dio un pequeño salto, pero luego me siguió el juego y nuestras lenguas se acariciaron. 
Ella empezó a quitar mi blusa, como si le estorbara que la tuviese puesta y empezó a besar mi cuello, luego dejó pequeños mordiscos en este y así siguió bajando. Acto seguido me quito el sostén, para luego volver a mis labios, le gustaba tener el control, pero yo no sé lo iba a ceder todo, esa era mi oportunidad así que quite su blusa y su sostén, sabía que era sensible al tacto así que tomé eso a mi favor. Empecé a besar y morder su cuello, seguí bajando por su clavícula, hasta llegar al lugar que quería. Me detuve en esta zona en particular y me tomé mi tiempo, seguí bajando a su abdomen, escuchaba que ya estaba empezando a respirar más pesado, quité su pantalón, ya que al final de todo se cambio el vestido, lo más lento que pude realmente quería tomarme mi tiempo y no olvidarme de ningún lado, después de todo esperamos mucho para que este momento llegara.
Subí de nuevo a sus labios y la empuje suavemente a la cama, ahí quite sus bragas, bese sus piernas y sabía que ella ya se estaba desesperando, pero la quise torturar un rato más.
- Por favor...-Me suplicó ella con dificultad.
Le obedecí y empecé a lamer y succionar, ella gemía y empezaba a mover sus caderas al ritmo de mi lengua, seguí así hasta que ella alcanzó un orgasmo, no la deje descansar cuando introduje mis dos dedos.
Ella soltó un gemido ya que se sorprendió. Yo iba a un ritmo más rápido, metí un dedo más y Ash volvió a gemir, esta vez más fuerte, seguí así hasta que ella alcanzó otro orgasmo pero yo seguí con mi ritmo, lo que la hizo empezar a arquear su espalda y mover sus caderas al ritmo de mi mano.
La empecé a besar salvajemente de nuevo, ella empezó a gemir en mi boca, eso me excitaba. Llegó de nuevo a otro orgasmo.
Ash estaba completamente sudada y respiraba pesadamente. Yo tenía la intención de seguir y así lo hice.
- Rebe, no puedo más.-Me dijo en un tono de súplica.
Yo inmediatamente empecé a bajar mi ritmo hasta que saque mis dedos. Me acosté al lado de Ash y acaricié su cabello hasta que su respiración se reguló nuevamente.
Busqué mi camisa y me la puse, ella aún seguía desnuda. Se acostó en mi pecho viendo para abajo, y yo empecé a acariciar su espalda.
- Te amo.-Me dijo con un hilo de voz.
- Yo también.
Seguimos así hasta que dio la hora del almuerzo.