―Voy a ayudar. ―repito decidida.
Liam sigue sin creerlo aún, y no entiendo por qué. No soy una zorra celosa que tenga que odiar a toda chica que pueda acercarse a él.
Pronto él nota que algo sucede, y que estoy pensando más de lo que debería, y sus brazos me vuelven a arropar. Cierro los ojos y respiro el aroma que él desprende. Cuánto he echado esto de menos.
―Eres la mejor. ―asegura con nuestros cuerpos aún pegados.
Al cabo de algunos segundos, ambos nos separamos. Su mano acaricia mi mejilla y se acerca para volver a besarme. Nuestros labios vuelven a fundirse en unos solos y mi corazón late tan fuerte que está compitiendo con el suyo.
Liam separa nuestros labios aunque mantiene la poca distancia entre nosotros. Sonríe y dice:
―El nemeton puede esperar. Ahora te quiero para mí.
Una risa nerviosa se escapa de mis labios y asiento. Jamás he tenido una especie de cita con Liam, ¿es que esto era una?
Nuestras manos se entrelazan y él, prácticamente, me arrastra hacia la salida de la biblioteca. Ya fuera, Liam le dice a Mason que el plan se aplaza hasta mañana, y comienza a buscar algo con la mirada.
― ¿Y tu coche? ―pregunta y luego desvía su mirada hacia a mí con una sonrisa.
Le miro confundida, ¿a dónde quiere ir?
Señalo hacia la dirección donde aparqué hace un rato, y sin darme tiempo a preguntar nada, Liam arrastra mi mano hacia mi coche.
―Va a ser divertido. ―comenta entre risas.
No sé de qué habla, pero me limito a asentir con una sonrisa en mis labios. Quito el seguro del coche, y camino hacia la puerta del asiento del piloto para poder conducir. Sin embargo, un rápido Liam se adelanta y se sienta antes que yo.
Una sonrisa aparece en mis labios y mis brazos se cruzan. Sé que a Liam le gusta jugar.
―Vamos Liam, sal de ahí. ―comento divertida, pero él niega con la cabeza. La sonrisa se borra de mis labios. ―Liam, no tienes permiso de conducir.
Liam mantiene la sonrisa y cierra la puerta del conductor, dejándome fuera sin entender absolutamente nada. Me hace señas para que camine hacia el asiento del copiloto. Obedezco, pero no muy conforme. Él no tiene permiso, no puede ni debe conducir.
―Vamos, fuera de mi coche. ―le digo desde la puerta del asiento del copiloto, pero él señala con las manos el asiento para que me siente.
Vuelvo a obedecer, aunque no antes sin rodar mis ojos. Liam ríe y pone sus manos al volante.
― ¿A dónde le gustaría viajar, madame?
Sonrío y dejo caer mi cabeza al reposacabezas.
―Eso hubiese estado bien, si hubieses sido de verdad un caballero y me hubieses abierto la puerta. ¡Pero literalmente has corrido para dejarme fuera! ―río con fuerzas. Liam gira su cabeza y me guiña un ojo.
Liam, no vuelvas a hacer eso. Primer aviso.
―Sí, lo habría hecho encantado, pero alguien iba dispuesta a este asiento. ―señala con sus dedos donde está sentado.
―Obvio, es mi coche.
Liam se encoge de hombros. ―Pero ahora conduzco yo.
―No tienes permiso. ―le recuerdo.
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Ahora, tú controlas. #3 || Liam Dunbar (Teen Wolf)
FanfictionEl cambio llega para todos, y ahora lo hizo con April. Es el turno de Liam. Es su turno para ayudarla a tomar el control. ...