No sé que somos, pero aún no te vayas...

Final alternativo (Parte 2)

Cuando salí, me puse ropa cómoda, una camisa holgada sin mangas y un short azul, en la tarde me cambiaría para ir a la reunión. Salí de la habitación, llegué a la sala de estar, estaban Mati y Ashley jugando muy entretenidos, mientras Gaby jugaba con sus muñecas, sonreí ante esa hermosa escena, me detuve a ver a Ash, sus ojos estaban iluminados, su sonrisa era inexplicable, y como miraba a Mati era único. El sonido de la puerta me hizo sobresaltarme y salir de mis pensamientos, caminé hasta la puerta y del otro lado apareció mi hermano, milagrosamente solo.

- Hola.-Lo saludé.

Él me sonrió pero se borró rápido y se convirtieron en lágrimas. Cayó al suelo, lo abracé y a como pude lo llevé hasta la sala.

- ¿A tío Seth le pasa algo?-Preguntó Gaby intentando abrazarlo.
- No, princesa, es que se acaba de golpear el dedo pequeño y sabes lo que duele, ¿cierto?-Ella asintió.- Mira, ve con mami y con Mati, ¿sí? yo me quedaré a sanar el dedito de tu tío.
- Bueno...-Dijo, pero antes de irse le dió un beso en la mejilla a mi hermano.- Tío, el dolo pasa, y tu eles fuete.-Le dió dos palmadas en la espalda y se alejó.

Pasaron como cinco minutos y mi hermano seguía llorando, la diferencia es que yo ya estaba llorando con él, sabía perfectamente porque él estaba así, hoy hace más de cinco años murió Ty, ha pasado mucho, pero él aún no lo supera, la verdad yo tampoco, pero intento esconder el dolor.

- Lo extraño.-Decía casi gritando.
- Seth.-No me prestaba atención.- ¡Seth, mírame!-Tomé su mentón y lo levanté para ver sus ojos, estaban rojos, y él no se veía bien.- Yo también lo extraño, pero no podemos hacer nada. En este momento se puede estar riendo en el cielo por verte así.-Él sonrió, pero su sonrisa se borró en segundos.- Hazle caso a Gaby. Ella tiene razón, debes ser fuerte, tienes esposa, dos hijos, y dos hermanos, yo te cuido aquí, y Ty nos cuida arriba, ¿sí?-En lo último a mi se me quebró la voz y mis ojos se humedecieron pero no permití que las lágrimas salieran.
- Tienes razón.-Dijo secandose los ojos y sentandose en el sofá.- Pero... ¿cómo hago para que deje de doler?
- Siempre va a doler, porque ambos sabemos que nadie llenaré ese vacío que sentimos.

Bajó la mirada y yo empecé a acariciar su espalda con mi mano.

- ¿Te sientes mejor?
- Sí, necesitaba esto...te necesitaba.
- Okay, ¿Cómo no grabé eso? Mi hermano mayor diciendome que me necesita.
- No seas estúpida, obvio te necesito...pero bueno, solo quería llorar un rato.
¿vas a ir a la fiesta de planeó Lacey?
- Sí, y de hecho Ashley y yo queremos dejar a los niños donde mamá. ¿vas a dejar a Sara? Ash va confiada de que va para entretener a Gaby.
- Sí, la voy a dejar. De hecho, también está Natalia y Saúl. También lo vamos a dejar a él, Natalia va a ir, es un milagro, a ella no le gustan esas cosas.
- Que bien, yo tengo que terminar de arreglar unas cosas, aparte me tengo que terminar de alistar...
- Okay, nos vemos.

Salió de mi casa y yo busqué a mis amores por todos los cuartos. Los encontré en el cuarto de Gaby, todos viendo television. Entré y me acosté con ellos. Ashley estaba sentada, tenía a Mati dormido en brazos y Gaby estaba apunto de dormirse.

- ¿Ya se fue Seth?-Preguntó mi hermosa esposa.
- Sí.
- ¿Por qué estaban así?
- ¿Estaban?
- Vos también estabas llorando, te escuché.
- Por Tyler. Para Seth es como si fuese ayer que pasó todo. Para los dos es díficil.

No se dijo más, y unos minutos después, Gaby se había dormido, Ashley y yo nos levantamos, dejamos a Mati en su cuarto y nosotras nos empezamos a arreglar.
Me puse una camisa básica blanca, una camisa roja de cuadros por encima, un leggin negro, y unos botines cafés.
Por otro lado Ash se vistió con un vestido rojo ceñido al cuerpo y corto, se ve hermosa, como siempre.
Vestimos a los niños, yo guardaba las cosas de Mati y Ash las de Gaby. Gaby necesitaba más ropa, porque se quedaría a dormir, así que duró un poco más.
Guardé las cosas en el carro, senté a los niños en sus respectivas sillas, y un pequeño sentimiento surgió en mí...algo estoy dejando.
Salí del auto, corrí hacia la entrada y Ash estaba en la puerta con una sonrisa.
- Dejaste el celular.-Dijo entregándomelo.
- Eres la mejor...-Sonreí, la acerqué de la cintura y la besé.
Nos separamos y ambas entramos al auto. El primer viaje sería a casa de mi mamá, luego a la de Lacey. Dejamos a los niños y directo a casa de Lacey.
Llegamos con la dirección que nos envió y como siempre, fuimos las últimas en llegar.
- Hola, creíamos que no iban a llegar.-Nos recibió Lacey.- Tanto tiempo, preciosa.-Me abrazó fuerte.
- Sí, demasiado diría yo.-Se separó de mí para abrazar a Ashley.