Ahora, tú controlas. #3 || Liam Dunbar (Teen Wolf)

Capítulo 28 - No me dejes.

APRIL POV'S

Después de detener el coche en la zona de aparcamiento del instituto, los dos salimos en silencio. Liam está muy raro. No habla y apenas me mira. Está completamente diferente a la última conversación que tuvimos, en la que él me pedía perdón y otra oportunidad. Incluso antes, cuando estuvimos hablando en el coche, él se había retirado justo cuando parecía que fuésemos a besarnos.

Es como... Como si se hubiese rendido.

Quizás lo ha hecho, quizás se ha cansado de insistir. Pero entonces pienso en que apenas ha pasado algunos días desde que él me pidió otra oportunidad. Es imposible que la espera se le haya hecho eterna si de verdad me quiere.

Tal vez no tiene nada que ver con nosotros, y de verdad está mal por Mason. Claro, debe estarlo. Y yo pensando como una idiota en mí. Tal vez debería apoyarle, decirle que todo va a ir bien, aunque no lo sé. No sé si mentir está ahora justificado. No sé si alguna vez lo ha estado.

―Ya no llegamos a clases. ―dice rompiendo el silencio. Le observo, él está ausente y su mirada está vacía, no expresa nada. Me da lástima y a la vez me rompe el corazón verlo de esa manera.

De repente ya no siento rencor hacia Liam. La rabia se esfuma y necesito abrazarlo, pero no lo hago. No me atrevo. No aún. En su lugar le agarro de la mano. Él parece sorprendido, pero intenta no reflejarlo en su rostro. No dice nada, yo tampoco. Supongo que ninguno de los dos quiere romper el momento.

Tiro de él, tomo la iniciativa, y caminamos juntos de la mano. Avanzamos hacia el campo de Lacrosse. No hay nadie y nos sentamos en las gradas.

Miro de reojo a Liam, él parece estar en su mundo. Ya no estamos cogidos de la mano, y aprovecho para sacar de la mochila un paquete de chocolatinas. Le ofrezco y él acepta. Ambos empezamos a comer en silencio mientras miramos hacia nada.

―No te conté sobre mi ancla. ―inicio la conversación. Él deja de comer y me mira. De repente parece realmente interesado y decide prestar toda su atención en mí. ―Descubrí que es mi hermano, ya sabes, el bebé. Va a ser un niño.

Liam sonríe y juro que tiene la sonrisa más bonita del mundo. Ahora es él quien agarra mi mano y la acaricia.

―Eso es genial, April. Y verdaderamente bonito. Pero con respecto a tu consejo... Yo no sé qué puedo hacer para poder vivir con tu ancla lejos.

―Creo que podré... Podremos superarlo. ―me corrijo pronto. Sé que para él no será nada sencillo vivir lejos de mí.

Liam vuelve a comer un poco de chocolate. Está pensando en algo, probablemente en Mason. Debe creer que está perdiendo el tiempo conmigo, mientras debería estar buscando a su amigo para conseguir salvarle.

Pero mi egoísmo me supera. No puedo estar sentada, junto a Liam, y evitar pensar en nosotros, en mí. De repente siento la necesidad de hablar las cosas, de darnos otra oportunidad, de decir todo lo que queramos cara a cara.

No es el momento, pero lo necesito.

―Liam, con respecto a nosotros...―comienzo a decir.

Liam deja de comer y hace un ademán de interrupción. Me acaricia la mano y con la otra mano remueve su cabello.

―Ya lo sé, April. Necesitamos un tiempo para volver a confiar el uno en el otro. Lo sé.

Oh.

Aunque no es la respuesta que espero, la acepto. Fue todo lo que le pedí, y lo que ha decidido conceder, y ahora es él quien necesita el tiempo.

Pero duele. Duele mucho.